RAYO VALLECANO 1 - BARCELONA 2

Dani Olmo y el físico elevan a un Barça que acaba con mal cuerpo

El mediapunta cambió la cara del equipo en la segunda mitad y lideró la reacción de un Barça inagotable

Joaquín Bacigalupo

Joaquín Bacigalupo

El nombre de la semana en Barcelona también acabó siendo el del partido en Vallecas. Tras un sinfín de idas y vueltas de Laporta y su Junta para conseguir inscribir a Dani Olmo para el tercer partido de Liga -tras perderse los duelos ante Athletic y Valencia-, el mediapunta cargó de razón a Deco y Flick.

El de Terrassa comenzó el partido en el banquillo a pesar de estar listo para jugar y no fue hasta la media parte cuando Flick lo llamó a filas. El mediapunta entró por Ferran y no tardó ni un minuto en evidenciar la mejora respecto a su compañero. Su entrada envió a Raphinha a la banda izquierda, huérfana hasta entonces, y permitió a Lamine y Pedri encontrar un socio más cerca de la frontal.

Un zapatazo a la madera desde más de treinta metros puso en alerta a todo Vallecas de que algo había cambiado. Olmo entró como interior, pero tuvo libertad absoluta para moverse según lo pidiera el equipo. Apenas un par de miradas con Lamine sirvieron para que el extremo asistiera al mediapunta y este marcara el tanto de la remontada con un pase exquisito a la red con la zurda.

La segunda parte del encuentro, con Olmo como protagonista, evidenció una mejora sustancial de un Barça desnortado en la primera, pero también confirmó que el estado físico del equipo de Flick será uno de sus pilares para garantizar un punto mínimo de competitividad. Raphinha cabalgó la banda una y otra vez, Pedri bajó a recibir tantas veces como apareció en la frontal y el equipo azulgrana convivió con un ida y vuelta impuesto por el Rayo.

"Son muchos partidos en dos semanas y recién empieza la temporada. El futbolista va a acabar reventado. Ya estamos escuchando lesiones por todos lados, creo que se podría hacer mejor. Aquí lo dejo para quien tenga que tomar las decisiones". Las palabras de Isi Palazón al acabar el encuentro revelaron a un Rayo fundido que lamentó que Camello, Álvaro García y Óscar Valentín acabaran tocados y tuvieran que ser sustituidos.

Todo lo contrario le sucedió al Barça, que voló durante la segunda mitad como si estuviera en el pico de forma de la temporada. El bajonazo se concretó al acabar el encuentro y ver en el rostro de Marc Bernal que su lesión en la rodilla tenía mala pinta. El propio Flick lo confirmó tras el partido: "Es una victoria triste por la lesión de Marc. Nadie está contento". Desde el club se teme lo peor y las primeras exploraciones hablan de una rotura de ligamento, pero hoy se le harán más pruebas para confirmar el alcance de la lesión.