Cuando el Girona se 'enfrentó' al City por el fichaje de su estrella: "No quería... Se puso todo lo que se tenía que poner, incluso más"

Se ha normalizado que el Girona sea capaz de competir y ganar a los grandes de LaLiga, pero es algo excepcional, pues esta temporada apenas es la quinta de su historia en la élite nacional. Ni 170 partidos acumula en Primera. Pese a ello, ha logrado vencer al Real Madrid y al Barça, en casa y fuera. Además, con exhibiciones como las del curso pasado frente al conjunto que dirigía Xavi Hernández, en Montjuïc y en Montilivi.

Pero si hay un encuentro que se recuerde especialmente en Girona es el que jugó el equipo catalán en el estadio de Montilivi contra el Real Madrid el 29 de octubre de 2017. Fue su primer gran triunfo en Primera División. Apenas era su décimo partido en LaLiga y los de Pablo Machín tumbaron al vigente campeón de Europa, que acudió a Girona con Cristiano, Benzema y Sergio Ramos, entre otras estrellas. Además, con remontada. Isco adelantó a los visitantes, pero Stuani y Portu le dieron la vuelta y consumaron la gesta en la ciudad de los cuatro ríos, que esos días estaba celebrando las fiestas de Sant Narcís. Mejor guion imposible.

Hace ya más de siete años de aquello y el Girona ha cambiado mucho. Tanto, que juega la Champions League. Y lo hace con Stuani de capitán, uno de los héroes de aquella tarde en Montilivi. Entonces, el delantero uruguayo era un recién llegado, pues firmó por el conjunto catalán en verano de 2017 procedente del Middlesbrough, previo pago de 2.5 millones de euros. En una reciente entrevista a Relevo, el técnico Pablo Machín desveló los entresijos del fichaje del charrúa por el club catalán, el cual fue muy complicado y 'enfrentó' al Girona con el grupo City.

"Fue una operación muy complicada y se dio gracias a la insistencia y a la relación que yo tenía con Quique Cárcel. Stuani no era lo que el grupo City quería porque buscaban más bien futbolistas talentosos y jóvenes, y Stuani era un futbolista que nunca había sido un goleador, aun estando en Inglaterra. Yo sí le conocía de la Segunda División de España, de cuando me enfrenté contra él con el Numancia, cuando estaba en el Albacete y el Racing. Y me gustaba mucho. Había sido goleador en Segunda, y yo creía que era justo lo que necesitábamos; un delantero centro al uso, peleón, que dominara el juego aéreo y que fuera un buen rematador", argumentaba el exentrenador del Girona, al que le costó mucho salirse con la suya.

"Más allá de que tuviera más o menos calidad, yo valoraba que tuviera ese instinto, porque nuestro ADN siempre era de poner muchos centros al área. Y el club no quería... el grupo City no tenía muy claro el fichaje de Stuani. Yo lo tenía muy claro y Quique apostó por mí, puso todo lo que tenía que poner, incluso más… creo apretó todo lo que pudo. Y gracias a Dios lo hicimos y ese año fue nuestro Pichichi", aseguró Machín sobre un futbolista "que se ha convertido en ídolo y que es parte del escudo del Girona" gracias a la confianza ciega entre el director deportivo y el entrenador, clave también en el éxito actual de los gerundenses, según verbalizó Míchel.

Stuani es leyenda en Girona, el ídolo de los niños de la ciudad. Sus 134 goles en 265 partidos, una cifra brutal, le convierten en el máximo goleador de un Girona que de su mano regresó a Primera tras un descenso dramático y tocó el cielo con una clasificación histórica para la Champions League. Por cierto, uno de los primeros goles que marcó el charrúa fue precisamente contra el Real Madrid, el día 29 de octubre de 2017.

A sus 38 años y pese a no ser titular habitualmente, Stuani sigue dando guerra y este curso es, junto a Miovski, el máximo goleador rojiblanco con cuatro tantos. Y todo ello gracias a la insistencia de Machín y Cárcel, que convencieron al City para firmarlo.