El tobillo lesionado de Lamine Yamal se expuso 58 minutos con el grave antecendente de Frenkie de Jong aún presente

Los peores presagios se han confirmado con Lamine Yamal. El canterano estará entre 3 y 4 semanas de baja. "El jugador sufre una lesión de grado 1 del ligamento intertibio-peroneo anterior", reza el comunicado. Se perderá con total seguridad el partido de Liga ante el Atlético de Madrid, con el liderato en juego, y a principios de enero el duelo copero ante el Barbastro, con la Supercopa en el horizonte, pero también un antecedente alarmante.

Desde esta misma mañana, el futbolista ha empezado con la recuperación en la Ciutat Esportiva con el objetivo de poder estar recuperado para la Supercopa de España a partir del 8 de enero. Con esa idea se trabajará durante los próximos días, aunque lo más importante será cuidar y curar bien el tobillo derecho. Es una lesión sobre otra que ya tuvo. Cabe recordar que el canterano se perdió tres partidos -Real Sociedad, Celta y Brest- por un problema en esa misma zona. Sin Lamine, el Barça ganó un partido, empató otro y perdió en San Sebastián.

Está muy fresca la lesión de Frenkie de Jong. El neerlandés tuvo tres golpes en el tobillo derecho la pasada temporada. No se recuperó bien. "Se precipitaron", contó el seleccionador orange Ronald Koeman. Y después del último contratiempo tras el choque con Fede Valverde, estuvo cinco meses de baja. En el club no quieren que se produzca un caso De Jong y por ese motivo se irá con pies de plomo y no se dará ningún paso en falso a pesar de estar en juego el primer título de la temporada. Además, Lamine es un futbolista que por sus características físicas y futbolísticas está expuesto a este tipo de golpes y lesiones. Más que, probablemente, alguna dolencia muscular.

Una vez conocida la lesión, la pregunta que se hacen muchos culers es por qué continuó jugando. La entrada de Neyou fue en el minuto 17 de partido tras un regate del de Rocafonda. Lamine siguió durante unos segundos antes de tenderse sobre el césped de Montjuïc. Los doctores saltaron rápidamente a atenderle y tras varios tratamientos sobre la zona afectada continuó jugado. Aunque mermado.

No se vio al Lamine habitual, ni su chispa y picardía de antes del golpe. Acciones cortas, pases, algún disparo puntual, pero ninguna acción de velocidad o de uno contra uno marca de la casa. Hasta el punto que poco antes del descanso hizo el gesto del cambio en varias ocasiones para posteriormente pedir calma.

Sorprendió que tras el parón saliera de nuevo a jugar. En el segundo tiempo siguió dando muestras de su limitación de movimientos. A pesar del dolor se mantuvo en el verde hasta el minuto 75. Marcus Sorg decidió cambiarlo para dar entrada a Gavi el último cuarto de hora. El delantero vio los últimos minutos de partido en el banquillo con hielo en su tobillo derecho.