Parece mentira, pero es verdad. Como lo indica con sus guarismos la clasificación, este Real Madrid, si gana su partido aplazado de Valencia, se convertiría en el líder del campeonato, a no ser que por el camino se deje algún punto inesperado. No hay equipo que se agarre al flotador de la supervivencia como el de Ancelotti. Ya está ahí. Nos hemos pasado lo que va de Liga reconociendo los méritos de un Barça que comenzó imperial y resulta que al 'tran tran' los blancos ya están a tiro de piedra. El Girona no fue el Athletic.Estos rivales que quieren tener el balón y llevar la iniciativa del juego son los preferidos del Real Madrid. Los amansa primero y los da la puntilla después. Y más cuando sobre el césped se impone un futbolista imperial: Jude Bellingham.
En su constante búsqueda de un once y una ocupación de los espacios que le dé cierta continuidad al equipo, el técnico italiano volvió a colocar al inglés en la posición que mejor parece acoplarse a sus condiciones físicas y técnicas: la mediapunta. Valverde y Modric jugaron en un doble mediocentro que dio orden y oficio al colectivo y Jude arrancó por delante de ellos... y a su vez por detrás de Mbappé. El francés marcó pero no dio la sensación de estar recuperado de lo que le pueda pasar. Curioso que sin Vinicius su demarcación, hasta que fue sustituido, fuera la de delantero centro. No en la banda izquierda. En sus flancos, Güler y Brahim, voluntariosos, pero que pasaron medio de puntillas por el partido. En favor del turco ese buen gol que le puede ayudar a seguir creciendo.
Sin Vinicius, a la espera del verdadero de Mbappé, Bellingham ha salido al rescate cuando más le necesitaban sus compañeros. No solo son los cinco goles consecutivos que ha marcado en los cinco últimos partidos de Liga, es también su omnipresencia por toda la zona central del campo. Más cerca del área contraria que de la suya, el inglés impuso su ley. La del futbolista total que tiene una visión del juego que le permite dar pases como el del segundo gol a Güler.
La presencia de Tchouameni como central en el once titular puede tener varias interpretaciones. Una que, una vez recuperado de su lesión, está acumulando minutos en esa posición para jugar ahí el martes en Bérgamo y otra que el técnico quisiera dar descanso a Asencio después de cuatro partidos consecutivos de titular. Visto que Modric jugó los 90 minutos, si uno tuviera que jugarse la mitad de medio euro en relación al encuentro contra el Atalanta, apostaría por el canterano en el centro de la defensa al lado de Rüdiger y con el francés en la zona ancha al lado de Valverde.
