ESPANYOL 3 - CELTA 1

El alegato de Manolo González a favor del romanticismo en el fútbol: "La gente me dice 'cobrarás el contrato'... Eso no me importa"

La afición blanquiazul se pronunció en contra de la propiedad del club.

Piña del Espanyol tras el tanto de Cheddira. /RCDE / CARLOS MIRA
Piña del Espanyol tras el tanto de Cheddira. RCDE / CARLOS MIRA
Marc Mosull

Marc Mosull

Cuando en el 87' Walid Cheddira marcó el 3-1, Manolo González explotó. Se recorrió toda la banda del RCDE Stadium para gritar, como si fuera un jugador más, el tanto que confirmaba el triunfo de su equipo y le mantenía en el cargo. Pues de haber perdido, o incluso empatado, su cabeza corría serio peligro. Fue tan visceral su celebración que el árbitro le enseñó una amarilla. Inmediatamente después del tanto, tras la emoción del momento y de forma totalmente espontánea, la grada vitoreó al técnico gallego al grito de "Manolo, Manolo". Y Manolo se emocionó y, al borde del llanto, correspondió a la afición con aplausos.

Al término del encuentro, se repitió el cántico de apoyo al entrenador perico que, tras el pitido del árbitro, instó a sus jugadores a dar una vuelta de honor al estadio para agradecer el ánimo de los seguidores, que ante el Celta dejaron muy claro que están del lado del técnico gallego, el que subió al equipo a Primera hace apenas seis meses.

También lo tienen claro sus jugadores. Y es que la imagen del primer tanto, el golazo de Cardona que encarriló la indispensable victoria para los pericos, es la de los integrantes del banquillo, los suplentes y sus ayudantes, celebrándolo con Manolo González, fundiéndose en una piña con el entrenador que este sábado se jugaba su cargo. "Es que somos una piña", dijo el gallego.

Lo confirmó Cabrera, en declaraciones postpartido a DAZN: "Me siento muy contento por Manolo, es un gran entrenador y una gran persona. Cuando las cosas no salen se mira al entrenador. Nosotros sabíamos, estamos agradecidos a él por el año pasado y por esta, se lo merece todo". También Omar El Hilali: "Tenemos un feeling especial con el mister, sabemos que ha sufrido mucho con los resultados está semana".

“Me he emocionado”

En la rueda de prensa, a Manolo González le preguntaron si sufrió por su cargo durante la semana y si creía que de no haber ganado, hubiera sido cesado: "Esto solo lo sabe una persona. Realmente, no tengo ni idea de lo que podría haber pasado, pero si el equipo no gana y da mala imagen no hay que ser demasiado listo para saber que te puedes ir fuera".

"No estoy llorando, ¿eh? Pero, llegas a Primera División con mucho esfuerzo, te ha costado la vida, y quieres seguir. La gente te dice 'bueno, pero cobrarás el contrato'. No me importa el contrato. Yo tengo orgullo y amor propio. Y si tengo que salir del Espanyol quiero que sea cuanto más tarde mejor", añadió un Manolo muy agradecido a sus jugadores y, sobre todo, a la afición tras vivir sensaciones parecidas a las del día del ascenso: "Si eres del Espanyol y entrenas al primer equipo y ves que todo el estadio corea tu nombre dos o tres veces... es que es impresionante, un sueño. Me he emocionado. Que pase algo así cuando estás en descenso y vienes de un partido como el de Girona, es muy gordo. Les estaré agradecido siempre. No me lo habría esperado en la vida, la verdad".

Manolo sí, directiva no

Si lo de este sábado fuera un plebiscito es evidente cuál habría sido el resultado de la votación. Y es que a lo largo del encuentro, incluso antes del inicio y después del final, la grada lanzó cánticos, seguidos por buena parte de la afición, en contra de la propiedad; el "Chino vete ya", "Directiva Dimisión" y "diles que se vayan" fue un continuo durante el partido independientemente del resultado. De hecho, tras el encuentro, unas decenas de pericos siguieran protestando en contra de Rastar Group y Chen Yansheng enfrente de las oficinas del estadio, en los aledaños de la instalación como hicieron hace unos días en la embajada de China en Barcelona.