La increíble pole de Marc Márquez en la primera prueba del Mundial de MotoGP
El del Repsol Honda sorprende llevándose el mejor tiempo, rebajando el mejor registro histórico del Autódromo Internacional del Algarve.
Terminaba el viernes Marc Márquez cariacontecido. No era una sorpresa, pero pese a las buenas sensaciones dejadas por la mañana, la realidad de la pista le había dejado fuera de la Q2 y con la obligación de tener que pasar por el suplicio de la Q1. Y no era una sorpresa porque se confirmaba eso de que la Honda no funcionaba a una vuelta lanzada. "No es aquello de 'qué ha pasado' pues estamos en el sitio en el que debemos estar por la pretemporada y nuestro punto débil sigue siendo la vuelta rápida. En ritmo no estamos tan, tan, tan lejos, pero en vuelta rápida ahí es donde perdemos más y más nos sacan, y es uno de los puntos más importantes este año", resumía, en un mensaje que no invitaba a imaginar lo que terminó pasando el sábado.
En la Q1, con sus tres compañeros de Honda compartiendo el duelo para conseguir un puesto entre los dos mejores, al 93 le bastaron tres giros, una sola salida y un solo neumático blando, para marcar el mejor tiempo de todos. Un tiempo tan bueno que fue mejor que el espectacular marcado el viernes por Jack Miller. A las Ducati les tocaba arrasar, pero en los dos primeros intentos dos récords, uno primero para KTM, y otro para Honda. El mundo al revés de lo previsto. Márquez miraba la pantalla para confirmar que con ese le iba a bastar, y así fue. Él primero y el local Miguel Oliveira segundo, los dos con la plaza en el bolsillo para la definitiva Q2, más definitiva que nunca porque iba a configurar las parrillas del sprint de este sábado y de la carrera de este domingo.
Y ahí no iba a terminar la cosa… La Q2 comenzaba de nuevo con otra locura de Miller, otra vez por debajo del récord, y amenazando con seguir impactando en el gran premio. Aunque el australiano terminaría por los suelos y sin opciones de defender su sitio, porque en el segundo intento todo iba a subir un peldaño de exigencia. O uno y medio, porque el campeón Pecco Bagnaia, el favorito Pecco Bagnaia, cumplía con lo que de él se esperaba: solo, tirando como un loco, destrozaba el tiempo de Miller y lo acercaba a un registro que hasta hace poco parecía imposible, el minuto y 36 segundos. A dos décimas se quedó el italiano que parecía imbatible (Jorge Martín lo intentaba pero se quedaba a algo más de dos décimas), hasta que apareció Márquez.
"No sé cómo lo he hecho. Haciendo malabares. Necesito rebufo, a alguien delante"
Enganchado a un largo tren con tres pilotos delante, el español llevaba al límite a su Honda. De máquina, Aleix Espargaró, necesitado de un giro después de haberse ido al suelo en su primera intentona. Detrás, Oliveira, ansioso por brillar en casa. Y tras él el número dos de Ducati, Enea Bastianini, con Márquez agarrado a él como una lapa bajando en cada parcial el mejor tiempo de Bagnaia. En el Mundial esto se marca con unos cascos de colores, en gris si no se mejora, en amarillo si uno mejora su propio tiempo, en rojo si es el del mejor registro absoluto. Rojo, rojo, rojo… ¡y rojo! Pole y récord para Márquez, que cambia por completo el panorama esperado para el fin de semana en Portugal.
"No sé cómo lo he hecho, haciendo malabares" 😅
— DAZN España (@DAZN_ES) March 25, 2023
El @marcmarquez93 más sincero delante de @izaskunruiz #PortugueseGP 🇵🇹 #MotoGP 🏁 pic.twitter.com/61A7PzMWvm
"El día no se acaba aquí porque por la tarde llega lo importante. No sé cómo lo he hecho…", confesaba el seis veces campeón de MotoGP. "Haciendo malabares. Necesito rebufo, necesito a alguien delante. Sé que no es la manera más bonita de hacerlo, pero cuando tienes un punto fuerte tienes que aprovecharlo. He hecho una primera vuelta solo, pero cuando vas detrás de uno simplemente cierras los ojos y sigues. Creo que no es nuestra posición real, pero será importante porque habrá dos carreras". Y en ese arte también Márquez es capaz de sacar un extra.