VILLARREAL - FC BARCELONA

La tranquilidad de Flick que enamora a los futbolistas se pone a prueba en La Cerámica: "Gestiona muy bien las emociones"

El técnico alemán transmite un posado sosegado dentro del área técnica en el terreno de juego.

Hansi Flick durante eI partido ante el Mónaco. /EP
Hansi Flick durante eI partido ante el Mónaco. EP
Alex Pintanel

Alex Pintanel

"No soy quién para dar consejos, pero que tenga paciencia, que realmente es una plaza muy complicada", comentó Xavi en su día antes de saber que Hansi Flick sería su sustituto. El germano es un hombre tranquilo. Es el mensaje que se transmite desde dentro del vestuario. Le gusta el diálogo. Rara vez alza la voz, aunque siempre dice las cosas claras. Su llegada ha encandilado y convencido a los futbolistas y dirigentes. "Sabe gestionar muy bien las emociones", cuentan los que le conocen.

Laporta: «Flick no busca excusas».

Según ha podido saber Relevo, su aterrizaje ha calmado los ánimos. Su llegada a la caseta no ha podido ser mejor. Se le respeta. Su puesta en escena ha gustado, y los jugadores están francamente contentos con el mensaje que transmite. Los ha convencido. Y el vestuario "es una familia". Una piña. "Les digo a mis futbolistas que se olviden del árbitro y piensan en la siguiente jugada", reconocía el alemán.

Es un señor en la sala de prensa y en el área técnica. Y eso se valora muy positivamente en el club, que buscaba "un cambio de rumbo" también en ese sentido con respecto a Xavi Hernández. "Soy muy pasional", reconoció el egarense. Como jugador, recibió 53 amarillas en 767 partidos, una media de una cartulina cada 15 encuentros. Ya como entrenador, fue expulsado en tres ocasiones. Es el técnico del Barça que más tarjetas rojas ha visto. La última fue en la vuelta de los cuartos de final de la Champions ante el PSG la pasada temporada. Como futbolista solo vio la roja en solo dos ocasiones.

Xavi valora su expulsión ante el PSG.

Incluso el propio Xavi ya lo había comentado en más de una rueda de prensa. "El problema es que hay tensión, quiero ganar y quiero que gane el Barça, que es mi equipo de corazón. En eso estoy, sí que es verdad que en algunos momentos me tengo que controlar un poco más. Nada más. No voy a cambiar. Soy así, soy pasional. Es mi manera de ser y de competir y para nada va a cambiar mi imagen ni mi manera de ser", explicó.

Laporta está encantado con Flick

Un buen ejemplo de la actitud de Flick y que el club destaca sucedió en Vallecas. El colegiado no vio un penalti sobre Dani Olmo que posteriormente tampoco se señaló desde el VAR, se anuló un gol con polémica a Lewandowski y no se expulsó a Pathé Ciss por una entrada a destiempo sobre la tibia de Pedri, que se marchó a casa con los tacos marcados. Ante el Rayo, y a pesar de su enfado e indignación, el técnico no se quejó. Mostró tranquilidad sobre el terreno de juego y en la posterior rueda de prensa y entrevistas con las televisiones con derechos. Lo focalizó todo en la grave lesión de Marc Bernal. "Es un buen ejemplo para entender cómo es Flick", cuentan satisfechos desde la entidad culé. Ante el Valladolid, los gestos del alemán fueron los mismos al inicio del encuentro que con el 7-0.

Cierto es que en el último partido de Champions ante el Mónaco vio su primera tarjeta amarilla como técnico del Barça. Pero su puesta en escena es lo que buscaba el club. Hasta la fecha se están cumpliendo las expectativas puestas con Flick.