El Gobierno toma partido: denunciará al TAD a Rafael Louzán si confirma su candidatura
Lo consideran inelegible según los estatutos de la propia RFEF que impide que se presente alguien inhabilitado para cargos públicos.
Van a ser unos días muy intensos de barro institucional hasta el 16 de diciembre, fecha prevista para proclamar al nuevo presidente de la RFEF. Una vez que los barones de las Territoriales ya se habían dicho las cosas a la cara en una comida desvelada por Relevo, y tras la renuncia formal del presidente de la Valenciana, Salvador Gomar, apenas 24 horas después... Rafael Louzán (Gallega) parecía el candidato incontestable. Con más de 90 avales en su bolsillo y el apoyo decidido, además, de LaLiga, nadie parecía atreverse a plantarle cara aún pesando sobre él una condena por prevaricación que le impone siete años de inhabilitación para cargo público. Esta sentencia está pendiente de confirmarse en el Tribunal Supremo, pero la condena a esa inhabilitación está ahí y es indiscutible.
Louzán confía en el campo de grises que siempre se abre ante la duda de si el cargo de presidente de la RFEF es "público" o "privado". Y opina que esta inhabilitación le afectaría si quisiera volver a presidir una Diputación (como cuando fue condenado, la de Pontevedra), pero no para regir la máxima institución del fútbol español. Entre los expertos juristas consultados por Relevo, si bien es verdad que hay división de opiniones, lo más cierto es que la mayoría se inclinan por pensar que no podría tratarse de un candidato viable con esa condena a sus espaldas.
El de siempre, Miguel Galán, presidente de CENAFE, ya había anunciado que sería absolutamente "impugnable" si Louzán se presentase... mientras por otro lado negociaba su vieja reivindicación de licencias UEFA que lleva años persiguiendo y que esgrime abiertamente como condición para dejar de dinamitar todos los procesos federativos.
Como lo que Galán pide es poco menos que imposible (al menos desde la RFEF, quizá sí podría lograrlo UEFA), es fácil deducir que la "tregua" que le pidieron las instituciones para todo este proceso tocase a su fin y terminase volviendo el Querellator, como a él mismo le gusta que le llamen. Así que, de una forma y otra, era fácil pensar que la pelota para ver si Louzán podía llegar a ser presidente iba a volver a estar en el tejado del TAD. Pero no ha hecho falta...
El CSD denunciará directamente
Tal y como ha adelantado El País, el Consejo Superior de Deportes no hace interpretaciones "en positivo" de los estatutos de la propia RFEF y se remite a su regla inapelable (para ellos) de que no puede presentarse nadie sobre el que pese una inhabilitación para ocupar un cargo público.
De esta forma, si el día 3 de diciembre se confirma la candidatura que ya todo el mundo maneja de forma oficiosa de Rafa Louzán, el Gobierno denunciará la misma para declararle inelegible.
¿Dará tiempo a que el TAD tome una decisión entre el 3 y el 16 de diciembre, que es cuando se elige? En condiciones normales sí. Por mucho que quieren alargar los plazos burocráticamente, dada la naturaleza especial de esta denuncia y la premura de los plazos, el máximo tribunal del Deporte español puede reunirse de forma extraordinaria o como haga falta para sacar adelante esta decisión, incluso solicitando más tiempo y hasta retrasando la votación final. De hecho, si Louzán fuera candidato único, se le proclamaría presidente el 6 de diciembre. Todavía menos tiempo para el CSD y el TAD, que deberían hacer una petición especial a la Comisión Electoral de la RFEF para que el nombramiento quedara en suspenso hasta saber lo que pasa con su denuncia.
¿Acaba esto con las opciones de Rafa Louzán? Pues no. Aunque desde luego retira la alfombra roja que se le había quedado al gallego de camino al cargo de presidente, los magistrados del TAD podrían entender que sí puede presentarse. Viendo cómo han actuado en aras a una renovación de la Federación no parece la opción en la que más sencillo sea creer, pero podría ocurrir.
No es la primera vez que denuncian desde el CSD: contra Rubiales ya lo hicieron y contra Rocha elevaron al TAD la de Miguel Galán que derivó en su inhabilitación. El hecho de que el Gobierno se posicione de esta manera es sin duda un palo en las ruedas para los intereses de Louzán y de LaLiga, además de la mayoría de los barones que ya habían dado el visto bueno al alzamiento del presidente gallego.
¿Y ahora qué?
Pues a esperar acontecimientos. Si Louzán, a pesar de todo, decide ir como candidato y enfrentarse al TAD no queda otra que esperar acontecimientos. Por "las buenas" él va a ganar seguro. Pero "por las malas", si le declaran inelegible y otro candidato obtiene los 21 avales necesarios para presentarse... quedaría como único en campaña y por lo tanto sería nombrado presidente de la RFEF.
Por eso no es descartable que los barones decidan presentar a otro de ellos a la contienda, en previsión de que Louzán pudiera quedar fuera de juego. Si alguno de los candidatos "de fuera", Juanma Morales o Gerardo González, consiguiera acumular 21 avales (algo que no está claro del todo pero que podría ocurrir), tendrían que presentar al menos dos barones a hacerles frente para evitar que uno de ellos ganase "por eliminación" si el TAD falla contra Louzán.
Si sólo Louzán tuviera avales (porque consiguiera tantos que no quedasen suficientes para los demás), se presentase y el TAD decidiera declararlo inelegible, el proceso electoral se retrotraería al pasado lunes, cuando se eligió la Asamblea y arrancó el tiempo de presentación de candidatos.
La otra opción, que ya se viene manejando desde hace semanas, es la de confiar el cargo a alguien con un historial limpio, de perfil profesional y de preparación impecable para el puesto presidencial. El secretario general, Álvaro de Miguel, sería una de estas opciones, pero tampoco habría que descartar una vieja aspiración de LaLiga que ahora mismo está de perfil bajo: Mateu Alemany.