US OPEN

El regreso del VAR al tenis no impide una decisión más que injusta de una jueza de silla

El partido entre Kalinskaya y Haddad-Maia tuvo una de las jugadas más polémicas de los últimos tiempos. Y la árbitra mantuvo su decisión inicial pese a la repetición.

Imagen de la revisión de VAR de la jugada de la polémica en el Kalinskaya-Haddad-Maia. /US Open
Imagen de la revisión de VAR de la jugada de la polémica en el Kalinskaya-Haddad-Maia. US Open
Nacho Encabo

Nacho Encabo

Después de que en el Masters 1000 de Cincinnati se produjeran varias jugadas polémicas que no se pudieron resolver por la ausencia del VAR, parte del circuito celebró que el US Open recuperara el videoarbitraje en el tenis. Sin embargo, la noche del sábado dejó una escena totalmente surrealista en Nueva York, donde una jueza de silla mantuvo su decisión inicial pese a que las repeticiones mostraron claramente que se había equivocado.

El sistema de VAR en el tenis tiene un funcionamiento similar al del fútbol -una sala con otros árbitros revisando situaciones polémicas y repeticiones para el juez de silla- y se estrenó hace un año, en el US Open de 2023. Ningún otro torneo lo ha empleado desde entonces, limitándose la mayoría al uso de la tecnología del ojo de halcón. Pero la Federación Estadounidense de Tenis, la USTA, anunció a mediados de agosto que los cuatro estadios principales más las cuatro pistas más importantes tendrían revisión de VAR.

El problema ha llegado cuando la jueza de silla alemana Miriam Bley ha hecho caso omiso de las repeticiones que le mostraron desde la sala de videoarbitraje para mantener su decisión inicial, una decisión incorrecta. Pero vayamos por partes.

La rusa Anna Kalinskaya va ganando 2-0 a la brasileña Beatriz Haddad-Maia en la tercera ronda del US Open. Haddad-Maia está al servicio y el juego va 40-40 cuando la brasileña llega aparentemente tarde a una pelota. Consigue darla, la mete en pista y la juez de silla le otorga el punto. Pero Kalinskaya no está de acuerdo: está convencida de que ha habido un doble bote antes del golpeo de Haddad-Maia y solicita la revisión de VAR (cada jugador tiene tres oportunidades por set más una más en caso de que haya tie-break).

La jueza Miriam Bley avisa a sus colegas de la sala de televisiones, que le muestran las repeticiones en su tablet y en las pantallas gigantes del estadio Louis Armtrong, el segundo más grande de complejo. Las imágenes no dejan lugar a la duda: la pelota ha botado dos veces antes de tocar la raqueta de Haddad-Maia, por lo que sería punto para Kalinskaya y bola de break para colocarse 3-0 y servicio. Pero la jueza de silla, para sorpresa de todos los presentes, dice que no, que ella no ve el doble bote y que el punto es para la brasileña.

Momento de la discusión entre Kalinskaya y la juez de silla.  Getty
Momento de la discusión entre Kalinskaya y la juez de silla. Getty

Número 15 del ranking WTA con 21 años, Kalinskaya no puede creer lo que está viendo y le intenta explicar a la árbitra lo que aparece en las pantallas. Mientras, Haddad-Maia, que aguardaba también en la red la decisión, da unos pasos atrás y se aleja de la escena. La brasileña también podría haber concedido el punto a la rival, pero prefirió callar y tener una ventaja para ponerse 2-1 y recortar distancias.

En esa situación, poco más puede hacer Kalinskaya, que se resigna y se marcha a su lado del campo. Pero su cabeza ya no volverá más al partido: un rato después pierde por 6-3 y 6-1 y se despide del US Open.