Robert Navarro habla por primera vez de su salida de la Real Sociedad: "Nunca pedí ser titular o jugar todos los partidos; hubo situaciones extrañas"
El atacante del Mallorca y la Sub-21 recupera su mejor fútbol. Este verano salió por la puerta de atrás de Donosti: "Me dijeron que o renovaba o no iba a jugar ni un minuto".
Sotogrande (Cádiz).- Robert Navarro (22 años) flotó sobre el campo en el España-Kazajistán del jueves como cuando acaparó la atención del mundo en Barça, Mónaco y Real. La temporada pasada, en Cádiz, le sirvió para recuperar la continuidad perdida (2.000 minutos y un rendimiento sobresaliente) y este curso ha encontrado su lugar en Mallorca. La dirección deportiva apostó por él, para Arrasate es casi un intocable y se ha ganado a un vestuario que le adora. Como consecuencia de su buen momento, Santi Denia le devolvió a la Sub-21 en el parón de septiembre (fue titular y marcó un gol decisivo en Hungría) y le ha dado continuidad y galones en la actual ventana. Contra los kazajos, en La Línea de la Concepción, repartió dos asistencias maravillosas y se entendió a la perfección con sus amigos Mateo Joseph y Raúl Moro.
Pero no todo en los últimos meses ha sido positivo para el navarro, ni mucho menos: este verano, al regresar de su cesión en Carranza y ante su negativa a ampliar su contrato, la Real Sociedad le dejó sin dorsal y le colocó en una situación "difícil". Con su más que posible fichaje por el Athletic en 2025 como telón de fondo, y con recados del presidente Jokin Aperribay que no gustaron a su entorno para justificar su marcha ("cuanto menos ruido tuviésemos dentro, mejor"), salió por la puerta de atrás de Donosti y del club que apostó por él cuando tenía sólo 17 años. Un mes y medio después de su adiós, el mediapunta elige Relevo para romper su silencio. Todos han hablado de él… y ahora le toca por fin expresarse.
Antes de nada, Robert… Te reenganchaste casi de rebote a la Sub-21 y has sido de lo mejor en los últimos dos partidos. ¿Contento?
Mucho. Había estado en convocatorias anteriores, pero el míster volvió a llamarme en septiembre por la pena de la lesión de Moleiro y tuve la suerte de jugar de titular en Hungría, ganar, marcar y que con esa victoria nos clasificásemos para el Europeo. Ayer (contra Kazajistán) también me sentí bien.
¿Cuál es la clave para que estemos viendo de nuevo al Robert que nos enamoró a todos?
Bueno… Vengo de sumar bastantes minutos con mi club. Jagoba me está dando confianza y me está ayudando. En el Cádiz, la temporada pasada, ya jugué mucho y empecé a disfrutar de continuidad, a estar más cómodo. He ido sumando experiencias y agradezco las oportunidades.
Santi Denia te utilizó pegado a la banda en Hungría y de mediapunta ante Kazajistán. ¿Dónde prefieres jugar?
Puedo desplegarme en cualquier sitio del ataque. En Mallorca nos metemos por dentro y Santi (Denia), cuando llegué, me comentó que me había traído para jugar de mediapunta en esta convocatoria. Yo, lo que diga el míster. Mientras goce de minutos… Tener esa polivalencia es bueno para el entrenador y para darle alternativas. Me beneficia.
En el último encuentro, eso sí, se ganó por los pelos a los kazajos (4-3) y el míster se puso serio en el vestuario. ¿Qué os dijo?
Que aunque ya estemos clasificados, y teniendo el partido controlado con 4-1, no puede ser que se pongan 4-3 con dos goles rápidos. Acabamos sufriendo. Hay que intentar manejar mejor los encuentros, sobre todo en los últimos minutos. Luego, en fases finales y contra rivales potentes como Italia o Inglaterra, lo puedes pagar.
¿Es más fácil brillar cuando uno está rodeado de jugones? Mateo Joseph, Raúl Moro, Pablo Torre…
Lo hacen sencillo, sí. Estoy muy a gusto. El grupo es buenísimo, sanísimo; nos conocemos desde hace tiempo y eso se nota en el campo. El ambiente me parece increíble.
Luego volveremos a la Sub-21, pero esta es la primera entrevista que concedes desde que saliste de la Real y firmaste por una temporada con el Mallorca. ¿Te ha afectado todo el ruido que se ha generado en torno a ti en los últimos meses?
Bueno… (suspira). La verdad es que, por suerte, mi familia y la gente que me envuelve intenta que esté centrado y me aconseja lo que me viene mejor. A mí lo que me gusta es jugar. Trato de ser un chico profesional, cuidarme, pensar siempre en el fútbol, trabajar y estar a tope para encontrarme en buena condición. Lo que se hable fuera no depende de mí, son cosas externas; estamos expuestos a eso y debemos llevarlo lo mejor posible.
Voy al grano: ¿por qué decidiste irte de la Real?
En la 22-23, el año antes de irme a Cádiz, tuve minutos a principio de temporada. Luego me pasé cuatro meses sin jugar. Creo que salí 8' en un partido suelto. Después llegó la pretemporada… y me entraron dudas. No sabía si iba a disfrutar de continuidad. Creo que soy joven y que me faltaban minutos. Fui hablando y pensé que lo mejor para mí era salir. Allí no iba a jugar. Tomé la decisión correcta. En Cádiz me sentí muy a gusto y disfruté muchísimo pese a que colectivamente no conseguimos el objetivo de salvarnos. Les estaré siempre superagradecido.
Luego volví a la Real este verano… y hubo situaciones un poco extrañas. Entré en el último año de contrato y hay variables allí que también pesan en el club. Intenté tomar la mejor decisión para mí y el club intentó lo mismo para ellos. Ahora, en Mallorca, estoy muy feliz y contento. Me siento agradecido a la Real por los cuatro años que milité allí. Y me llevo a todos mis compañeros, que eso es lo mejor.
Cuando hablas de que hubo variables que también pesaron en el club, ¿a qué te refieres?
El club intenta convencerte de que renueves, tú no lo ves claro, porque ya el año anterior me tuve que ir para tener minutos… Y son situaciones complicadas: entiendes tu parte y también al club. Cada uno mira por lo suyo. Al final decidimos que lo mejor era que saliese.
¿Cómo es tu relación con Imanol Alguacil? Da la sensación de que jamás ha confiado en ti, ni siquiera cuando rendiste a un buen nivel.
Ima, como entrenador, es espectacular. Siempre lo he dicho: da unas herramientas increíbles para analizar al rival y para saber qué tienes que hacer en cada momento. Ayuda un montón a los jugadores. Pero somos muchos en plantilla. Yo nunca he pedido ser titular o jugar todos los partidos; sólo quería, como en mi primer año, tener minutos e ir entrando. Dentro de mi rol, esa temporada me sentí importante. Creo que es necesario disponer de la continuidad que después, de un día para otro, desapareció. Son situaciones que ocurren en todos los equipos. Estoy agradecido por lo que me exigió entrenando y lo que me hizo mejorar como futbolista.
"Imanol, como entrenador, es espectacular, pero somos muchos en plantilla. Creo que es necesario disponer de la continuidad que de un día para otro desapareció"
Jugador del Mallorca y la Selección Sub-21¿Te dolió salir así de la Real, por la puerta de atrás?
El último mes de pretemporada fue duro. No es fácil sobrellevar esa situación con 22 años. Me centraba en lo mío y me reforzaba que mis compañeros, que son increíbles, estuvieran conmigo en todo momento. A pesar de que salieran cosas que dolían un poco, ellos me respaldaban y mi familia, en casa, me apoyaba. Intenté estar tranquilo, al margen y esperando a que se solucionase de la mejor manera para todos.
Empezaste la pretemporada con normalidad, pero luego te dejaron sin dorsal y sin convocar.
Sí, no es sencillo. Llegué allí… y me dicen que o renuevo o no voy a jugar ni un minuto. Tú, como futbolista, tienes un contrato, eres profesional y debes cumplirlo. Mi sensación era que, si no veía que iban a confiar en mí, renovar después de haber ido a Cádiz el año anterior y de que al llegar allí me dijesen que o renuevo o no juego… Es un poco extraño, sobre todo de cara a coger confianza y al saber que, si renuevo y vuelvo a estar otro dos años sin jugar, sería difícil. Te estás jugando tu carrera, por así decirlo. La mejor decisión era salir.
Muchas informaciones apuntan que tienes encarrilado tu fichaje por el Athletic en 2025. Por el Mallorca firmaste sólo por un año.
La gente habla, pero yo estoy muy tranquilo. Esto acaba de empezar. En Mallorca firmé un año, sobre todo, para poder disfrutar como lo hice en Cádiz y luego elegir mi futuro con libertad. Quiero saber que, si voy a otro sitio o sigo en Mallorca, es porque quiero ir allí. Eso fue lo que más pesó en mi decisión al salir de la Real; no quería atarme a un club durante muchos años. Luego no sabes qué puede pasar: viene un entrenador, no estás a gusto… Todavía es muy pronto para hablar. Estoy muy a gusto en Palma. Luego, ya se verá. Ahora mismo es hablar por hablar.
Tienes cerca a tu agente Félix Tainta, al que algunos llaman el 'Mendes' de Euskadi y representante, entre otros, de los hermanos Williams. ¿Qué papel ha jugado él contigo en esos momentos difíciles?
Félix tiene mucho peso en mi gente. Lleva conmigo desde que me fui para Barcelona con 10 años. Conocía a mi padre y a mi tío. Tenemos una relación muy personal. No lo veo como mi agente; es como un segundo padre dentro del fútbol. Me aconseja, me ayuda y está siempre pendiente. Su función como representante la hace muy bien. Negocia con éxito y, sobre todo, es sensato y honesto. Eso le caracteriza mucho. Por eso lleva a los jugadores que lleva y por eso les acompaña desde hace tanto tiempo.
Volvamos a lo deportivo: ¿te sientes ahora un futbolista más maduro que antes de salir cedido al Cádiz?
Sí. Allí aprendí muchas cosas. Venía de jugar en categorías inferiores con el Barça, luego en el Mónaco, después en la Real… Todos suelen tener la pelota y ser dominadores. En Cádiz toca sufrir, replegarse, idas y vueltas y un juego más directo. Me sirvió. He mejorado gracias a ello y les estoy superagradecido. Tanto a mí como a mi familia nos trataron de forma espectacular.
"En Cádiz aprendí mucho, sobre todo a sufrir; espero que algún día vuelvan a Primera"
Jugador del Mallorca y la Selección Sub-21El equipo descendió, pero tú te marchaste con el cariño de toda la afición.
Eso fue increíble. Ibas por la calle y, pese a los resultados y una racha de no ganar de más de 20 partidos, la gente me veía y me animaba. Me sorprendía. Le estoy agradecido al club, al presidente, a los entrenadores y al vestuario. Espero que algún día puedan volver a Primera y, quién sabe, volver a ese campo es algo muy especial para mí.
¿Qué sientes que te queda por mejorar para acabar de marcar diferencias?
Bueno… Acaba de empezar la temporada. Llevo un mes en Mallorca, pero me he sentido ya muy cómodo. Tengo unas ganas increíbles de volver. Estoy hablando con Toni (Lato), Valery, Pablo (Maffeo)… tenemos un grupillo superbueno. Pese a que en la última jornada en el campo del Espanyol no estuvimos del todo finos, llevábamos tres victorias y la sensación es positiva. Todo el staff me ayuda. Disfruto del día a día.
Supongo que, cuando la Real da el brazo a torcer para dejarte salir, tendrías un montón de ofertas. ¿Por qué el Mallorca? ¿Arrasate habló contigo?
No. Todo se hizo con Pablo Ortells, el director deportivo. Estuvo pendiente durante todo el tiempo de la situación, apretó y me comentó que el míster quería que fuese para allí. Hablé con Jagoba al llegar y me dijo lo que quería de mí, lo que veía que podía aportar.
Te quejarás de maestros: Denia, Arrasate, Xabi Alonso, hasta Thierry Henry…
Sí, he aprendido de todos un montón. Henry me hizo debutar en Mónaco con 16 años. No lo olvidaré nunca. Con Xabi estuve tres temporadas y me ayudó a crecer. Siempre intenté escucharle al máximo y aprender de él. Alguna vez le mando algún mensaje y él a mí también. Tenemos una relación muy buena. Hemos perdido algo de contacto, porque cada uno tiene su vida, pero sí nos mensajeamos y nos damos la enhorabuena. Es un crack. Me alegro de que ahora pueda demostrar el gran entrenador que es. Jagoba me ha sorprendido por el trato, por cómo analiza todo, por cómo transmite y por su gestión de grupo. Eso es algo que valoro mucho de un técnico.
¿Tenías alguna esperanza de acudir a los Juegos Olímpicos de París?
Siempre guardas esa ilusión, pero había mucha competencia. Fueron otros… y mira lo que consiguieron. Lo viví desde casa con orgullo. Me alegré especialmente por Turri (Beñat Turrientes). Llevo con él desde los 16 años y le considero mi mejor amigo dentro del fútbol.
¿Acudir al Europeo del próximo verano es tu próximo gran objetivo individual?
Sí. Lo tengo en mente. Hemos hecho una buena clasificación. Cada partido con la Selección es único, una oportunidad. Ojalá el míster me tenga ahí.
¿Quiénes son tus mejores amigos en la Sub-21?
He coincidido con muchos: con Raúl (Moro) en el Barça, con Javi (López) llevo desde la Sub-16, a Mosquera no lo conocía y es un chaval increíble… Encajo con todos.
No te molestamos más. Muchas gracias, Robert, y suerte para el martes y en lo que se viene con tu club.
Gracias a vosotros.