El récord de asistencia en diez años tira por tierra el relato de que LaLiga en agosto no interesa

LaLiga ha comenzado con los estadios casi llenos. La primera jornada ha registrado una ocupación de casi el 90%, un porcentaje más alto que cualquier estreno de la última década. Justo cuando más se habla de lo deslucida que está la competición por los problemas de inscripciones de varios equipos, con otros aún con la plantilla a medio hacer y en mitad del mes por excelencia de las vacaciones, los aficionados responden. Agosto ya no es sinónimo de estadios semivacíos en LaLiga.

Tres estadios (Mestalla, La Cerámica y Balaídos) superaron el 90% de ocupación y otros tres (Son Moix, Benito Villamarín y San Mamés) lo rozaron. Son números que siguen la tendencia al alza de la asistencia en las últimas temporadas y que se sustentan en las buenas cifras de abonados de casi todos los equipos.

Es el quinto año consecutivo de aumento de público en la primera jornada de LaLiga (si no se tienen en cuenta las temporadas 20-21 y 21-22, que sufrieron restricciones por la pandemia de la COVID-19). La 18-19 comenzó con una ocupación del 67,8%, casi veinte puntos menos que la actual.

Entre el jueves de la semana pasada y este lunes, 313.849 espectadores acudieron a los diez estadios. Es la segunda vez en la última década que una primera jornada supera los 300.000 espectadores totales y son diez mil espectadores más que la vez anterior, en el estreno del curso 2022-2023.

Hace dos años, el FC Barcelona jugó en casa y reunió a más de 80.000 espectadores en el Camp Nou. Esta vez debutó lejos de su estadio, igual que el Real Madrid y el Atlético de Madrid. De ahí que la cifra de esta temporada sea más llamativa: ninguno de los dos estadios más grandes de la competición (Santiago Bernabéu y Metropolitano) acogieron partidos. Tampoco Montjuïc, que supera por poco los 50.000 espectadores.

Mallorca, Villarreal y Valencia, que recibieron a Real Madrid, Atlético y Barcelona, son los equipos con un mayor aumento de la asistencia respecto a sus primeros partidos en casa la pasada temporada. Los 23.010 espectadores que acudieron a Son Moix fueron el 29% más que un año antes, una subida que no solo se explica por la visita de Mbappé y compañía, sino también por el aumento de la capacidad del estadio: a comienzos de la temporada 2023-2024, el estadio mallorquinista aún estaba en obras.