Hasta 88 firmas falsificadas destapan la trama por el poder en la Federación Catalana de Fútbol: "Es un golfo y un sinvergüenza"
La jueza tiene la declaración de 88 presidentes de que les falsificaron la firma en las elecciones. Soteras, acorralado.
"Es un golfo y un sinvergüenza", resuelve en Onda Cero Antonio Morales, eterno presidente de la Gramenet, ahora la Fundación Grama, y exconsejero del Espanyol hace más de una década. Sus palabras son puñales en la Federación Catalana de Fútbol (FCF) y especialmente en Joan Soteras, su presidente, vicepresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y quien fuera escogido el mandamás de una junta gestora que no duró ni una semana. Las palabras de Morales, que se explaya, son duras, y aunque su vigencia es de hace diez días, vienen a colación.
"Falsificar firmas es un delito grave... En la Federación hay biberones; si te callas, te lo dan con leche y, si no, con agua salada. A mí nadie me ha amenazado desde allí y, si a alguien se le ocurriera, que se atenga a las consecuencias", añadió el presidente, que nunca se ha mordido la lengua, ni en el Espanyol ni en la Gramenet.
Todo ello tiene relación con el último avance en el caso que atañe a las elecciones a la presidencia de la FCF en febrero de 2023. El candidato perdedor, Juanjo Isern, denunció irregularidades en el proceso, en la junta gestora que se formó y en la alteración de los resultados al sospechar que había habido firmas de presidentes falsificadas. Ahora, la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Sabadell, Isabel Calahorra García, ya cuenta con la declaración de 88 presidentes y secretarios de clubes que afirman que se les falsificó su firma en las actas notariales que Joan Soteras Vigo y Víctor Güell otorgaron en la notaría de Sabadell Simón-Navarro.
Las primeras conclusiones de la jueza en las que se ve delito
La jueza resuelve que "podría ser indiciariamente constitutivo (…) de un delito continuado de falsedad en documento privado del art. 395 del Código Penal (en adelante CP), un delito continuado de falsedad en documento público del art. 392 del CP y un delito de administración desleal del art. 252 del CP".
Las personas que están investigadas y que, a falta de la resolución, participaron en esta falsificación son Joan Soteras y Víctor Güell, quienes comparecieron en la notaría y elevaron a público 213 certificados; José Miguel Calle, quien habría dado órdenes al resto de investigados y coordinó la elaboración de actas; Álvaro Montoliu, el que pagaría 30.000 euros a la notaría por esta gestión; y después una serie de representantes que formaron parte como Alejandro "Bomba" Guerrero, Sergi Garrido, Alberto Prieto, Jesús Manchado Lozano y Jesús Manchado Villena, todos ellos trabajadores de la FCF.
"Esto petará pronto", explican otras fuentes que siguen muy de cerca la investigación. Con las elecciones a la RFEF en el aire, en la Federación Catalana de Fútbol también se está a punto de producir una situación de colapso por el fraude en las elecciones. "Soteras me ha llamado más de cinco veces y no quiero saber nada de él, ya le dije que era un golfo y un sinvergüenza como todos los que habéis pasado por allí. Es escandaloso que un 'chupatintas' se lleve 300.000€ mientras yo voy loco para colocar la Lotería de Navidad por Sta.Coloma y las rifas en los campos para que esté esta pandilla de golfos que tendrían que ser nuestros trabajadores y resultan que son nuestros jefes y hacen estas gamberradas", cierra Morales.