Las lágrimas de Nani Roma en el Dakar esconden un cáncer y diez años de espera: "Estos días te hacen olvidar todo lo pasado"
El catalán conquistó la etapa diez, pero no pudo celebrarlo con su familia por los problemas de cobertura del desierto.

Shubaytah (Arabia Saudí).- Problemas con la ventilación de su Ford Raptor. Alertas preocupantes y continuas de los sensores del aceite. Un fallo de motor que le dejó sin opciones deportivas al tercer día de competición. Un accidente frontal con un rival cuando ambos coches andaban perdidos. El accidente que dejó a su hijo Marc parapléjico con 15 años. Un cáncer de vejiga detectado en 2022 que le dejó sin correr al año siguiente. De menor a mayor importancia, a Nani Roma le ha pasado todo en 52 años. Y lo ha superado todo. Yendo siempre con todo.
Diez años ha tenido que esperar para volver a ganar una etapa del Dakar: "¿Sí, diez años? ¡Ostras, ya no me acordaba!". En 2015 ganó con Mini y, desde entonces, ha vivido penurias hasta volver a colgarse la medalla de oro de etapa del Touareg. Tras tanto sufrimiento, sabe mejor. "Me acuerdo de muchas cosas porque son muchos años. Desde el 2019... imagínate lo que ha pasado desde entonces. Muchas cosas personales y esto, lo primero, te satisface como profesional", expresó ante un grupo de medios donde estuvo Relevo.
Preguntado por si han sido años complejos, el catalán se abrió en canal. "Más que complejos, diferentes desde el 2019, que nos quedamos sin equipo. Luego ya todo el proyecto de Hunter, que al inicio era todo muy nuevo, luego la enfermedad... Todas las situaciones han pasado y ahora estamos aquí con un equipo maravilloso, con un coche que es muy agradable de conducir, divertido. Aunque hayamos sufrido, porque lo hemos pasado, es un coche que tiene mucho potencial y contento de formar una pequeña parte de todo esto".
El bicampeón del Dakar, en coches y motos, vivió una tarde muy especial junto a su equipo. A Roma se le pasaron por la cabeza todo tipo de emociones: se acordó de lo malo y de lo bueno en todo ese tiempo trabajando y sin victorias. "Cuando tienes una situación como la que nos ha pasado, estamos todos más sensibles. El hecho de poder ganar una etapa delante de Ford, si al final trabajamos aquí, al final nosotros trabajamos para ganar, no venimos aquí a pasearnos. Este proyecto es para ganar y poco a poco tenemos que aprender cosas todavía, tenemos que mejorar cosas del coche, pero ganar una etapa está bien".
A stage win in the 2025 @dakar Rally! @NaniRoma and Alex Haro have raced the @Ford Raptor T1+ to a win through the first huge dune stage of the world's toughest rally. 💪 pic.twitter.com/OirTTMeaPG
— Ford Performance (@FordPerformance) January 15, 2025
La emoción se instaló cuando se bajó del coche. En ese momento, en la meta, todavía faltaban varios rivales por marcar sus tiempos pero la victoria empezaba a asomarse. En sus primeras palabras, estuvo cerca del llanto, mientras se apoyaba en su Raptor tras soportar un calor abrasador. Como detalle, le falló el aire acondicionado desde bien pronto y las pasó canutas en las dunas.
"Os aseguro que he llegado y estaba superfatigado, el aire acondicionado no funcionaba, teníamos mucho calor y hemos llegado cansados, pero con un maravilloso feeling. Es una situación genial porque yo creo que estos días te hacen olvidar todo lo pasado, ¿no? Esto es lo que vale la pena en el deporte. El deporte vale mucho la pena cuando al final corremos. Trabajamos para esto, para ganar etapas y ganar carreras. Cuando te pasa, 'pum', te olvidas de todo lo pasado y es superdivertido".
🚘 Nani Roma won his first stage since 2015! Very emotional alongside co-driver Alex Haro, he could not contain his joy! 🥹👏
— DAKAR RALLY (@dakar) January 15, 2025
📸 A.S.O. | Julien Delfosse | DPPI Images#Dakar2025 #DakarInSaudi pic.twitter.com/hQr0FEMUfy
El momento de bajar del coche desprendió euforia contenida. Tanto Roma como su copiloto Álex Haro estaban pletóricos pero todavía no eran ganadores. Los últimos coches por llegar podían arrebatarles el triunfo, el primero de Ford. Ambos olían que habían sido los más rápidos de la etapa diez, invadida por las dunas del 'Empty Quarter', uno de los desiertos más monstruosos del planeta.
Celebración interrumpida
"Estaba muy cansado, más que emocionado, estaba hecho polvo. Son muchas cosas. En esta carrera sabes la intensidad que es un Dakar, ¿no? Lo que nos cuesta prepararlo. Este año con toda mi historia personal me ha costado mucho hacer todos los test y luego prepararme. He tenido que hacer doble sesión de entrenos para estar en forma, luego que el tercer día cuando tú estás siguiendo todo tu plan, estás compitiendo bien, te quedas fuera por un problema mecánico... pues te deja tocado".
La celebración en casa de los Roma fue peculiar. Los problemas de cobertura del desierto complicaron la vida al catalán. "Es una lástima, porque no entiendo cómo en el siglo XXI estamos en un sitio donde no hay señal telefónica. Con un evento que termina aquí, de los más famosos del mundo, no tenemos cobertura. No he podido ni hablar con mi casa, ni nada, pero sí que es verdad que es una victoria para Marc (Roma, su hijo), para Rosa (Romero, su mujer), para las niñas, Abril y Julia (sus hijas), que están en casa trabajando duro. Marc está trabajando muy duro y esta victoria también es parte para ellos".
En su triunfo, miraron de reojo a su compañero ausente desde el tercer día, Carlos Sainz. El vigente campeón fue obligado a abandonar por la Federación Internacional tras su accidente en la etapa 48h. "Lo de Carlos es lo peor que te puede pasar, porque mira, yo al final rompí el motor, me pusieron un motor nuevo y estoy aquí probando muchas cosas, compitiendo. Carlos está en casa, y esto, ostras, esto toca más. Como él dice, ya tenemos todos canas y sabemos que es parte del juego. Cuesta aceptar, pero es lo que hay".