El vaivén emocional de César Tárrega en Mestalla de las lágrimas por Aldaia a esa rabia que solo dan los goles: "Ha sufrido mucho"

César Tárrega ha sido uno de los grandes protagonistas del regreso del fútbol a Mestalla tras la DANA.El central fue uno de los principales afectados al ser natural de Aldaia, una de las localidades más azotadas por la tragedia, parte de la 'zona cero'. Por ello, no pudo contener la emoción en el sentido homenaje que se realizó en el estadio a todos los afectados en los instantes previos al arranque del partido ante el Betis. Las imágenes que darán la vuelta al mundo mostraron a futbolistas rotos de dolor, entre ellos el mencionado Tárrega, incapaz de contener las lágrimas.

La vida sigue y el fútbol continúa su curso ya con el Valencia como un act principal. Y el destino aún le tenía guardado el momento más especial de su carrera a César Tárrega. Pronto convirtió sus lágrimas en el emocionante reconocimiento por el primer gol del partido de los suyos. El central aprovechó un balón dividido para marcar el primer tanto del encuentro. Lo celebró también bañado por el sentir de su pueblo, con rabia, el afecto de todos sus compañeros y señalando ante las cámaras de televisión el lema 'Units com siempre'.

De nuevo, se vio a César Tárrega muy emocionado y mostrando una nueva camiseta con el lema: 'Tots junts eixirem'. En castellano, 'todos juntos saldremos'. Un tanto que ya es el segundo de la temporada, más otra asistencia que dio ante la Unión Deportiva Las Palmas, para un central en crecimiento e indiscutible en el once del 'Pipo' Baraja. De nuevo, cumplió con nota, participó activamente en el triunfo de su equipo y demostró con 22 años estar capacitado para asumir galones dentro del equipo.

De vuelta con la catástrofe, Tárrega es uno de los futbolistas que no han podido vivir con la más mínima normalidad lo ocurrido, si es que acaso alguien lo ha podido hacer. Sus padres, de Aldaia, sufrieron de inmediato las consecuencias de la catástrofe, tal y como desveló el propio jugador en declaraciones a la web del Valencia. Por supuesto, colaboró activamente con ellos para poder recuperar pronto el bienestar y también con el resto del pueblo que vio que su vida cambió de la noche a la mañana.

"Sobre las 22:30 horas me llamaron mis padres diciendo que se estaba inundando todo. Mis padres viven en un tercero, pero los garajes donde tienen los coches están completamente inundados, aún no se ha podido acceder. He visto vídeos de hace dos días por la noche de la riada y de un momento a otro estaban los coches en medio de la calle, víctimas mortales… un desastre", expuso.

Pese a que su propia familia estuviera afectada de lleno, Tárrega no quiso olvidar a todas las víctimas y todos los destrozos materiales que dejó a su paso una de las mayores tormentas que se recuerdan: "Esto es muy duro. Nadie se esperaba lo que ha pasado. Hay muchos afectados en muchas zonas, conocidos, familiares que lo han pasado muy mal, pero por suerte, la mayoría o todos están bien".

Su compañero Diego López habló de su situación: "El míster nos decía que iba a ser muy difícil pasar de la emoción y la tristeza, pasar de cero a cien... César es de los jugadores que más de cerca ha vivido la tragedia, es de un pueblo de los más afectados. Se merecía el gol, ha sufrido mucho y no podía tener mejor recompensar que marcar el gol y dedicárselo a todos los valencianos y a todo su pueblo. Me alegro mucho por él".

El Valencia no jugaba desde el pasado 27 de octubre. Desde entonces, ha sufrido en silencio, desde los campos de entrenamiento, la situación de sus vecinos. Siempre se han posicionado en primera línea para ayudar en todo lo que fuera necesario. Tantos días después, han vuelto a ejercer su profesión, ante un Mestalla a reventar. Pero ni el fútbol ni nada olvidará la desgracia ocurrida. Por mucho que pase el tiempo, habrá un espacio para recordar la catástrofe y homenajear a todos aquellos que se dejaron el alma en colaborar con el pueblo. Tárrega, afectado de lleno, ha encontrado en el fútbol un espacio para gritar al mundo que nunca les dejarán solos.