UFC

Brandon Moreno recupera el oro para México haciendo historia en el UFC 283

Los dos brasileños que disputaban combates titulares en el UFC 283 perdieron en Río. Brandon Moreno, campeón del mosca y Jamahal Hill, del semipesado.

Brandon Moreno celebra con su equipo su victoria en el UFC 283./UFC
Brandon Moreno celebra con su equipo su victoria en el UFC 283. UFC
Álvaro Carrera

Álvaro Carrera

A la carrera, con una lluvia de objetos y abucheos. Así tuvo que abandonar Brandon Moreno el octágono del UFC 283. Se reía el mexicano al entrar a la zona de vestuarios porque su victoria fue legal y no hay lugar a la polémica, pero él era el primero que comprendía a la afición. "Entiendo a la gente", declaró tras vencer a Deiveson Figueiredo en tres asaltos. De esa manera, Brandon vuelve a ser campeón absoluto del peso mosca.

La celebración seguro que no fue la esperada, pero el cinturón está en su poder y la rivalidad se cierra de su lado. Los fans brasileños son muy pasionales y aunque la arena no se llegó a llenar (el show acabó pasadas las 3 de la madrugada hora local) el ambiente fue muy caliente.

Figueiredo y Moreno hicieron historia este sábado. Nunca dos luchadores habían peleado cuatro veces en UFC. A Río de Janeiro llegaron con un empate absoluto. Una victoria para cada uno y un nulo. La igualada debía deshacerse y se cumplió en un pleito, como los anteriores, muy igualado. Se conocían demasiado y eso nunca se sabe si es bueno o malo. "Esta vez fui menos pasional e intenté desgastarlo", declaró el mexicano tras la pelea. Fue paciente e incluso lo llevó a un extremo con el que sorprendió. En una rápida acción, tras un tiempo de striking, la pelea se fue al suelo. Figueiredo intentó una guillotina y Moreno permaneció tranquilo, dejando que el local gastase energía. Permaneció casi un minuto en esa posición y se salió. En el minuto final, el campeón interino llevó la pelea al suelo de nuevo y el brasileño buscó otro intento de sumisión. Esas dos intentonas hacían que el round se quedase en Brasil.

El segundo asalto también estuvo parejo. Hubo mayor tiempo de dominio de Moreno, lo que igualaba las cartulinas. En el tercero todo se resolvió. Moreno estaba intentando mantener la pelea arriba, pero Figueiredo no encajaba golpes gracias a su mayor tamaño. Con un crochet de izquierda el mexicano conectó al local. Brandon tenía el puño cerrado e impactó con su pulgar. Golpe legal. Desde el primer momento Deiveson notó que algo iba mal en su ojo derecho: "Pensé que había sido un piquete de ojos", afirmó al acabar. No había polémica posible y Moreno fue con todo. Dominó el striking y castigó a un Figueiredo incapaz de abrir el ojo. Él quería seguir, pero el médico se lo impidió antes de comenzar el cuarto asalto. No veía, era una temeridad. En ese momento Moreno celebró y la opción de una quinta pelea podía llegar a algunas cabezas. Todavía no. "Llegó el momento de salir de esta categoría", informó el brasileño. Para Figueiredo dar el peso mosca es un grandísimo esfuerzo desde hace mucho tiempo y ahora probará suerte en el gallo.

Teixeira se retira de las MMA tras caer ante Hill

La noche para Brasil fue muy especial. Era el primer evento desde la pandemia que se realizaba en su país y además se anunció que José Aldo, retirado recientemente, entrará en el Salón de la Fama de UFC este 2023. El broche eran las peleas titulares. En la primera el cinturón no se quedó en casa y en el segundo sucedió lo mismo. Glover Teixeira había recibido un premio de UFC. Se iba a jugar el Campeonato del semipesado, que estaba vacante, ante Jamahall Hill en el duelo estelar de la noche. El local era favorito, pero el veterano (43 años) se encontró con un Hill extraordinario. Teixeira es experto en remontadas y por un momento jugó sus bazas en el quinto asalto, pero el estadounidense fue superior y acabó llevándose el cinturón por decisión unánime (triple 50-44).

El aguante de Teixeira fue extraordinario. Viendo el combate y la manera en la que se desarrolló es muy extraño que se llegase a los puntos. El brasileño es todo corazón. Lo demostró. Hill salió con mucho acierto en el primer asalto. Golpeó bien con sus manos. Tuvo por encima del 50% de acierto y frenó el suelo de Teixeira, quien solo logró un derribo. Se le hizo difícil conseguirlo. El segundo acto dejó claro el aguante del local. Hill siguió con un buen ratio de acierto y tras tres patadas en la cabeza de Teixeira el excampeón se tambaleó. Aguantó y lo hizo cruzando, tremendo. Los golpes con su izquierda y las high kick fueron la vía de la victoria de Hill. De nuevo Glover resistió de manera inesperada. La campana le salvó. En el cuarto asalto Hill contemporizó y pareció dar aire a su oponente, pero de nuevo la campana salvó a Teixeira. El dato no deja dudas: el estadounidense casi triplicó en golpes al brasileño.

 

En el round final, Teixeira fue con todo. Llevó la pelea al piso para intentar la remontada. Hill se defendió bien y acabó dominando en el suelo. El estadounidense fue muy superior y él mismo acabó perplejo: "Nunca había visto a alguien aguantar así". El éxito le llegó tarde a Glover (ganó el cinturón con 42 años), pero fue justo. Como era de prever, tras el pleito Teixeira dejó sus guantillas en el octágono. "Es un honor haber podido hacer esto en la misma jaula y la misma noche que Shogun Rua (otra leyenda brasileña que se retiró en el UFC 283)", declaró el brasileño emocionado. Noche de despedidas en Rio de Janeiro.