La revolución silenciosa de Pere Romeu en el Barça se explica con varios cambios entre bastidores y una palabra: "¡Balón, balón!"
En su primera temporada al cargo del equipo, ha cambiado la metodología de entrenamiento y tiene el objetivo de que el fútbol blaugrana lleve su sello.
Pere Romeu aterrizó en el fútbol femenino con pocas referencias previas. Tras pasar por las inferiores blaugrana masculinas, donde entrenó a Gavi, y una etapa en Rumanía, esta es su cuarta temporada en el Estadi Johan Cruyff. Como ya hiciera Jonatan Giráldez con Lluís Cortés, Pere ha seguido los pasos del actual entrenador del Washington Spirit. Aquellos que conocen al técnico blaugrana, que disputará su primer Clásico al frente del equipo, le describen como un minucioso estudioso del juego.
El barcelonés tenía una base amplísima de conocimiento futbolístico y poco a poco fue modulándola hacia el campo del fútbol femenino. Su mensaje es sencillo de comprender y directo y, con su promoción en el área técnica, pidió al club el fichaje de gente de su confianza. Así llegaron Enric Lluch (asistente) y Nacho Villamía (analista de datos). El inicio de curso no ha sido tan rodado como podría esperarse, pero no hay nada por lo que alarmarse. "Todos los proyectos necesitan tiempo de adaptación. Depende del talento del staff y de las jugadoras acelerar el proceso. Estamos en un buen momento, lo complicado es mantener el nivel lo más alto posible", contó el propio Pere en la previa del Clásico.
Durante muchos años, el Barça ha sido su único rival en la liga. Y esta temporada, a pesar de que el Real Madrid se ha reforzado bien y ha empezado fuerte, todavía es demasiado pronto para sacar conclusiones, sea cual sea el resultado del sábado. A causa de la distancia entre ambos proyectos de los últimos cursos, el propio cuerpo técnico de Giráldez era el que trataba de alimentar la ilusión de las jugadoras.
Los cambios tácticos de Giráldez para motivar al equipo
"Lo hacíamos introduciendo cambios tácticos que les obligaran a prestar atención, les presentábamos nuevos estímulos. Un año jugamos con una delantera de referencia, más tarde pasamos a jugar con falso nueve…", recuerda una persona de su staff. La relajación no se permitía ni en los entrenamientos. Giráldez apostaba por tareas competitivas por equipos. "Si te descontabas contando goles, las jugadoras te metían una buena bronca", recuerda con una sonrisa la misma persona.
Con Pere Romeu se daba a entender que se apostaba por una idea continuista. Había la sensación en Can Barça de que no haría falta hacer grandes cambios para seguir puliendo un equipo ganador, el mejor de Europa. Pero Romeu llegó con una idea distinta a lo que, por forma y lo visto hasta ahora, puede parecer. El Barça sigue manteniendo su estilo -es protagonista, quiere el balón, presiona y arrolla- pero entre bastidores, el fondo ha cambiado.
Pere Romeu: una revolución silenciosa
En el día a día, quienes más han notado los cambios en el banquillo son las jugadoras. Ahora se entrenan más por conceptos o ideas de juego y ha reducido los partidillos. Romeu es extremadamente minucioso a la hora de controlar los detalles en los entrenamientos. Corrige a las futbolistas aspectos que resultarían imperceptibles para el aficionado. "¡Balón, balón!", es una de las premisas que más se escucha en sus sesiones. Durante la semana se va imaginando qué escenario se encontrará el sábado o el domingo y los días previos prueba el once que cree que más se adecuará a lo que pida el duelo.
Sin entrar en mucho detalle, Alexia ya comentó en el media day el cambio de metodología. "Entrenamos unos conceptos y necesitas ritmo competitivo, jugar muchos partidos para ir asentando todas estas ideas. Puedo entender que en los primeros partidos hubiera un poco de runrún porque la afición o los medios no viesen un equipo con la identidad que siempre ha tenido. Solo necesitábamos partidos y creo que esto ha llegado", expuso la leyenda blaugrana. "Hemos ido de menos a más, ya dijimos que era cuestión de tiempo. Confiamos y entendemos lo que nos proponen y creo que se nota", comentó Clàudia Pina.
La adaptación de Kika y Pajor
Cuentan desde el club que "el hambre sigue siendo el mismo" y esto beneficia la adaptación de las nuevas piezas. Kika Nazareth, representada por Jorge Mendes, ha ido sumando minutos y ya ha mojado en Champions. Espera ir ganando confianza con sus compañeras y tejiendo amistades. En su tiempo libre es una gran lectora, ahora está leyendo La Biblioteca de la Medianoche. Además, acaba de empezar las clases de catalán. Por otro lado está Ewa Pajor, la máxima goleadora de la Liga F con nueve tantos. Romeu está encantado con su fichaje y la integración de la delantera la está facilitando Víctor Zamora, uno de los preparadores físicos, por su conocimiento de alemán.
Aun sabiendo que no tendría que retocar grandes cosas para seguir a la cabeza de la Liga F y aspirante a la Champions, Pere Romeu decidió construir "su Barça". Una nueva metodología, una forma distinta de ver las cosas, pero siempre bajo el mismo paraguas, el innegociable estilo blaugrana. En el club creen que la derrota ante el Manchester City, aun siendo dura, entra dentro de la normalidad en el camino hacia la implantación de una nueva metodología. El Real Madrid será la siguiente prueba del algodón.