El plan de París para eliminar la alarmante contaminación del Sena antes de los Juegos Olímpicos

La Copa del Mundo de aguas abiertas ha sido cancelada por los altos niveles de polución del río Sena, París. Las lluvias torrenciales caídas este fin de semana, que desbordaron las alcantarillas y desplazaron aguas residuales al río, han puesto en jaque a la ciudad de París de cara a los Juegos Olímpicos de 2024. Por ello, para prevenir que durante las olimpiadas se cancelen las pruebas por fuertes precipitaciones, World Aquatics ha anunciado un plan de contingencia.

A partir de ahora y hasta 2024, se construirá una nueva infraestructura para mejorar el tratamiento del agua durante las precipitaciones. El depósito de almacenamiento, que estará situado en Austerlitz, podrá contener lo equivalente a veinte piscinas olímpicas y tratarla antes de verterla al entorno natural. De esta manera, "se evitará que las aguas residuales terminen en el Sena en el caso de fuertes lluvias". Pero no es la única construcción del plan de prevención. También estarán disponibles para 2024 una estructura para la cuenca hidrográfica de la Ru Saint-Baudile y una depuradora de aguas pluviales en Valle del Marne, diseñada para realizar las mismas funciones que la situada en Austerlitz.

"Ya se han tomado medidas importantes durante varios años para mejorar la calidad del agua en el Sena", afirma el comunicado de la World Aquatics. El Estado francés, el Ayuntamiento de París y el Servicio Público de Saneamiento, han llevado un trabajo de desinfección de los vertidos de las dos depurados desde principios del verano de 2023. Además, anuncian que la campaña de limpieza continuará hasta los próximos meses para hacer frente a fenómenos meteorológicos excepcionales, como los que han producido la cancelación del Campeonato del Mundo de hoy.

La próxima prueba será el Mundial de Triatlón previsto del 17 al 20 de agosto. "En el improbable caso de que la calidad del agua no cumpla, según las autoridades sanitarias, con los requisitos mínimos, existe un plan de contingencia que cambiaría la prueba por un formato de duatlón". Desde la organización existe altas expectativas, basadas en el actual pronóstico del tiempo, en que la calidad del Sena permitirá la realización de las pruebas.