MOTOGP | GP DE LA EMILIA-ROMAÑA

Bastianini, el tipo tranquilo amante de la pesca que no se corta un pelo cuanto está en la pista

El mánager del ganador en Misano, Carlo Pernat, charla con Relevo sobre las opciones de su pupilo en el actual Mundial.

Bastianini celebra su victoria en el Gran Premio Emilio Romaña este domingo. /EFE
Bastianini celebra su victoria en el Gran Premio Emilio Romaña este domingo. EFE
Borja González

Borja González

Circuito de Misano (Italia)-. El Mundial de MotoGP avanza con el ritmo impuesto por Jorge Martín y Pecco Bagnaia, que ahora entran en la fase esa de 'esto se lo lleva el que menos errores cometa': el que falla, lo paga, y, mientras tanto, los dos perseguidores en la general, Enea Bastianini y Marc Márquez, están al acecho. Es obvio que, por currículo, a Márquez se le da siempre una credibilidad en esta labor de tapado que no se le da a Bastianini, pero pasan las carreras y ahí se mantiene el italiano, que tras este segundo fin de semana consecutivo en el Circuito de Misano se ha aupado a la tercera posición de la general, a 59 puntos de Martín y con 222 aún en juego.

"La desventaja es mucha, ¿eh? Pero puede jugársela todavía. Si se considera que Marc tiene posibilidades, pues él está delante en la general. Pero hay que esperar", apuntaba este domingo a Relevo su manager, el mítico (en el paddock) Carlo Pernat, una presencia perenne en el campeonato desde los años 70, y que ha estado vinculado a Aprilia, a Valentino Rossi, Loris Capirossi, Max Biaggi o Andrea Iannone desde su presencia en equipos y fábricas o como representante. "El ritmo en la categoría es altísimo, y eso hace que el que va delante pueda fallar, y caerse. Y se pierden puntos. Pero está claro que, en estos momentos, tanto Enea como Márquez no pueden hacer ceros. Bagnaia y Martín, sí. De hecho, Bagnaia lo acaba de hacer, pero ellos dos, si se quieren jugar el Mundial, no pueden hacerlo".

Pernat siempre ha sido un vendedor de primera, sobre todo en el ámbito italiano, muy potente en el campeonato. Vendedor quiere decir que ha sido capaz de colar sus mensajes en los medios, de potenciar a sus clientes para luego negociar con más facilidad; y por su trayectoria, suele tener las puertas abiertas de casi todos los garajes, lo que le permite tener una foto de la situación, aunque muchas veces ponga el foco hacia sus intereses. "El talón de Aquiles de Enea es la clasificación en parrilla", analiza sobre su pupilo. "Cuando sales en cuarta o quinta fila sí, si eres como Márquez, remontas, y si eres muy valiente igual puedes terminar cuarto. Saliendo en primera o segunda línea sí que te puedes jugar la carrera, todo; no quiere decir ganar, sino tener opciones a todo".

Y es que Bastianini ha estado en ocho de los catorce grandes premios disputados hasta el momento fuera de esas dos primeras líneas, esto mientras Martín y Bagnaia se juegan la pole casi cada sábado. "El problema es que Enea perdió un año el año pasado, no existió, hizo nueve grandes premios, tuvo el problema en la escápula, y justo en una temporada en la que estaba en un equipo nuevo, con un jefe de mecánicos nuevo, la moto nueva. Así que, para él, este es prácticamente como un año nuevo", recuerda el mánager italiano, como defensa de un chico al que define como 'muy tranquilo'. "Es bastante introvertido también, las emociones se las queda para él, no las muestra. Es un tipo tranquilo que no suele enfadarse. Pero cuando lo hace, tienes que estar lejos de él por lo menos durante un minuto, porque dice cosas increíbles. Luego se le olvida".

Tranquilo (es un gran aficionado a la pesca), pero que ha demostrado bastantes veces que en pista no se corta. No lo hizo atacando a Bagnaia cuando se jugaba el título, sin importarle ni la línea marcada por Ducati, ni el año pasado por su actual equipo; o este año rebasando en la parte final de la carrera de Italia tanto a Marc Márquez como a Martín, para terminar segundo; o este mismo domingo, jugando con el límite. "En la vuelta anterior Enea ha intentado el adelantamiento y Martín, lógicamente, le ha cerrado. Y aquí Enea tenía algo más, era un poco más rápido que Jorge, aunque este no se ha rendido en ningún momento, así que para pasarle ha tenido que hacer, digamos, un adelantamiento 'a lo Márquez'. Y lo ha hecho bien". Porque el italiano tenía claro que podía ser su día. "Cuando estaba cambiándose media hora antes ya he visto en su cara que hoy se iba a jugar la victoria, estaba seguro, no que fuese a ganar, pero que se la iba a jugar".

Ahora habrá que ver si Bastianini aguantará en la pelea por el Mundial. Él, al igual que Martín, con el hándicap de que se sepa que en 2025 no va a seguir con su actual fábrica (se irá al Tech3 con KTM). "No es verdad. Absolutamente", responde tajante Pernat cuando le comentamos esas dudas que en algunos hay acerca de que Ducati no vaya a impedir que su piloto o Martín, que se irá a Aprilia, puedan ser campeones. "Te puedo garantizar que Gigi (NrR: Dall'Igna, el máximo responsable de la fábrica italiana) es muy correcto desde un punto de vista técnico. Él le dará las mismas cosas a todos, que es lo justo. Otro tema muy distinto sería debatir acerca de la decisión que han tomado… Para mí Martín, ahora mismo, es el favorito número 1, sobre todo con el cero de Bagnaia. Tiene que usar la cabeza para lograrlo, no cometer errores. Creo que ahora hasta los segundos puestos le pueden venir bien. Mi experiencia de me dice esto".

Por cierto, que Bastianini llegará a KTM, una fábrica que vive un momento complicado, tras la no renovación de su jefe técnico a principios de año, Fabiano Sterlacchini (ex número 2 en Ducati), a la que se ha unido la de su actual team mánager, Francesco Guidotti. "Ahora sí que me preocupa un poco", reconoce Pernat sobre el estado de la futura casa de su pupilo. "Yo creo que esta moto, la Ducati, por lo menos durante el año que viene y el siguiente será la mejor, hasta que llegue el nuevo reglamento. Quizás los pilotos puedan marcar alguna diferencia, Martín con la Aprilia, tal vez Enea con la KTM, pero para llegar al nivel de la Ducati… Me preocupa un poco la situación que hay, el lío. Porque cuando firmamos el contrato estaban Sterlacchini, Guidotti, nos dimos la mano. Si me pusiesen el contrato ahora, me lo pensaría un poco". Porque este experimentado personaje tampoco tiene demasiados pelos en la lengua.