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En la cabeza de Aleix Gómez, el Hispano que va a su bola: "Es la mejor muñeca de la historia"

El extremo de 27 años es una de las claves del bronce olímpico de la Selección de balonmano de España.

Aleix Gómez (27), en las semifinales contra Alemania. /EP
Aleix Gómez (27), en las semifinales contra Alemania. EP
Andrés G. Armero

Andrés G. Armero

Hay una norma no escrita entre los periodistas que cubren a los Hispanos. Aleix Gómez puede pasar por zona mixta sin que nadie lo pare para entrevistarlo. El extremo derecho del FC Barcelona, poco amigo de los focos, es el verso libre la Selección española de balonmano. Él va a lo suyo: hacer magia en la cancha. Este domingo ha sido de nuevo clave en el bronce cosechado por el combinado patrio ante Eslovenia en los Juegos de París.

Dani Fernández, que se está consagrando en el combinando nacional, analiza desde el otro extremo a un compañero al que admira: "Para mí es el mejor extremo derecho del mundo, tiene la mejor muñeca de la historia", dice el habilidoso jugador del Stuttgart de la Bundesliga alemana. Lo de Aleix es pura magia: "Es un inconsciente, es capaz de hacer cosas que a los demás ni se les pasaría por la cabeza, en momentos en los que a nadie se le pasaría por la cabeza. Y el tío lo hace".

Su compañero lo define en pocas palabras: "Finalizador excelente, defensor inteligente". Es imposible desligar los numerosos éxitos cosechados por el Barcelona y por la Selección de la figura de Aleix Gómez, que debutó con Jordi Ribera en un amistoso contra Alemania en octubre de 2017. Es difícil pensar en dos perfiles más antagónicos que Ribera, "obseso del balonmano", y Aleix Gómez, al que poco le preocupa el 40x20 fuera de su profesión.

Aleix es un hombre muy querido en el vestuario. Tras su lesión, un fuerte golpe en el cuádriceps en la penúltima jugada del partido [los árbitros no pitaron nada de forma sorprendente], no pudo disfrutar de la celebración del bronce olímpico en la pista, pero sus compañeros estuvieron pendientes de él en todo momento. El asturiano Abel Serdio fue el encargado de acudir a rescatarlo y sacarlo de la pista en brazos.

"Para mí, es el mejor del mundo en su puesto, es mi opinión", dice 'El Comandante' Agustín Casado. "Lo que demuestra en cada partido, es un seguro. En los partidos grandes siempre está. Es un lujo tenerlo". Ian Tarrafeta recoge el guante: "Confianza ciega. Le das el balón, ya estás volviendo para atrás porque sabes que lo va a meter".

El portero Rodrigo Corrales define a Aleix, fuera de la cancha, como "un tío de la leche, a veces le gusta estar a lo suyo, tranquilo". En el 40x20, "es un superclase mundial". Cuando llegan los instantes decisivos, "le das el balón y te lo arregla". Este domingo, en la última jugada, "tenían que revisarla, porque le han metido una leche", opinión que comparten Tarrafeta y el resto de Hispanos. Pero eso ya es agua pasada.

Lo positivo es que Aleix Gómez, cuando pase el susto del golpe, volverá a brillar en las pistas del balonmano, en la Champions con el Barça y en el Mundial de enero con los Hispanos. Que nadie le rete a que recite las características de sus rivales, a Aleix Gómez no le preocupan demasiado. Como todos los genios, está concentrado en su magia. El extremo derecho sólo habla en la cancha.