Los nuevos tienen deberes: el listón está altísimo... y De la Fuente no se casa con nadie

La Selección española vuelve a copar los focos. La campeona de Europa, de regreso 50 días después, se enfrenta este jueves a Serbia (20:45) y el domingo a Suiza (misma hora) en partidos correspondientes a la Nations League. Aunque también importe ganar esta competición e intentar revalidar el título, De la Fuente piensa más a largo plazo: en el Mundial 2026. Y todas sus pruebas hasta que llegue irán enfocadas en mayor o menor medida hacia la cita de Canadá, México y Estados Unidos. Con su núcleo ya formado, el riojano no ha querido esperar y se lleva a este parón a nombres que tenía en agenda desde hace tiempo (Pepelu), a otros que vuelven tras lesión (Yéremy) y a piezas que conocía de las inferiores y de los que le ha convencido su buen nivel en este arranque de temporada (Mingueza y Pau Torres).

Todos ellos, además de Robert Sánchez, la otra novedad, tienen deberes. En primer lugar, acoplarse al ritmo en los entrenamientos y partidos de un equipo que funciona como un reloj, con automatismos claros y una velocidad de balón altísima; y hacer lo propio en un vestuario sano, sin egos y que lideran Carva o Rodrigo. En Belgrado y Ginebra les llegará el turno de demostrar sobre el césped y de estar a la altura de una Selección que maravilló al planeta en Alemania. Este parón es un tanto particular por las ausencias (están lesionados Unai Simón, Mikel Merino o Morata y Rodri no podrá jugar en Serbia por sanción) y De la Fuente abrirá el abanico, con la idea de que casi todos los 25 convocados dispongan de minutos.

Ahí estará la oportunidad para los cuatro de manifestar, con hechos, que quieren formar parte del bloque que camine hacia el Mundial. Todos arribarán a él con una edad ideal (Yéremy tiene 21 años, Mingueza 25, Pepelu 26 y Pau 27) y el riojano confía en los cuatro. De Mingueza y Pepelu, los dos que no habían acudido jamás con la Absoluta, manifestó el pasado viernes su "confianza" en que elevarán su nivel "en contexto internacional", pero también sus ganas de verles competir en este tipo de escenarios. Como todos saben ya a estas alturas, De la Fuente, más allá de su estilo conciliador y carácter bonachón, no hace amigos. Y hay mil ejemplos de futbolistas que acudieron una vez a su Selección y no han vuelto jamás.

Bryan Gil e Iago Aspas, empezando por el principio, integraron su primera lista en marzo de 2023 y siguen sin regresar. El primero causó baja por unas molestias musculares antes del primer partido y se marchó de forma precipitada; el segundo, que ha empezado este curso como un tiro, no convenció ni de interior diestro contra Noruega ni más cerca del área en la derrota en Escocia. El cuerpo técnico también probó en septiembre a Abel Ruiz, en octubre a Bryan Zaragoza y Pedraza, en noviembre a Roro Riquelme y en marzo de este año a Sarabia y ninguno gozó de continuidad, aunque hombres como Abel, Zaragoza o el propio Roro continúen en los planes. A otros como Gerard Moreno, que fue en marzo de 2023 y en marzo de 2024, o Asensio, junio y septiembre de 2023, no les valieron los fogonazos para quedarse.

La otra cara es Cucurella, el octavo lateral izquierdo que convocó el de Haro desde que asumió las riendas de España y, ahora, el titular. Su alistamiento en la Eurocopa fue una medida de emergencia por las lesiones de Gayà y Balde y le valió, con un nivel notable en los amistosos previos frente a Andorra e Irlanda del Norte, para ganarse un puesto en el once. Grimaldo estará de nuevo por detrás del de Alella en esta ventana. Los casos de Ferran (empujó con goles en octubre) o Aleix García (gustó en noviembre) suponen otras referencias de futbolistas que se subieron con el equipo en marcha y han permanecido.

La ocasión resulta ideal para Mingueza, con Carvajal cargado (ayer se entrenó al margen junto a Remiro, Nico y Lamine) y un partido en Belgrado contra la 32ª del ranking FIFA para, quizá, disputar su segundo encuentro con la Absoluta. Cabe recordar que ya formó parte del famoso amistoso ante Lituania que disputó la Sub-21 por una plaga de positivos en COVID y que completó todo el proceso en las inferiores (plata en los Juegos de Tokio con De la Fuente, importante en su Sub-21…). Su interesante tendencia y aportación a jugar por dentro cuando el partido lo requiere y su mejoría en defensa han convencido al staff. El listón lo tiene alto porque, entre otras cosas, su convocatoria impidió la de candidatos al lateral derecho como Marcos Llorente, uno de los hombres más en forma de la Liga; Pedro Porro, que brilla y ya ha marcado con el Tottenham; o Juanlu o Pubill, los carrileros de la Olímpica.

Lo mismo vale para Pepelu, que recibe la confianza del seleccionador pese a no haber arrancado la temporada de la mejor manera con el Valencia, ni en lo colectivo ni a nivel individual. El entrenador le dirigió en la Sub-21 y le ha colocado por encima de opciones como Pablo Barrios. Para que entre Pau Torres ha tenido que cargarse a un líder y campeón de todo como Nacho, con el consiguiente mosqueo del exmadridista, que todavía digiere la decisión; y para meter a Yéremy sigue prescindiendo de Asensio, uno de los ojitos derechos del míster en las inferiores y que ha empezado goleando y asistiendo con el PSG.

Serbia y Suiza pueden suponer, para los cuatro más Robert, un punto de partida para seguir la ruta hacia Norteamérica. De la Fuente no regala oportunidades, pero tampoco se pliega a viejos conocidos o a jugadores con mayor bagaje. Irá quien mejor esté y, por sus características, más pueda aportar. Por eso tira de hombres como Mingueza, que aparecía en pocas quinielas, y por eso sus listas varían casi tanto como las de Luis Enrique y bastante más que las de Aragonés o Del Bosque.