REAL SOCIEDAD

La mejor Real de Imanol da la razón a Aperribay

Los donostiarras, tras ganar el derbi, se asientan en zona Champions con la mejor puntuación desde 2002-03, cuando rozaron el título de Liga.

Los jugadores realistas celebran el segundo gol del derbi, obra de Take Kubo./EFE
Los jugadores realistas celebran el segundo gol del derbi, obra de Take Kubo. EFE
Patxo De la Rica

Patxo De la Rica

La Real Sociedad no se quiere poner límites. La fiesta vivida el sábado ante el Athletic, con una gran comunión entre aficionados y equipo, la victoria y la gran dinámica del equipo permiten soñar a todos en la entidad txuri-urdin. Los directivos se marcaron esta temporada como clave para dar un paso adelante, tras tres clasificaciones a Europa consecutivas, y lo están consiguiendo. A estas alturas, es la mejor Real de Imanol y una de las mejores de la historia.

A solo dos jornadas de terminar la primera vuelta y tras ganar un partido tan especial como el derbi vasco, los donostiarras suman 35 puntos. 11 triunfos, dos empates y solo cuatro derrotas que dan muestras de la solidez y, sobre todo, de la regularidad que ha logrado este equipo en la actual temporada. Una puntuación que supera incluso a las que tenían en las dos campañas en que ganaron el título (1980-81 y 81-82). Entonces las victorias solo sumaban dos puntos, pero si las contabilizamos como en la actualidad, en los primeros 17 partidos de la 80-81 sumaron 28 puntos (8 triunfos y 4 empates) y al año siguiente alcanzaron las 34 unidades (10 victorias y 4 empates).

En toda la historia, solo dos años fueron mejores en cuanto a puntuación al de la actual Real. No es casualidad que fuesen las temporadas de los subcampeonatos, primero en 1987-88 y después en 2002-03, con 36 y 37 puntos respectivamente. Los guipuzcoanos caminan con un rumbo histórico, a menos puntos del liderato (6) que del quinto clasificado (7), y dan la razón a Jokin Aperribay, que esta temporada se atrevió a hacer público que visualizaba una Real Sociedad campeona de LaLiga en el futuro.

En la presentación de Umar Sadiq todo fueron risas cuando Aperribay explicó al detalle los objetivos para cumplir con los variables de la compra del delantero. "Un millón de euros si la Real gana LaLiga; 750.000 si jugamos semifinales de Champions...", dijo, entre otros conceptos. Ahora cada vez hay que tomarle más en serio, porque la realidad es que año a año siguen subiendo peldaños, superándose, y ya se han consolidado como un habitual en la élite española.

Con Imanol en el banquillo, a estas alturas de LaLiga el máximo de puntos que habían logrado era 30, conseguidos en la campaña 2020-21. Pero es que, además, en la actualidad han superado con suma facilidad las rondas de la Copa del Rey y por primera vez están en octavos de final de la Europa League tras ganar un grupo en el que compartía favoritismo con el Manchester United. El triunfo de Old Trafford, por ejemplo, es otra muestra más del paso adelante del cuadro realista.

Primer objetivo, Champions

"Está siendo un disfrute total. Vamos a intentar ir a por todo, no sé hasta dónde vamos a llegar pero estamos compitiendo de una forma bestial. Los últimos años no nos ha dado, se nos escapó la Champions al final, y esperemos que este año sí nos dé para conseguir lo que todos queremos". Así de claro fue Imanol en la rueda de prensa posterior al derbi. 

En el club, más allá de los deseos ambiciosos de Aperribay, sí consideran que en la actual campaña la Real debe colarse entre los cuatro mejores después de la fuerte inversión de verano, en el que desembolsaron más de 50 millones por Brais Méndez, Take Kubo, Ali Cho y Sadiq Umar. Competir en las rondas finales de la Europa League y conseguir un billete a la Champions League era la hoja de ruta para esta Real y por el momento está cumpliendo con nota.

El parón por el Mundial ha sentado bien al conjunto realista, que ha ganado sus dos partidos coperos y los tres de Liga desde el regreso a la competición. La única duda es cómo responderá el equipo cuando apriete el calendario en febrero y marzo, con las fases decisivas de la Copa y la Europa League, y siendo meses en los que en los últimos años han sufrido un bajón. Por el momento, todo es fiesta en Donostia.