Joaquín Caparrós reconoce que "es el momento más delicado" del Sevilla y se une al dolor de la afición: "Soy un biri más"

Situación límite. La tensión ha desbordado por todos lados en el sevillismo. Los resultados deportivos son una hecatombe, pero el hartazgo de una afición cansada ha llegado a un límite hasta peligroso. Aunque Joaquín Caparrós, que entiende el Sevilla como uno más de la grada del Ramón Sánchez-Pizjuán, lo comprende. "Yo estaría también cabreadísimo".

"Esperemos enchufar a la gente. Sabemos que nuestra gente va a estar. Y lo dice un sevillista, que yo estaría también cabreadísimo, pero cuando tenemos que estar ahí, los sevillistas estamos ahí".

Un discurso de Caparrós que dejó un ambiente muy preocupante en sala de prensa. Es complicado verle así. Siempre se muestra fuerte, sólido y con la confianza de que todo saldrá bien. Pero esta vez no es así. Está muy, pero que muy tocado. "Es el momento más delicado y en el que más estoy sufriendo. Por no ser el revulsivo que el sevillismo esperaba, y luego como sevillista. Dos partes. Una como técnico y otra como sevillista, que estoy sufriendo como cualquiera. Es la peor situación a nivel social. Pedir no se puede pedir nada. La afición nos ha dado ya tanto, que ahora es nuestro turno de darles algo".

Y es que todo es un caos. El 'recibimiento' de la afición el pasado sábado fue una locura. Se vivieron momentos de máximo peligro. Muchísima tensión. Caparrós también lo sufrió. "Después del partido, una desilusión. Íbamos con muchísimas expectativas, deseosos de romper la racha. Pero es cierto que el equipo anímicamente está muy tocado en ese aspecto. A nadie le gusta lo que sucedió. Sobre todo a los que somos sevillistas. Yo soy un biri más, y me identifico con el escudo y la bandera, pero no con la violencia. Pero me identifico con ellos porque por encima de todo está su equipo. Pero obviamente no es un plato de buen gusto".

Asumió el cargo cuando más difícil era, pero Caparrós siempre mantendrá lo que dijo el primer día. "Yo sabía que era complicado. pero si el Sevilla me dice ven lo dejo todo. Como cualquier sevillista. No me arrepiento de absolutamente nada. Yo sabía que la situación era complicada porque yo vivo en esta ciudad".