MANCHESTER CITY

Guardiola también disfruta en la crisis del City: "Soy fan de la derrota, el rival también compite y tiene papá y mamá"

El entrenador del City pasó por el programa de Youtube de Dani García en el que se sinceró sobre lsu figura.

Pep Guardiola, durante un encuentro con el City. /GETTY
Pep Guardiola, durante un encuentro con el City. GETTY
Alberto Martínez

Alberto Martínez

En los peores momentos de su carrera -en cuanto a resultados se refiere- Pep Guardiola concedió una deliciosa entrevista al chef con tres Estrellas Michelin Dani García, en su canal de Youtube Desmontaditos, en la que habló de sus objetivos una vez deje de entrenar -"aprender francés, jugar a golf y cocinar más"-, de los olores de su infancia a "cocina de leña y a mi abuelo, que le daba al vino como un campeón" y también de fútbol, mucho fútbol. Y se vio una parte más reflexiva del de Santpedor, en una charla distendida en la que razonó sobre el legado y la importancia de los jugadores y los entrenadores en trascender y sobre la importancia de Rodri en el City.

Guardiola se arrancó con un aforismo: "El legado es un coñazo, tienes que vivir tu vida. ¿Y si no te lo pasas bien?". Y después razonó sobre la influencia que entrenadores como él o antes Johan Cruyff han tenido sobre el resto de técnicos a la hora de evolucionar el juego, avalado siempre por las victorias. "¿Si me hace ilusión que en 20 años hablen de aquel Barça? Sí, pero a mí lo que me hace ilusión es preparar y ganar el siguiente partido. Esto sigue, y si te vas viene otro, y se olvidan. Y ya está. Cruyff le ayudó a ver el fútbol con sus ojos y ese es su legado, quizás pasa con jugadores que dicen que yo les ayudé, pero no tengo esa pretensión. No quiero pasar a la historia, lo mejor es pasarlo bien", comentó el técnico, quien reconoció en su última conferencia de prensa que este era un año para sobrevivir.

Al técnico de Santpedor le afectan las derrotas, como se ha visto en sus últimas apariciones, y él mismo ha reconocido, más nervioso de lo habitual. "Aunque te apoyes en los amigos, la soledad del entrenador no te la quita nadie. El duelo lo pasas solo. Entras en la habitación, apagas la luz y estás tú...", dijo. Y reflexionó sobre las exigencias actuales y sobre el mantra de estar siempre feliz. "No podemos ser felices todo el día. Si estás tristes, estás triste. Es lo que vemos en Instagram o Twitter, todo pasa y yo no voy contra lo que siento. Es bueno estar triste, vivir con ello, luchar con ello. No hay que ir contra el estado de ánimo. La gente pretende todo ser excepcional. Soy fan de la derrota, el rival tiene tanta capacidad, tiene papá y mamá. Mediáticamente no es así. Si no tienes tres Estrellas Michelin....".

Y, en una respuesta de casi seis minutos, continuó con su reflexión: "Te dictan que tiene que ser feliz siempre, que tienes que ganar la Champions, la Premier... Ya hacemos mucho con intentar hacer las cosas. Recuerdo un libro sobre la educación de Toni Nadal donde decía que si solo pasas la bola por encima de la red no hace nada especial. Lo único es que le gusta a mucha gente, pero el que inventó la penicilina tendrá más. Tengo un amigo, David Trueba, que me decía 'cómo gustaría que mis libros leyeran todas las personas que ven tus partidos...Yo la cago mucho, no soy perfecto".

"Rodri es la sal del City... Imagínate jugar un año sin Messi..."

Personalizando en esta temporada, Guardiola considera que la baja de Rodri por su lesión de rodilla le ha marcado al equipo, incluso hace una analogía con el Barça y Messi: "Es la sal de City. Se echa de menos. Imagínate jugar un año sin Messi, no habríamos ganado ni el sextete ni el triplete. Te aportan consistencia en los momentos malos. Cuando todo va bien, yo puedo jugar, cuando va mal es cuando aparecen esos jugadores. Le echamos de menos. Pero volverá más fuerte, el tiempo pasa rápido".

Guardiola, que repasó su etapa en Qatar, México y se mostró un enamorado de la cocina italiana, se resiste a la idea de dejar el banquillo, aunque dejó claro que necesitaría descansar después de su etapa en el City o coger una selección. La adrenalina del fútbol le posee: "Me gusta. No hay otra explicación: imaginar el partido, ponerte en el barranco, en el límite, animarte viendo que servirá, visualizar lo que pasará. Quiero dejarlo e irme a jugar a golf, pero no puedo. En un momento sentiré que es suficiente. Volver a empezar, no lo veo. Quizás una Selección. Debería parar, como los cocineros que van a otros países. Me iría bien, pero estoy aquí".

Cerró la entrevista reconociendo que le es imposible escoger al mejor once de su carrera, pero "estaría Messi, cena al margen", mientras que, por último, destacó que el momento más complicado fue su primer año en el Bayern: "Lahm me enamoró, me ayudó mucho. Aquel equipo venían de ganar el triplete con Jupp, y convencerles de jugar de otra manera el primer año fue lo más duro. Por qué debe cambiar la forma de jugar. Lahm me ayudó, también Kroos".