FC BARCELONA

Los 43.000 coaches que están detrás de Ansu Fati para que vuelva a ser el que todos esperan: "Hay que darle tiempo"

El canterano se reencontró con la afición blaugrana tras su cesión al Brigthon.

Ansu Fati en la disputa de un balón ante el Young Boys. /AGENCIAS
Ansu Fati en la disputa de un balón ante el Young Boys. AGENCIAS
Alex Pintanel

Alex Pintanel

Ansu Fati se volvía a ver las caras con la afición barcelonista. El último día en competición oficial fue el 20 de agosto de 2023, coincidiendo con el partido ante el Cádiz. Poco después se marchaba cedido al Brighton. El encuentro ante el Young Boys sirvió para dejar claro el amor eterno del culé al canterano. Y lo necesitaba. Probablemente, la ovación de anoche no la olvidará nunca. Por qué no pasa por su mejor momento y esos aplausos refuerzan. Cierto es que el idilio entre el público y el jugador formado en La Masia nunca ha dejado de existir.

Fati saltó a calentar al comienzo de la segunda parte, con el choque ya resuelto. Y se llevó la primera ovación de los seguidores culés. Correspondió el futbolista saludando al respetable. Siguió y atendió todos y cada uno los ejercicios propuestos por Pepe Conde. Cumplido el primer cuarto de hora, Hansi Flick se dirigió a Ansu. Le avisó para salir. El futbolista recibió las últimas indicaciones de los asistentes del alemán y recibió un fuerte abrazo del entrenador. Saltó al verde en el minuto 64 sustituyendo a Pedri. La ovación cuando Fati volvió a pisar Montjuïc fue atronadora.

A partir de ahí, el futbolista se situó de interior. Dejó la banda izquierda, su hábitat más natural, a Ferran Torres, y se ubicó en una zona distinta pero conocida. "Es fácil de entender. La posición en la que ha jugado Ansu ha sido porque queríamos dar descanso a Pedri y pensábamos que De Jong tenía que jugar menos minutos", argumentó Flick en conferencia de prensa.

Se le vio falto de forma y ritmo. Necesita recuperar la velocidad y la chispa que le hicieron destacar en sus inicios en el primer equipo. Eso lo irá cogiendo con la competición y la suma de minutos. Regresó a una convocatoria ante el Mónaco y jugó dos minutos más el añadido. En los otros tres encuentros de Liga se quedó sin jugar (Villarreal, Getafe y Osasuna). En Pamplona estaba preparado para salir, pero los problemas físicos de Sergi Domínguez obligaron a Flick a modificar el cambio.

La confianza ciega de Flick

Desde el primer día, Ansu se ganó la confianza del entrenador. Se le diseñó un plan específico que tuvo el contratiempo de la lesión, pero que dio sus frutos. Se hizo especial hincapié en trabajar y fortalecer la musculatura. Flick tiene muchas esperanzas depositadas en el 10. "Ansu está muy bien en los entrenamientos. Está a un nivel muy alto. Necesitamos tiempo para que vuelva a jugar a su mejor nivel. Tiene muchas ganas de mejorar, es muy profesional y se merece que tengamos paciencia con él".

Flick sobre De Jong y Ansu Fati.

La victoria holgada ante el Young Boys permitió a Flick darle minutos a Ansu Fati. Necesita eso, jugar. Después del duelo del domingo ante el Alavés, el delantero de Guinea Bisau tendrá por delante dos semanas fundamentales para acabar de coger el tono físico. Luego vienen curvas. Esperarán en siete días Sevilla, Bayern y Real Madrid. Y cualquiera que se sume a la rotación será bienvenido por Flick.