US OPEN

Los fans de Djokovic lamentan una doble vara de medir tras las imágenes de Alcaraz pidiendo una pastilla

El murciano reclamó a su box una píldora durante la tercera ronda el US Open. Algunos aficionados recordaron episodios similares de Djokovic.

Momento en el que Carlos Alcaraz solicita a su box una pastilla. /Movistar+
Momento en el que Carlos Alcaraz solicita a su box una pastilla. Movistar+
Nacho Encabo

Nacho Encabo

Tercera ronda del US Open. Carlos Alcaraz está sintiendo la bola impecable y domina por 6-3 y 3-2 al británico Daniel Evans. Acaba de hacer un break y el reloj marca la hora y cuarto de partido. Todo va sobre ruedas camino de los octavos de final. Un día más en la oficina. Sin embargo, alguna parte en su cuerpo no va del todo bien.

El murciano cierra el puño y celebra la derecha larga de Evans que le da el break, pero enseguida se da la vuelta hacia el palco donde está su equipo y hace una señal al recogepelotas que está en esa esquina. El chico se acerca al box y el fisio de Alcaraz, Juanjo Moreno, le entrega una pastilla roja dentro de un bote transparente. El recogepelotas va corriendo hasta la silla en la que Alcaraz se seca el sudor con una toalla. Tras recibir la píldora, saca una botella de agua y se la toma.

El partido acaba un largo rato después, con una victoria por 6-2, 6-3, 4-6 y 6-3, y sin signos de molestia física alguna. "Hemos jugado un buen partido, ha sido un show en la pista y creo que a la gente le ha gustado. Hemos jugado buenos puntos, buenos golpes", dice Alcaraz después de partido con una sonrisa de oreja a oreja.

Para aquellos que no sigan el tenis, la imagen de un jugar pidiendo una pastilla en pleno partido puede resultar llamativa. Sin embargo, es el pan de cada día en el deporte de la raqueta. Los jugadores pelean durante horas a pleno sol y tienen infinidad de molestias físicas. Toman fruta, geles y también algún analgésico para mitigar los dolores. Los tenistas recurren a todo tipo de soluciones cuando el cuerpo les lanza avisos.

De la creatina al zumo de pepinillos

Hace apenas unos días fue Novak Djokovic el que, a grito pelado, pidió creatina a su equipo durante la final de Cincinnati frente a Alcaraz. En Roland Garros, el serbio descubrió en su pecho un parche de nanotecnología para mejorar el rendimiento. En enero, Paula Badosa se tomó un zumo de pepinillos en pleno partido porque tenía calambres y acabó remontando. Y hace menos de un año, Djokovic estuvo también en el punto de mira por una misteriosa bebida que le preparó su equipo en el Masters 1000 de Paris-Bercy.

Efectivamente, Djokovic es posiblemente el tenista que más imágenes de este tipo ha protagonizado. Y muchos de sus aficionados están denunciando en las últimas horas una doble vara de medir después de las imágenes de Alcaraz pidiendo una pastilla a su equipo. "Me pregunto si este vídeo ahora también se volverá viral. ¿Te imaginas el alboroto si fuera Djokovic? La doble moral y la propaganda en el tenis no podrían ser más flagrantes", escribía @pavyg, una cuenta de apoyo a Djokovic con más de 15.000 seguidores, entre ellos el propio Nole. El tuit lleva ya más de un millón de impresiones.

"No sorprende que nadie en la conferencia posterior le preguntara a Carlos para qué servían esas pastillas o si tiene alguna enfermedad o lesión que requiera la medicación", continuó este hincha. "Todos sabemos que si fuera Djokovic, se enfrentaría a múltiples preguntas".

Djokovic siempre ha sentido que los medios de comunicación occidentales no le trataban de igual modo que a Rafael Nadal o Roger Federer, sus dos grandes rivales. Él siempre ha sido el villano, el bad boy. "No encaja en el molde occidental", dijo hace unos años su entrenador, Goran Ivanisevic. Siempre mirado con lupa, puede que a veces se haya exagerado en torno a su figura, pero también es indiscutible que él solo se ha metido en más polémicas que Nadal y Federer juntos: fue Djokovic el protagonista de aquel sainete en Australia, fue Djokovic el que reventó una raqueta contra los aros olímpicos cuando peleaba por una medalla en Tokio 2020, fue Djokovic el descalificado por dar un pelotazo a una jueza de línea (sin querer, todo sea dicho).

Sin preguntas a Alcaraz por la pastilla

Pero los aficionados de Nole sienten algo parecido a su ídolo, que es tratado injustamente por los medios occidentales. "Si fuera Novak, no habría fin... Todos los medios se habrían visto inundados de negatividad, pero no ocurre lo mismo con otros jugadores...", decía otra fan de Djokovic en una respuesta al tuit inicial.

En un punto sí tiene razón la NoleFam, como se conoce a la legión de hinchas del serbio: y es que Alcaraz no recibió ninguna pregunta al respecto en la rueda de prensa. En las siete preguntas en inglés y otras seis en castellano no se comentó el tema de la pastilla.

Y hay otro asunto que es obvio y que siempre han defendido los de la NoleFam: nadie, ni Djokovic ni Alcaraz ni ningún otro tenista, va a tomar una sustancia ilegal a los ojos de todo el mundo. Y menos, como el caso de Alcaraz el sábado, cuando estás jugando en la Arthur Ashe, la pista de tenis más grande del mundo.

"Todos los jugadores están sometidos a controles antidopaje todo el tiempo", dijo el extenista Patrick McEnroe en noviembre de 2022 para defender a Djokovic de algunas teorías de la conspiración tras la bebida que le prepararon en Paris-Bercy. Una reflexión que vale para el caso de ahora. "Si hubiera algo ilegal en las bebidas que mezclan, que se las dan constantemente en los partidos, es altamente probable que diera positivo".