Ni el "va a ser peor" de Modric inmutó a Busquets Ferrer en una exhibición del árbitro

La RFEF ha divulgado este lunes, menos de 24 horas después del derbi del Cívitas Metropolitano, cómo vivió el partido el árbitro Mateo Busquets Ferrer. También, lógicamente, el lanzamiento de objetos a Thibaut Courtois que motivó la suspensión temporal durante un cuarto de hora. El colegiado balear siguió al pie de la letra el protocolo marcado cuando se producen este tipo de situaciones, como así lo fue explicando a varios de los protagonistas sobre el césped, incluido a Luka Modrić, pese a que el croata puso en tela de juicio su decisión con un "va a ser peor".

No era un encuentro sencillo para el colegiado, debutante en partidos del Atlético de Madrid y que apenas dirigía su segundo al Real Madrid, el primero de verdadera trascendencia para el conjunto blanco. El Comité Técnico de Árbitros depositó su confianza en él y Busquets Ferrer cumplió con nota y no solo en aspectos puramente del juego, sino que tuvo la valentía para aplicar estrictamente el protocolo marcado en caso de arrojarse objetos desde la grada al césped.

"Por favor, digan por megafonía que cesen el lanzamientos de objetos", comenta en un primer momento el colegiado a Pedro Pablo Matesanz, delegado del Atlético de Madrid. Posteriormente, el encuentro se reanuda con el saque de centro para los rojiblancos, como consecuencia del gol de Militão, aunque, poco después, se vuelve a interrumpir por la reincidencia en el lanzamiento de objetos a Courtois. "A la próxima, meto al equipo dentro", le dice al speaker del Atleti, que, inmediatamente después, vuelve a llamar a la calma a través de la megafonía del estadio.

Sin embargo, al aproximarse, de nuevo, a Courtois, el excolchonero le comenta que "así no puedo jugar". "¿Tú no puedes jugar? Vale, nos metemos dentro", suelta Busquets Ferrer, que se lo comenta, primero, a Simeone. "Diego, vamos a parar el partido diez minutos por lanzamiento. Vamos a entrar todos y luego salimos, ¿vale?". El técnico aplaude la actitud del colegiado, mientras sus ayudantes explican a varios jugadores qué ha decidido. "Es protocolo, Modrić", se escucha en los audios divulgados por la RFEF. "Nos metemos diez minutos dentro, Carlo. Vamos a ver si se puede solucionar", le indica a Ancelotti.

Con una tranquilidad admirable en un árbitro con poca experiencia en partidos de este calibre, Busquets Ferrer va explicando con calma y plenamente convencido de su decisión a todos aquellos que le preguntan. "Diez minutos, Dani, estoy cumpliendo el protocolo", le indica a Carvajal. La respuesta a Militão, más insistente en las protestas, es un "el míster te lo explica, se lo expliqué al míster". Modrić, sin embargo, valora que "va a ser peor" abandonar el césped, pero Busquets Ferrer no tembló ante las observaciones del capitán madridista. "Ya lo veremos". Los hechos dieron la razón al colegiado. Tras un cuarto de hora en los vestuarios, el encuentro se pudo retomar sin que se repitiesen incidentes de idéntica naturaleza en la media hora restante.

Quizá el único borrón del partido de Busquets Ferrer fue no valorar correctamente en directo la acción de Marcos Llorente sobre Fran García como roja directa. "Para mí, es roja. Sí, hay que llamar", comenta Javier Iglesias Villanueva desde la sala VOR en la Ciudad del Fútbol. Busquets Ferrer fundamentó su decisión de la siguiente manera: "Hay impacto, tacos, arriba... Voy a cambiar mi decisión. Roja por amarilla, por juego brusco grave". El jugador del Atleti ni la protestó. Incluso, Busquets Ferrer detalló al propio Llorente, con un tono calmado, "muy clara, muy arriba".

Porque, lo que se puede calificar como el otro fallo del arbitraje en el Metropolitano, es el gol de Correa, inicialmente invalidado por fuera de juego. Las repeticiones no dejaban lugar a la duda: el argentino estaba habilitado. Durante la revisión de la acción, el balear fue rodeado (de buenas formas) por algunos jugadores de ambos equipos, conversando con ellos e, incluso, sin ocultar nada. "Están comprobando la APP, fuera de juego no hay", le dice abiertamente a Koke en una demostración de que los futbolistas ya están familiarizados con el lenguaje arbitral (APP es Atacking Possession Phase; es decir, fase de ataque del equipo con la posesión del balón). El VAR corroboró que no había ninguna infracción en la ofensiva rojiblanca, de modo que el 1-1 definitivo subió al marcador y, con ello, prácticamente concluyó un partido que doctoró a Busquets Ferrer como uno de los colegiados con mayor futuro del arbitraje nacional.