JJOO | BALONCESTO | ESPAÑA 66 - BÉLGICA 79

Los 15 minutos que desconectaron a España de las medallas

El apagón ofensivo ha sido el fallo recurrente que ha tenido la Selección estos Juegos y volvió a aparecer ante Bélgica.

Laura Gil durante el partido ante Bélgica. /FIBA
Laura Gil durante el partido ante Bélgica. FIBA
Noelia Gómez Mira

Noelia Gómez Mira

Cuando arrancó el segundo cuarto ante Bélgica, un triple de Megan Gustafson -que se ha consagrado como un acierto absoluto para la Selección- ponía, por primera vez, a España por delante en el marcador. Con la pívot enchufada -eran diez los puntos consecutivos de ella desde la recta final del primer cuarto- y con ese 29-26 en el marcador, todo apuntaba a que España, si mantenía la intensidad del primer cuarto, podía seguir peleando. Pero los fantasmas que han sobrevolado a la Selección en estos Juegos volvieron a aparecer y de la peor forma posible: terminaron por costarle la eliminación.

Las desconexiones ofensivas han acabado por ser un lunar (y una losa) para España, letales para el adiós fuera de la lucha por las medallas. Ante Puerto Rico, en fase de grupos, ganó tras sufrir (y mucho) en los últimos compases del duelo, después de haber dejado escapar una renta de 15 puntos. Ante Serbia, más de lo mismo. Pero en ambas salió cara. Si bien, ante Bélgica ya era otra historia.

Del 29-26 mencionado anteriormente a falta de 9:03 minutos para el descanso, España pasó a ese contundente 39-59 tras un parcial de 10-33 de las belgas. Bélgica se puso con ese +20 a cinco minutos del final del tercer cuarto. Es decir, en 15 minutos del primer cuarto y ese arranque del segundo todo el trabajo quedó totalmente diluido. 843 segundos, para ser exactos, en los que la Selección estuvo totalmente desdibujada a nivel ofensivo y no logró reaccionar hasta que ya fue demasiado tarde. "Ha sido un final duro de campeonato. Hemos hecho un muy mal partido en el peor momento posible", admitía el seleccionador, Miguel Méndez.

De hecho, basta con mirar los porcentajes con los que la Selección cerró el partido, números bastante pobres a los que además se suman 16 pérdidas: 23/67 tiros de campo (34%), 15/45 en tiros de dos (33%) y 8/22 en triples (36%). Y este último aspecto lo cierto es que no ha terminado de ser bueno en ninguno de los partidos, aunque sí que los triples habían llegado en momentos clave.

Tan sólo Megan Gustafson, Maite Cazorla y Mariona Ortiz tuvieron un porcentaje salvable. Ortiz con un 50% de acierto en tiros de campo, aunque sin haber buscado mucho el aro (sólo tiró seis veces en todo el duelo); Cazorla con 5/10 en tiros de campo (50%) y 3/5 en triples (60%); mientras que la pívot tiró del carro con 8/16 en tiros de campo (50%) y 3/5 en triples (60%).

"En el partido, evidentemente, no quieres que eso pase", admitía María Conde unas horas antes del partido de cuartos en una entrevista con Relevo, a la par que confiaba en que "ojalá que a partir de aquí sea menos hasta que aprendamos a estar en los parciales en los que el otro equipo apriete, estando cada vez más sólidas". Pero, de momento, España no ha logrado encontrar ese equilibrio. Al menos, no lo hizo ante Bélgica en el partido en el que no podía fallar.

Así, lo que ha sido el 'pero' de la Selección estos Juegos Olímpicos ha terminado por ser también su condena. "No sé si ha sido algo mental, físico o técnico. No quiero analizar en caliente las razones", aseguraba Miguel Méndez. Si bien, es un aspecto al que el seleccionador tendrá que hacer frente de cara al futuro, para evitar esos fallos de concentración en las suyas que hacen que se salga del partido por no encontrar el aro.