En Lezama no paran de salir porteros, pero a quien el Athletic mima es a Julen Agirrezabala

Con la temporada recién iniciada y pese a las dudas que ha dejado el Athletic Club sobre el césped, una de las grandes noticias ha sido el rendimiento de Álex Padilla. De hecho, dos de las mejores paradas de estas primeras jornadas ligueras las ha firmado el vasco-mexicano. Un desconocido para la gran mayoría de aficionados, pero sobre el que en Lezama había mucha confianza desde el momento en el que Unai Simón decidió operarse y, sobre todo, cuando Julen Agirrezabala recibió un golpe en un entrenamiento de uno de sus compañeros. Saltaron las alarmas y aunque la previsión desde el inicio fue alrededor de un mes de baja para el guipuzcoano, significó un revés importante.

En plena 'crisis', el club tuvo claro que apostarían por Lezama. Como casi siempre. Y más en un puesto en el que se han convertido en referencia. Se puede afirmar, viendo los resultados, que la rojiblanca es una de las mejores factorías de porteros del mundo en los últimos años. No dejan de salir nuevas estrellas, ante la sorpresa de quienes les van viendo debutar, y brillar, en el fútbol de máxima élite.

Es cierto que Padilla sufrió en pretemporada y generó dudas, poco acertado en unos amistosos previos que sirvieron a algunos para sacar conclusiones precipitadas. Sin embargo, los que le siguen desde hace años hablaban de un portero diferente a los últimos que han aparecido en la cantera rojiblanca. No tan sobrio, pero sí eléctrico, hábil, rápido y de muchos reflejos. Lo ha demostrado en las dos primeras jornadas, firmando un paradón ante el Getafe sacando el pie ante Carles Aleñá y reaccionando rápido frente a Lewandowski en Montjuïc. El mejor de los dos primeros choques.

Lo reconoció el propio Valverde en la sala de prensa tras la derrota ante el Barça. "Álex está haciendo un gran trabajo y es importante para él coger cierta soltura, cada vez le veo más tranquilo y mucho más sólido que en la pretemporada", dijo el técnico, valorando el nivel de su tercer portero, que fue el elegido pese a que Agirrezabala ya había entrado en la convocatoria. La decisión fue deportiva, pero hay que enmarcarla en un contexto muy concreto y responde al objetivo de ir incluyendo a Julen poco a poco.

"Tenemos tres partidos esta semana", inició el Txingurri, antes de afirmar que su "portero es Julen". "No tengo ninguna duda", insistió. La idea que manejan en la entidad es que el joven meta guipuzcoano pueda jugar frente al Valencia o el Atlético de Madrid -no descartan que Padilla pueda jugar uno de los dos- y consolidarse después del parón como el meta principal tanto en LaLiga como en la Europa League, al menos hasta que Unai Simón se recupere de su operación en la muñeca. El héroe de la Copa tiene una oportunidad de oro tras haber renovado a final de temporada hasta 2027, conscientes de que haría más falta que nunca porque ya se conocía la lesión del campeón de Europa.

Si de algo ha servido esta situación crítica, con los dos porteros del primer equipo lesionados, es para comprobar la buena salud de la portería rojiblanca. El mencionado Padilla, además de Oier Gastesi -portero sobrio de gran evergadura-, han pasado de forma directa a las órdenes de Valverde y, con ello, ha habido un baile de porteros en todas las categorías. Sin ir más lejos, el joven Mikel Santos, bilbaíno de 19 años y destinado a ser el titular en el Basconia -segundo filial-, asumió con éxito la portería del Bilbao Athletic en el debut en Primera RFEF ante el Andorra (1-0). Con Padilla y Gastesi siguieron sus evoluciones desde la grada de Lezama, aplaudiendo cada una de sus intervenciones.

El joven negó el gol en varias ocasiones a los andorranos, sobre todo en una segunda parte en la que dejó una doble acción de muchísimo mérito. Eric Gamen apareció como el suplente en el filial, aunque en pretemporada también ha competido con el Basconia. Junto a él ha disputado algunos amistosos una de las grandes perlas: Simón García, un juvenil nacido en 2007 en el que hay puestas muchas esperanzas. Alto (por encima del 1,90) y esbelto, técnicamente muy bueno y ágil pese a su altura, está llamado a ser el gran portero del futuro próximo en Bilbao. Nacido en Corella, aterrizó en Lezama en 2020, en edad infantil, y junto a sus entrenadores de la cantera ha ido superando cribas, jugando por encima de su edad en estas dos últimas campañas y siendo internacional por España.

La portería es una fuente inagotable de talento en Bilbao. Los mencionados se suman a la larga lista de metas que han brillado en la élite en los últimos años. En la pasada Eurocopa, Simón y Remiro se colgaron la medalla de oro como premio máximo a esta proyección, sin olvidar a Kepa Arrizabalaga, además de Aitor Fernández, con una larga carrera en Primera División. A estos hay que sumar otros que completaron una carrera en Primera como Raúl Fernández y Iago Herrerín (compañeros de quinta), Jon Ander Serantes o Gorka Iraizoz.

Este superávit de porteros lleva implícito que algunas futuras estrellas de la portería hayan buscado acomodo en otras grandes canteras. El caso más evidente es el del joven vizcaíno Ander Astralaga (Berango, 2004), que compite como tercer portero en el Barça tras salir de Lezama. La herencia de Jose Ángel Iribar tiene muchísimo futuro.