MOTOGP

Los pilotos de MotoGP también dudan de las decisiones arbitrales

El viernes de Le Mans los pilotos mantendrán una reunión especial con los responsables de las sanciones buscando claridad.

Marc Márquez y Miguel Oliveira, en su accidente en Portimao este año. /AFP
Marc Márquez y Miguel Oliveira, en su accidente en Portimao este año. AFP
Borja González

Borja González

MotoGP está en unos niveles altísimos de tensión en carrera en este 2023. Este pasado fin de semana en el Circuito de Jerez-Ángel Nieto, tanto la prueba al sprint como la carrera del domingo tuvieron que pararse y reanudarse al ser interrumpidas en sus inicios por dos accidentes que forzaron que se ondease la bandera roja. Incidentes, los de este año, que han provocado golpes y sanciones. Y como sucede en otros deportes como el fútbol, las penalizaciones en vez de aclarar las situaciones terminan generando controversias y cuestionamientos por parte de los pilotos, que no terminan de entenderlas.

Antes del arranque de la temporada, el jueves de Portugal, los responsables de Dirección de Carrera, el Panel de Comisarios y la organización reunieron a los pilotos de cada categoría para explicarles qué tipo de sanciones se iban a aplicar. La de la clase reina se alargó más de lo previsto porque ante las explicaciones surgieron dudas, y esas dudas no terminaron de ser bien resueltas. Y de aquello polvos, estos lodos.

El viernes de la semana que viene, una vez que finalice la primera jornada de trabajo del Gran Premio de Francia, los pilotos de MotoGP están convocados a lo que se conoce como Comisión de Seguridad, un encuentro que se celebra en cada evento y en el que se debaten cuestiones de seguridad, sucesos acontecidos anteriormente que necesitan debate o aclaración, problemas de los circuitos o ideas que el organizador quiere poner sobre la mesa (desde nuevos escenarios para los grandes premios hasta novedades como pudo ser la llegada del sprint, aunque de aquello se enteraron en Austria cuando los hechos ya estaban consumados y habían sido filtrados a través de la prensa).

Pero la próxima Comisión del Seguridad va a ser especial. "Me gustaría decir lo que pienso, pero tendremos una reunión en Le Mans y veremos cómo es posible tomar este tipo de decisiones", explicaba en Jerez Fabio Quartararo, sancionado con una penalización de vuelta larga por el incidente que paró la carrera del domingo y que ha costado otra lesión a Miguel Oliveira. De hecho, el portugués se va a perder la cita francesa por una fractura en el húmero izquierdo y una lesión en el ligamento de la misma zona.

"Creo que va a ser una discusión interesante, seguramente el de Fabio ha sido un incidente al límite, pero pienso que hay que entender que haya contactos en carrera y no creo que Fabio haya fallado en esa situación, porque en ese momento su trayectoria era la única posible, así que creo que ha sido una decisión equivocada", opinaba Jack Miller, tercero el domingo. "Me ha sorprendido y no vemos ninguna razón del por qué. Maio (NdR: Meregalli, team manager del Monster Yamaha) ha ido a Dirección de Carrera para pedir una explicación, pero no le han dado ninguna clara. Desde nuestro lado no vemos nada extraño y creo que claramente no es para penalizar".

Continuamente, como en el fútbol, las interpretaciones van por barrios. "La he visto y la entiendo. Esto es perfecto. Pecco no le ha querido tocar, sin duda. Ha acelerado, ha tocado a Jack y le ha sacado de pista, y se podría haber caído Jack. Así que perfecto lo de perder una posición. Y si le hubiera pasado a Jack, lo mismo. Así son las carreras. No hay que evitar los toques. Se puede tocar al otro. Ha calculado un poco mal, pierdes una posición y ya está", apuntaba Aleix Espargaró sobre otro incidente, un toque entre Miller y Pecco Bagnaia por el que se obligó al italiano a devolver la posición al australiano.

"Si hoy se me ha aplicado a mí esta sanción, que tampoco ha sido para tanto considerando otros toques que llevamos vistos durante el año, sólo quiero que siempre se aplique con congruencia y con el mismo rasero. Si es así, lo acepto", lanzaba Bagnaia. "O no sancionan a Pecco o sancionan a los dos", decía por su parte Jorge Martín, que tuvo un toque con Miller en el que él salió perjudicado. "Por fin nos reuniremos con ellos en la próxima Comisión de Seguridad. Hemos conseguido después de dos años peleándonos que tengan una reunión con nosotros para que nos escuchen y ver un poco sus ideas. Esperemos que saquemos algo en claro", añadía el madrileño.

Esa Comisión de Seguridad va a ser especial porque los pilotos tendrán delante a los miembros del Panel de Comisarios, dirigido por el dos veces campeón de 500cc y una de 250cc Freddie Spencer, más al presidente de la Federación Internacional de Motociclismo, Jorge Viegas, así como a los responsables habitualmente presentes en estas reuniones. Con un objetivo: aclarar las sanciones, algo que por otra parte no se considera demasiado sencillo porque están cargadas de subjetividad (no hay un listado de hechos con sus correspondientes penas).

"Vamos a tratar de aportarles nuestras explicaciones porque no hay congruencia ya que a veces se dirime algo en un sentido determinado para algunos adelantamientos, pero no para otros. O son menos agresivas unas acciones que otras que quedan exentas de sanción", apuntaba Bagnaia, en una queja a la que se une la de no recibir explicaciones. Por ejemplo, en la que le impusieron a Franco Morbidelli por lo ocurrido en el sprint de Jerez se penalizaba al piloto por 'ser ambicioso a la hora de adelantar', un concepto algo extraño. "Ha sido muy divertido leer eso, pero sería interesante que explicasen el por qué, dado que no lo han hecho", comentaba el italiano de Yamaha. Veremos si tras este encuentro especial llega esa ansiada claridad.