Pecco Bagnaia eleva su figura en su batalla contra el campeón Jorge Martín
Pese a sus once victorias, el italiano no ha podio batir al español, aunque ha dejado la imagen de ser un deportista exquisito.
Circuito de Barcelona-Cataluña-. Pecco Bagnaia lleva mucho tiempo asumiendo su rol de campeón del mundo, aunque haya perdido el título de este año ante Jorge Martín. Lo asume, por ejemplo, con ese liderazgo que demostró cuando aseguró en Malasia que si la última prueba del Mundial se terminaba disputando en Valencia, él no iba a participar, aunque estuviese en juego el campeonato. Y lo asume con sus gestos. Recordando sus anteriores dos batallas finales por ser campeón de MotoGP, no tuvo ningún reparo en reconocer que en la de 2022 ante Fabio Quartararo, la de la remontada de 91 puntos, su rival no contaba con un paquete técnico a la altura requerida.
"Llegué a Valencia con 23 puntos de ventaja y, además, mi rival tuvo la desventaja de su inferioridad técnica". Un mensaje poco habitual, el de aceptar que tu situación no sólo se define por tus virtudes. Este fin de semana, Bagnaia siguió construyendo esa imagen en los días en los que el motociclismo más ha estado en el foco. Primero siendo muy claro acerca de lo que nunca iba a hacer para tratar de batir a Martín. "No voy a hacer absolutamente nada para poner en jaque el resultado del contrario, yo voy a dar el máximo en las dos carreras y luego lo que tenga que ser, será".
Y ese máximo le llevó a completar este domingo un doblete, el quinto de un año en el que ha sido capaz de ganar once carreras, unas cifras que en la historia de la clase reina sólo han alcanzado pilotos como Giacomo Agostini, Mick Doohan, Valentino Rossi y Marc Márquez. "Supongo que lo aceptaré en unos días, aunque después de la caída del sprint de Malasia entendí que iba a ser muy complicado. Recortar tantos puntos iba a ser casi imposible, pero he dado mi máximo ganando todas las carreras que quedaban desde entonces. Y era el máximo que podía lograr". Porque los ceros han terminado marcando el resultado final: sus ocho frente a los cuatro de su rival.
"Jorge ha hecho un mejor trabajo todo el año, especialmente en términos de regularidad. Creo que ha sido segundo unas dieciséis o diecisiete veces. Por nuestra parte, hemos tenido algo de mala suerte y he cometido errores, con lo cual resulta difícil ganar un título con ocho ceros. A pesar de haber superado el número de puntos del año pasado. Es decir, hemos hecho un buen trabajo, pero no ha sido suficiente y de cara al año que viene será importante aprender de algunas situaciones que han ocurrido esta temporada". Una frustración que arrastra desde que entendió que el título estaba muy decantado, pero que no ha cambiado su proceder.
Bagnaia llegó al parque cerrado tras ganar la carrera de Barcelona para celebrarlo con los suyos. Mientras tanto, Martín, que había sido tercero, estaba en medio de su show. Cuando el español llegó a la zona donde se dejan las motos, decidió colocarse en una esquina para salir del foco. "Es el momento de Jorge", reconocía, un gesto que volvió a tener en el podio. Se fue a un rincón a la derecha del que se había proclamado campeón y desde ahí, siempre con una sonrisa calmada en su rostro, observó todo lo que estaba pasando, sin meterse nunca en el plano.
"Sólo estaba mirando a Jorge", nos explicó después. "Nos conocemos muy bien, y creo que si alguien tenía que conseguir el título que no fuese yo, ese era él. Estoy contento por él, porque se lo merece y ha hecho un trabajo fantástico. Yo estaba ahí, viéndole celebrar, y sé lo fantástico que es ese momento. Consigues un objetivo por el que has luchado toda tu vida y cuando lo consigues es la mejor sensación que puedes tener". De nuevo la caballerosidad por delante, ese tipo de gestos que construyen campeones con mayúsculas. Porque a Bagnaia se le ha hurtado por momentos una parte del mérito que tiene, por correr en el equipo que corre y con la moto que corre. Pero, curiosamente, ha sido capaz de elevar su figura desde la derrota.
"No estoy en un punto de mi carrera en el que quiera fijarme en las estadísticas. Es fantástico mejorar y quiero continuar en esta misma línea. Todavía soy joven, tengo ocho o diez años por delante y voy a tratar de dar el máximo y de seguir mejorando los números. Pero lo más importante es incrementar el número de títulos. Sé que hemos perdido el campeonato por mis errores, y es algo en lo que tengo que mejorar. Si nos fijamos en Marc, él ganó dos títulos seguidos, luego lo perdió en 2015, y luego ganó cuatro de forma consecutiva. Yo trataré de dar el máximo para seguir creciendo". Casualmente, la siguiente etapa de su carrera profesional le va a llevar a pelear contra ese Marc Márquez del que nos hablaba, con las mismas armas, un reto que puede ser mayúsculo para el italiano.