FÚTBOL CATALÁN

Una pancarta gigante en un campo de Tercera expone la guerra civil que vive el fútbol catalán: "Contra la corrupción federativa"

Sucedió en un encuentro de Copa Catalunya entre la FE Grama y el Cerdanyola.

Pancarta gigante en el campo de la FE Grama. /RELEVO
Pancarta gigante en el campo de la FE Grama. RELEVO
Marc Mosull

Marc Mosull

Este miércoles era día de Champions League, pero también de Copa Catalunya. Durante la tarde y noche de ayer se disputaron diez eliminatorias a partido único de esta competición, que tiene mucha tradición en la región, que este año estrena formato y que es especialmente atractiva para los equipos amateurs y semiprofesionales del territorio. Se jugaron Badalona-Europa, Tona-Olot, La Sènia-Terrassa… y también FE Grama-Cerdanyola.

Anunció la Grama, un equipo del grupo V de Tercera División de Santa Coloma de Gramanet, un municipio pegado a Barcelona, que toda la recaudación en taquilla del encuentro contra el Cerdanyola -la entrada valía tres euros- iría destinada a los damnificados por la DANA. Además, en la puerta del estadio, el club organizó una recogida solidaria de productos para enviar a la Comunidad Valenciana.

Buena parte de los espectadores que acudieron al encuentro se sorprendieron cuando entraron al campo y vieron que del techo de la tribuna del Estadio Municipal de Santa Coloma de Gramanet colgaba una pancarta de grandes dimensiones, de más de 30 metros de largo, con un mensaje, en catalán, claro y conciso: "Todos los clubes juntos contra la corrupción federativa". Una denuncia pública en un partido de Copa Catalunya -una competición que organiza la Federación Catalana de Fútbol (FCF)- que los presentes interpretaron que iba dirigida precisamente a la FCF. Y que, por cierto, el colegiado apuntó en su acta.

Y es que Antonio Morales, presidente de la FE Grama y exconsejero del Espanyol, es un firme detractor de la gestión de Joan Soteras al frente de la federación y uno de los actores más beligerantes en contra del ente que este preside, en el ojo de la polémica, pues hay una investigación en curso sobre un presunto fraude electoral en las votaciones a la presidencia de la federación. Y, de ahí, la pancarta del club de Santa Coloma de Gramanet.

Una guerra civil con muchos actores

El candidato perdedor, Juanjo Isern, denunció irregularidades en el proceso de votación, en la junta gestora que se formó y en la alteración de los resultados al sospechar que había habido firmas de presidentes falsificadas. Según desveló Mundo Deportivo hace un mes, la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Sabadell, Isabel Calahorra García, ya cuenta con la declaración de 88 presidentes y secretarios de clubes que afirman que se les falsificó su firma en las actas notariales que Joan Soteras Vigo y Víctor Güell otorgaron en la notaría de Sabadell Simón-Navarro.

Como ya explicamos en Relevo, desde hace meses que hay declaraciones cruzadas entre ambos bandos. Isern denuncia la "trama de corrupción electoral y federativa más grande de la historia del fútbol catalán" y pidió la dimisión de Soteras. Y el actual presidente de la federación explica que "no tienen nada que esconder" y que la oposición "quiere presidir y dominar la FCF a cualquier precio". Entre medias, aparecen nuevos actores como Oriol Camacho o Miguel Galán, el 'querellator' que empuja los procesos de destitución en la RFEF, aunque no siempre es tomado en serio por las élites del fútbol español.

También muchos clubes toman partido en este asunto. Como en toda guerra civil, los hay de un lado y del otro. Es el caso de la FE Grama. O del Nàstic de Tarragona, según se desprende de las palabras de su presidente en una entrevista a Futbol Catalunya. El Olot y Lleida, por ejemplo, también han manifestado que abogan por "un cambio de modelo".

No son pocas las entidades futbolísticas de Cataluña que están en la acera contraria y que defienden el trabajo y la honorabilidad de la actual junta de la federación. Entre muchos otros, es el caso de Hospitalet, Santfeliuenc, Atlético Marina, Montgat, CD Cerro, Sant Cugat, UE Cabrera -todos ellos han manifestado su apoyo a la FCF a través de sus redes- o Gavà, presidido por Iván Carrillo, vinculado a la FCF, que en su día twitteó que "Soteras limpió la FCF de corruptos" y que"hoy es un modelo de transparencia y honestidad".

Volviendo a la FE Grama, la pancarta gigante exhibida en su encuentro de Copa Catalunya ante el Cerdanyola, que por cierto venció 1-4, es el último episodio de un conflicto existente desde hace años en el fútbol catalán, con actores y versiones de todo tipo y acusaciones cruzadas entre ambos bandos, que se dirimirá en los juzgados.