Sampaoli resetea al Sevilla: charla y conjura para el Metropolitano

No ha sido una semana sencilla para Jorge Sampaoli y el Sevilla. La derrota ante Osasuna en el Sánchez-Pizjuán reabrió las dudas sobre el rendimiento del equipo. Al mal primer tiempo del equipo se unió el desbarajuste final, que acabó con el gol de Abde y de nuevo el conjunto sevillista mirando hacia el descenso. Con este panorama, el entrenador argentino ha afrontado una semana dura, de menos a más, en la que ha tratado de resetear al equipo. Aprender de los errores cometidos el domingo, con autocrítica también interna tanto del cuerpo técnico como de los futbolistas, y una conjura final para que el Sevilla revierta su imagen en la visita al Atlético de Madrid.

Sin ganar como visitante en LaLiga desde el pasado mes de octubre, el duelo en el Metropolitano no parece el mejor escenario, pero Sampaoli está convencido de que puede hacerle daño al equipo de Diego Simeone si el Sevilla recupera su libreta. Mantener el orden y las líneas juntas, tanto con balón como sin él, y una concentración máxima durante todo el encuentro son premisas que el técnico ha repetido en sus charlas de la semana. También dejar a un lado el miedo a jugar la pelota o dejarse influir por la situación en la tabla han sido cuestiones abordadas por Sampaoli, que ha insistido tanto en el aspecto mental como en los tácticos.

La respuesta del vestuario también ha sido positiva. Más allá de esa imagen del argentino Acuña tirando el papel con las instrucciones al césped, los futbolistas también están mentalizados de la importancia de seguir esas pautas marcadas por el cuerpo técnico. Hasta el pasado domingo, y con la excepción del Camp Nou, el Sevilla mantenía una línea ascendente y ahora se trata de pasar página de ese borrón ante Osasuna para recuperar las buenas sensaciones y, pese a la dificultad que supone el Atlético, sumar puntos.

"Cuando entramos en una situación de caos, el equipo no saca rentabilidad", expresó Sampaoli en su conferencia de prensa, un mensaje similar al que ha repetido a sus futbolistas de manera interna. Desde su llegada y, sobre todo tras la pretemporada invernal, el argentino ha tratado de imponer un orden defensivo a su equipo, con movimientos coordinados de la línea de cinco atrás, pero también unos automatismos para salir con la pelota desde atrás y jugar en campo contrario. "Si no respetamos un plan, jugamos con anarquía. No podemos jugar con desesperación", repitió el técnico, al que le preocupa que su equipo dé pasos atrás en ese nivel de confianza que parecía haber adquirido en este 2023.

Las lesiones de Badé y Rekik, que ultiman sus respectivas recuperaciones, han dejado a Sampaoli con Nianzou como único central específico, un aspecto que, según los técnicos, obliga a extremar el orden defensivo para evitar problemas. "Si perdemos organización colectivas nos quedamos con duelos para jugadores que no tienen esa especifidad", indicó Sampaoli, que contará con Gudelj y Telles como alternativas para completar la zaga. "El entrenador tiene que resolver situaciones para encontrar la mejor versión de este equipo. Mirar hacia atrás es una excusa. Por mi cabeza sólo pasa lo mejor para este club", añadió el argentino, que tampoco podrá contar con el sancionado Fernando.

También advirtió Sampaoli de las cualidades de este Atlético de Simeone, que ha variado en parte su filosofía en este tramo de la temporada. "Está en un buen momento ahora, tiene muy buenos futbolistas y a diferencia de antes, tienen unas relaciones socioafectivas desde el balón a mucha velocidad y a un toque que no he visto mucho en otros equipos del mundo. Me gusta ver cómo genera ataques de esa forma, es un equipo que intenta darle un vuelco a una forma para sorprender a los rivales y en la última etapa le está dando bastante resultado. Es un muy buen equipo, consolidado, y tenemos que llevar el partido a un lugar de juega donde podamos encontrar superioridades en el campo para que prevalezca nuestra forma de jugar. Si entramos en una disputa de imprecisión y sofocación ellos son muy agudos porque lo persiguen, lo huelen, y te hacen daño", señaló el argentino.