Alfonso Cabello se olvida de la Covid persistente definitivamente con su cuarta medalla en el kilómetro contrarreloj
El español paró el crono en 1:01.969, por detrás del australiano Korey Boddington (1:01.650) y el británico Blaine Hant (1:01.776).
París.- En el velódromo de Saint-Quentin-en-Yvelines, donde Ricardo Ten la jornada anterior consiguió la primera medalla de España en París 2024, Alfonso Cabello ha sumado otro bronce (quinto bronce de cinco medallas españolas en total) en la prueba del kilómetro contrarreloj C4-C5 del ciclismo en pista.
"Intento no darle vueltas, pero eso está ahí", contaba Alfonso Cabello hace unos días a Relevo. Hablaba del año y medio alejado de la competición y los entrenamientos por culpa de una Covid persistente. Le preocupaba que tanto tiempo inactivo, ¿le pasaría factura en los Juegos Paralímpicos?
"La verdad que para mí es un regalo estar aquí. Hace año y medio no podía montar en bici, y si ayer me hubiesen dicho si firmaba el tiempo que he hecho tanto en clasificatoria como en final lo hubiese firmado", ha asegurado.
En la primera parte del día, el andaluz se clasificó para la lucha por el bronce tras marcar un tiempo en su serie de 1:02.050, sólo superado por su rival en su manga, el australiano Korey Boddington, que hizo récord paralímpico de la clase C4 (1:01.190) y por el británico Blaine Hant (C5) que fue 45 milésimas más rápido.
En la final, ha logrado bajar su registro hasta 1:01.969, pero ha sido superado por el australiano Korey Boddington (1:01.650) y el británico Blaine Hant (1:01.776). "El deporte es así. Hemos estado los tres corredores en un pañuelo. Eso es lo bonito del deporte", ha comentado el medallista a la prensa española tras la ceremonia de premiación.
Es la cuarta medalla de Alfonso Cabello en esta prueba, tras los oros en Londres 2012 y en Tokio 2020 y bronce en Río2016. El domingo buscará otro metal con Ricardo Ten y Pablo Jaramillo en el sprint por equipos, donde el cordobés formó parte de los bronces de Río y Tokio.
Deja atrás así las dudas que planearon sobre su cabeza mientras intentaba recuperarse de la Covid: "He llegado a dudar incluso de si podía seguir dedicándome a ser deportista de manera profesional, momentos en los que realmente te planteas todo. Por eso el estar aquí y tener una medalla colgada en el cuello es muy, muy bueno para mí".