Una carambola y un mísero punto emparejan a España con su última pesadilla

El equipo español va a tener que luchar contra gigantes para tratar de superar el récord de medallas de Barcelona 92'. Porque, desde luego, la fortuna nos es esquiva. En este caso, viajamos hasta el baloncesto femenino, donde nos enfrentaremos en cuartos de final a la temible Bélgica, actual campeona de Europa, que precisamente nos arrebató el triunfo el pasado verano. El combinado belga, que cuenta con un elenco de estrellas, ha logrado la clasificación de forma agónica, de rebote, por una carambola de resultados y por un único punto.

Mientras el equipo de Miguel Méndez rozaba la perfección y sumaba pleno de tres victorias en tres partidos, las belgas sorprendían al mundo cayendo 83-69 frente a Alemania en un duelo para olvidar. Por supuesto, también perdieron contra la titánica Estados Unidos. Pese a que compitieron hasta el final, se llevaron un marcador adverso de 74-87. Por ello, afrontaban la jornada final con la responsabilidad de vencer por una distancia holgada y cruzar los dedos para salvar los muebles. Y esa circunstancia llegó de auténtico milagro.

Cabe recordar que en el formato de la disciplina en estos Juegos Olímpicos de París, doce equipos se dividen en tres grupos de cuatro, donde pasan las dos mejores. Después, una clasificación mete en las eliminatorias a las dos mejores terceras. Bélgica hizo los deberes al ganar 85 a 58 a la débil Japón. Insuficiente para superar a Nigeria, que ha logrado dos victorias frente a la única del equipo belga.

Le quedaba, pues, rezar para tener una diferencia de puntos mejor que la de China, que contaba con el privilegio también de jugar contra la débil Puerto Rico antes de despedirse. La tumbó por 80-58. Con estos registros, tocaba mirar la diferencia general de puntos entre Bélgica y el combinado asiático para dictaminar cuál de los dos había hecho más méritos para seguir peleando por las medallas. Es surrealista: 228 a favor y 228 en contra para las belgas y 228 frente a 229 en el casillero chino.

Increíble pero cierto, el pase a los cuartos de final se decidió por un solo punto... Habiendo anotado exactamente los mismos y habiendo recibido China uno más. Y, como tal, pues directamente nos toca Bélgica. El motivo es que somos una de las mejores primeras y, por tanto, enfrentamos a una de las terceras en la siguiente ronda. Como Bélgica forma parte del grupo de Estados Unidos, pues no hay sorteo que valga: directamente, es nuestra rival. Las grandes favoritas se enfrentan a Nigeria.

El triunfo de Australia frente a Francia en la última jornada nos ha 'salvado' de ser la peor primera y, por tanto, estar en el Bombo 2 y enfrentarnos en cuartos de final a una segunda de grupo. Desde luego, un motivo de orgullo. Sumamos pleno de triunfos y no tenemos nada que temer. Ni a nadie.

Esta circunstancia también nos otorga el privilegio de no jugar contra las estadounidenses hasta una hipotética final. Estas son favoritas con puño de hierro, las claras dominadoras de la disciplina y ganarlas supondría un milagro. Tanto nuestro como de cualquier otra selección del campeonato.

Por tanto, tenemos el camino algo más despejado, siempre y cuando consigamos derrocar a Bélgica. Como medida de referencia para entender la magnitud de nuestras adversarias, vienen de hacer pleno de victorias en la fase de grupos del último Eurobasket con un average de -100. Casi nada.

Después ganaron de 40 en cuartos a Serbia y de cuatro en un duelo más sufrido a Francia. En la gran final, nos vimos las caras y nos ganaron por 58-64. Eso sí, no andamos lejos de la gloria. Fuimos arriba durante todo el partido, hasta que en el último cuarto nos endosaron un marcador de 10-21.

Emma Meesseman es una de las mejores jugadoras del mundo, como ha demostrado en decenas de ocasiones y volvió a gritar con sus 30 puntos, 11 rebotes, 4 asistencias y 5 tapones contra Japón. Pero no tenemos por qué alarmarnos: España llega volando al partido y ha demostrado mucho más que Bélgica en el torneo. Aun así, no está de más recordar que no nos cae ni una gota de suerte bajo un diluvio universal.

Por un punto, España enfrentará a sus peores recuerdos en cuartos de final. Una carambola de resultados que cambió a un rival relativamente asumible por una colosa y aspirante a la medalla. Solo se llega al éxito tumbando a las mejores y estamos plenamente capacitadas para lograrlo.