La víctima de la mayor remontada de Nadal continúa sin superarlo: "Algunas cosas siguen siendo inexplicables"

Una de las estadísticas que más se utilizan cuando llegan los Grand Slam esla cantidad de veces que un tenista ha sido capaz de remontar una desventaja de dos sets en partidos al mejor de cinco mangas. Rafael Nadal se ha visto 2-0 abajo en 25 ocasiones y sólo en cuatro de ellas consiguió dar la vuelta a la situación. De las tres primeras pocos se acordarán, pero la última fue de tal calibre que su rival todavía no lo ha superado.

Hablamos de la final del Open de Australia 2022. Nadal estaba de vuelta en una gran final sobre pista dura tres años después y enfrente tenía a Daniil Medvedev, entonces número dos de la ATP y que venía de coronarse meses antes en el US Open nada menos que ante Novak Djokovic. El serbio no había podido competir en aquel Open de Australia después del sainete con la vacuna que terminó con su deportación y, desde casa, vio cómo Nadal hacía lo imposible.

"Es la mayor hazaña de su carrera y con diferencia", recordaba hace un año en Relevo Marc López, entrenador de Nadal y que vivió aquella final en el box del balear de la Rod Laver Arena. "Cuando aterrizamos en Australia, Rafa venía de cinco meses sin competir y tuvo Covid antes de volar".

Pero todas las dificultades previas se quedaron en nada en comparación con lo que ocurrió en la pista. Medvedev, un muro, se llevó los dos primeros sets por 6-2 y 7-6. Nadal estaba muy tocado después de perder esa segunda manga, en la que llegó a tener un set point con 5-3 y saque a favor. Mediado el tercer set, Medvedev tuvo la oportunidad de darle la puntilla: 3-2 arriba y 0-40 al resto. Pero Nadal revivió y terminó llevándose el duelo por 2-6, 6-7, 6-4, 6-4 y 7-5 después de cinco horas y 24 minutos para levantar su Grand Slam número 21.

Aquella derrota dejó tocadísimo a Medvedev, que estuvo hasta agosto de 2022 sin volver a levantar un título. Y aunque desde entonces ha vuelto a pisar dos finales de Grand Slam y ha conquistado ocho trofeos, el ruso ha reconocido estos días en una entrevista con Clay que todavía no lo ha superado.

Preguntado por cuál ha sido el mayor reto mental al que se ha enfrentado en su carrera, el ruso responde sin miramientos: "Fue el partido contra Rafa Nadal en el Abierto de Australia hace dos años. La final que perdí. Fue muy duro para mí. Por muchas razones. Suelo mirar hacia delante después de los partidos. Esta vez fue diferente. No dejaba de recordar aquel partido contra Rafa".

"Muchas cosas se me quedan grabadas en la mente hasta el día de hoy. Algunas cosas siguen siendo inexplicables. Pero una cosa es cierta: aprendí mucho de la derrota. Puede que también me haya convertido en mejor jugador gracias a ella", añade el actual número cuatro del ranking ATP.

Medvedev regresó este enero a la final del Open de Australia y la historia se repitió. Se llevó los dos primeros sets ante Jannik Sinner por 6-3 y 6-3, pero después acabó cediendo por 6-4, 6-4 y 6-3. El fantasma de Nadal había vuelto. "El resultado ha sido parecido, pero el partido ha sido diferente. La verdad es que no pensé mucho en el partido de Rafa porque lo quería dejar atrás. Si estuviera pensando en el partido de Rafa no ganaría ningún partido al año", dijo aquel día después de la final.

"No sé que va a pasar ahora, pero sí es cierto que la derrota con Rafa me afectó. Y no sé si por eso o por otra cosa, pero al final tuve la peor temporada de mi carrera. Veremos cómo me afecta esta derrota ahora", añadió. De momento, el ruso sólo ha jugado un torneo desde Australia, el de Dubái, y perdió en semifinales. Esta semana busca el título en Indian Wells.

Para ver las otras tres remontadas de Nadal con un 0-2 en contra hay que viajar bastante al pasado, cuando los partidos a cinco sets no era cosa sólo de los Grand Slam, sino también de la Copa Davis y de la finales de los Masters 1000.

La primera vez que Nadal levantó una situación así fue en la final de Madrid de 2005. Por aquel entonces el torneo se jugaba en pista dura en el rocódromo de la Casa de Campo y el balear se enfrentaba en la final a Ivan Ljubicic, el croata que años después se convirtió en entrenador de Roger Federer. Nadal se impuso por 3-6, 2-6, 6-3, 6-4 y 7-6.

Las otras dos remontadas llegaron en Wimbledon. Una ante el estadounidense Robert Kendrick en la segunda ronda de 2006 (6-7, 3-6, 7-6, 7-5 y 6-4) y otra frente al ruso Mijail Youzhny en los octavos de 2007 (4-6, 3-6, 6-1, 6-2 y 6-2).