NATIONS LEAGUE | ESPAÑA 3 - SUIZA 2

Los Bryan se presentan a la fiesta de final de curso de una España imparable

La Selección coloca el broche a su 2024 con una victoria sufrida ante Suiza. Un penalti transformado por Bryan Zaragoza desatascó el partido en el 93'; antes marcaron Yéremy y Bryan Gil.

Yéremy Pino y Nico Williams celebran el 1-0, obra del primero tras pescar un rechace. /RFEF
Yéremy Pino y Nico Williams celebran el 1-0, obra del primero tras pescar un rechace. RFEF
Manuel Amor

Manuel Amor

El frasco de las alegrías de España siempre permite extraer alguna más. La Selección cerró el 2024 con una trabajada victoria ante Suiza en Tenerife (3-2) que desatascó un penalti provocado y anotado por Bryan Zaragoza en el minuto 93. El gol del osasunista, revulsivo eficaz, colocó el broche a un año inolvidable: si las 12 victorias y un empate ya lo dicen todo, el juego que aderezó el camino hacia la Eurocopa y la consecución de la primera plaza del grupo en esta Nations League ha terminado por redondear una sensación casi inmejorable. Aunque la Roja llegó a mandar hasta en dos ocasiones en el marcador gracias a los goles de Yéremy y Bryan Gil, la Nati se repuso y colocó las tablas con tantos de Monteiro y Zeqiri. El añadido dictó sentencia a favor de la Roja.

El partido no deja ninguna consecuencia clasificatoria (España ya era primera) y sí tres debuts: Aitor Paredes, titular, y Samu Omorodion y Pablo Barrios, dos amigos que salieron desde el banquillo y parecen haber llegado para quedarse. Mingueza no cuenta porque ya había disputado el famoso encuentro ante Lituania en el que los sub-21 cubrieron a la Absoluta por un brote de COVID en 2020. El lateral del Celta dejó detalles que invitan a pensar en que gozará de continuidad mientras no vuelve Carvajal y los Bryan se sumaron a su barco tras el descanso. Croacia, Italia o Países Bajos serán los rivales de la Selección en cuartos.

España dominó sin esforzarse una primera mitad tediosa y que sólo se animó cuando apareció Pedri. El de Tegueste, al que sus malas notas en el cole privaron de jugar en el Tenerife, también vivió una noche para el recuerdo: acaparó los vítores, excitó al Heliodoro con cada pase de cinco metros y encontró los espacios para recibir libre, jugar suelto y gustarse. De sus recepciones en la mediapunta salieron los primeros acercamientos de la Selección, con un tiro arriba de Nico Williams y otro de Grimaldo que rechazó Mvogo, y sus toques de magia terminaron de encender a un estadio lleno hasta la bandera. Una moderna e incansable charanga animó la cita desde la tribuna.

Suiza, ya descendida a la Liga B sin haber ganado un partido, deambuló por momentos por la isla como un alma en pena y no remató ni a portería antes del descanso. Contó con otro hándicap: un cuadro de gripe apartó de la cita a su seleccionador Murat Yakin y al portero Kobel, estrella junto a Xhaka. España, poco a poco y sin acelerar en exceso, logró embotellar a su rival y aumentar la sensación de peligro. Como de costumbre aunque no se le valore, el desatascador fue Morata.

En el 31', el delantero ganó un sensacional balón al espacio de Mingueza para internarse en el área y zafarse de Fernandes con un sombrero. El lateral le arrolló... y el señalamiento del penalti dio paso al enésimo gesto digno de elogio del capitán: aunque le correspondía tirar el penalti e igualar por fin con su gol a Fernando Torres, los gritos de "Pedri, Pedri" le llevaron a pasarle el balón a su compañero. Como suele ocurrir en estos casos, el barcelonista lo ejecutó mal. El meta rechazó el tiro, Freuler sacó bajo los palos el remate posterior de Nico... y Yéremy Pino, a la tercera y con un tiro duro con la derecha, abrió el marcador. Su tercer gol con la Roja supuso un alivio para Pedri.

Yéremy celebra su gol.  RFEF
Yéremy celebra su gol. RFEF

El tanto dio paso a los sustos: primero con la rodilla derecha de Pedri, tras recibir un pisotón, y después con la izquierda de Pino, golpeado por Admouni. Como las lesiones ya se presencian en los estadios con la periodicidad de una tarjeta, los gestos de dolor de ambos hicieron el silencio en el Heliodoro. Y Marcelino (ya ha perdido en este parón a Baena y Ayoze) se puso a temblar. Después de un par de minutos tumbados en el césped, ninguno tuvo problemas para continuar. La primera mitad terminó con un tiro cruzado de Casadó que se marchó desviado.

Héroes Bryan

De la Fuente animó la segunda parte con un doble movimiento: cambió a Remiro para meter a Robert Sánchez y dejó en el banquillo a Morata para promover el estreno de Samu Omorodion, su debutante número 21. Paredes, titular, fue el 20. Y después de un susto por un error del central del Athletic (Monteiro robó y chutó desviado), España pagó sus despistes en el 63': el propio Monteiro quebró a Grimaldo, se deshizo de Paredes y superó a Robert con una gran definición. Tocaba reaccionar.

El riojano metió a Bryan Gil para superar la empanada y la entrada del extremo despertó a la Selección. Lo tiene todo para consolidarse: una zurda de quilates y el vértigo que De la Fuente le pide a todos sus extremos. El del Girona aprovechó su oportunidad y marcó el 2-1 en el 68'; estuvo vivo para robar un mal despeje y definió por bajo ante Mvogo. Fue su primer tanto con la Absoluta en su quinta aparición. El otro Bryan, Zaragoza, saltó al campo en el 69' y también aportó un extra de picante. Fabián rozó el 3-1 tras una acción personal del de Osasuna. Luego, tras un período de sesteo, el centrocampista del PSG estuvo a punto de estropear la fiesta con un penalti que transformó Zeqiri en el 85'. Y cuando De la Fuente maldecía, volvió a emerger un Bryan.

Zaragoza caracoleó por la banda y, regate tras regate, acabó tumbado por Sierro. Asumió la responsabilidad del penalti y lo ajustó tanto que Mvogo no llegó pese a acertar la dirección. La celebración del técnico en el banquillo lo dijo todo: la victoria era, sobre todo, una recompensa simbólica al trabajo de un año inmaculado y que nadie olvidará. Con la primera posición en el bolsillo, la Selección se medirá a Croacia, Italia o Países Bajos en cuartos de final y con la vuelta en casa. Será en marzo... y los Bryan quieren apuntarse a la fiesta.

Ficha técnica:

España: Remiro (Robert Sánchez, min. 46); Mingueza, Cubarsí, Paredes, Grimaldo; Casadó, Fabián; Yéremy Pino (Bryan Zaragoza, min. 69), Pedri (Pablo Barrios, min. 79), Nico Williams (Bryan Gil, min. 60); y Morata (Samu Omorodion, min. 46).

Suiza: Mvogo; Fernandes, Cömert, Muheim, Ricardo Rodríguez; Freuler, Xhaka (Sierro, min. 60); Ugrinic (Monteiro, min. 46), Sohm (Rieder, min. 60), Kutesa (Okafor, min. 72); y Amdouni (Zeqiri, min. 46).

Árbitro: Bastian Dankert (Alemania). Amonestó con tarjeta amarilla a los jugadores locales Yéremy Pino y Bryan Zaragoza y al visitante Cömert.

Goles: 1-0 Yéremy Pino (min. 32). 1-1 Monteiro (min. 63). 2-1 Bryan Gil (min. 68). 2-2 Zeqiri, de penalti (min. 85). 3-2 Bryan Zaragoza, de penalti (min. 93).

Incidencias: Partido correspondiente a la sexta y última jornada del Grupo A4 de la UEFA Nations League; se disputó en el Heliodoro Rodríguez López (Santa Cruz de Tenerife) ante 21.204

espectadores.