Dos récords más para el niño Alonso en el triste GP de Malasia para su equipo
El campeón de Moto3 logró su decimotercera victoria de la temporada, la sexta consecutiva, que iguala otra marca de Rossi.
David Alonso sigue haciendo historia. Si en Australia fue capaz de igualar las once victorias en una misma temporada de la cilindrada pequeña que ostentaba Valentino Rossi desde 1997 (en 125cc en su caso), y una semana después firmó la duodécima en Tailandia, esta vez el hispano colombiano elevó esa cifra hasta las trece, o como se dice en el seno de su equipo, a 12+1, en honor al mítico Ángel Nieto, muy amigo de Jorge Martínez Aspar. Aunque lo que debía de suponer una celebración pasó a un segundo plano por lo complicado que fue el Gran Premio de Malasia con lo que estaba sucediendo en España, sobre todo en Valencia, tierra del Aspar Team.
"Después de todo lo que están pasando quería ofrecer una buena carrera y tratar de sacarles una sonrisa y, al igual que Jorge (Martín), donar el bonus de la victoria. Pero, aparte de eso, me gustaría ir allí y ayudar personalmente, si se puede, si la agenda me lo permite esta semana me encantaría, pero ahora lo que estamos es deseando volver a casa", reconocía Alonso que, además, encadenó su sexto triunfo consecutivo, igualando otro récord en la cilindrada menor de Rossi desde aquel 1997. "La verdad es que hoy había cosas más importantes que el récord, pero hoy tenía un reto bastante grande", nos explicaba tras volver a imponerse a sus rivales, y en un fin de semana en el que había tenido más dudas de lo habitual.
"Es un circuito en el que durante todo el fin de semana no he estado cómodo del todo, y en carrera se ha visto que hay algunas zonas en las que perdía un poco, y no era fácil este circuito para mí. Sabía que no era el más rápido ni el más veloz, pero he sabido usar la cabeza como me ha dicho mi técnico Mauri antes de salir, y esta victoria es también muy especial porque quizás después de Assen es el circuito que más me ha costado", reconocía de unos días en los que había ido sacando las cosas más a trompicones.
"Siempre me gusta retarme a mí mismo, y dando mi máximo me divierto. Y, como a otros pilotos, no me gusta estar detrás. Este fin de semana acabé el viernes, el sábado, que estaba ahí detrás e incluso estaba cabreado porque no encontraba la solución, y Nico (Terol) me decía 'tranquilo, tranquilo que no tienes nada que demostrar, tómate estos días'. Y sí que es verdad que no siempre se puede estar arriba, pero siempre trato de buscar la forma de estarlo". Una declaración que resume el espíritu ambicioso que esconde detrás de esa cara aniñada y de la sonrisa que siempre trata de mantener en su rostro.
"Lo bonito del deporte es que aún ganando seis carreras seguidas esta me ha costado lo mismo que la primera. Siempre te lo ponen difícil y tienes que estar reinventándote, y por eso tus rivales te hacen subir el nivel, porque siempre tienes que estar buscando algo nuevo. Pero lo que sí que trato de hacer un poco es verlo simple, no complicarlo mucho más allá de que sea una carrera a 15 o 19 vueltas; simplificar las cosas para pensar mejor, respirar mucho encima de la moto, y estar fresco de mente, porque tienes que tener la velocidad para estar ahí, pero también estar lo más fresco posible para siempre mirar la mejor opción para la victoria". Porque justo es esa manera de gestionar los finales de las pruebas lo que le ha colocado en la posición que está ahora mismo.
"Está siendo 2024 un año increíble, no tengo palabras, y es muy importante saber por qué está sucediendo todo esto, y tenerlo guardado en la cabeza para cuando haya momentos difíciles. El por qué hemos hecho seis victorias seguidas, por qué salimos y de qué manera trabajamos, para tenerlo en mente. Ahora hay que disfrutar de la última carrera de Moto3, que me lo ha dado todo, y luego cumplir una nueva etapa. Pero esta Moto3 CFMOTO siempre la tendré en mi corazón", señalaba antes de que la semana que viene encare la última experiencia sobre esta moto, antes de arrancar su etapa en Moto2, con un debut previsto para finales de la semana posterior al último gran premio, en unos entrenamientos privados en el Circuito de Jerez.
Y esto en un momento en el que el ambiente dentro de su garaje no fue el mejor, a la espera de ver si su gente consigue recuperar los ánimos durante estos días en casa, cuando están pudiendo ver los efectos de la DANA que en Malasia sólo les llegaba por los medios o por lo que les contaban los suyos. "Creo que este fin de semana sí que me ha ayudado a crecer como persona y como piloto en el hecho de madurar, cuando hay estas situaciones difíciles y salir a la pista dejando a un lado todo para hacer tu trabajo, y eso me ha ayudado a crecer como persona", repetía Alonso, que fue el primero el domingo en pasear la señera valenciana por el Circuito de Sepang, después de sumar su triunfo 12+1 en este 2024.