El horario del aeropuerto de San Pablo obliga al Sevilla a entrenar en Gran Canaria

Mucho que trabajar y mejorar en el Sevilla. El empate a domicilio ante Las Palmas ha puesto en evidencia las grandes carencias del equipo de Xavi García Pimienta, quien, además, ha introducido distintas variantes en el juego que aún no han cuajado del todo. El técnico barcelonés no tiene tiempo que perder y, por ello, ha organizado un entrenamiento matinal en Gran Canaria, algo provocado por el horario del Aeropuerto de San Pablo.

Durante el verano, el único aeropuerto de Sevilla cierra desde las 1:30 horas hasta las 4:30 horas, por lo que el club nervionense se ha visto obligado a dormir en la isla. Sin embargo, García Pimienta no ha querido desaprovechar ni una sola mañana pese a este contratiempo. Entrenará en torno a las diez de la mañana del sábado en un campo de la Ciudad Deportiva de Las Palmas. El resto de trabajadores del club viajarán a primera hora del día, pero la plantilla y el cuerpo técnico aprovechará el tiempo allí.

La sesión será de recuperación, pero también está previsto que le comunique a sus jugadores algunos aspectos tácticos que fallaron durante el duelo frente a Las Palmas. El técnico barcelonés es consciente de que debe seguir trabajando para lograr que su equipo juegue a lo que él quiere, sin cometer, sobre todo, errores en defensa. Le queda una ardua y complicada tarea por delante.

Otro cambio que ha introducido García Pimienta afectó al viaje de ida. El Sevilla, en temporadas anteriores, solía viajar el mismo día del encuentro siempre que fuera posible. La hora del enfrentamiento ante Las Palmas permitía seguir cumpliendo con la 'tradición', pero el técnico barcelonés prefirió salir durante la tarde del jueves. Esto es algo que otros entrenadores, como Diego Alonso, ya quisieron implementar en el club, pero finalmente no pudieron hacerlo. Gesto de fortaleza de Pimienta.

Gran Canaria ha sido como una casa para el nuevo técnico del Sevilla. García Pimienta logró el ascenso a Primera División con Las Palmas y, además, certificó la permanencia en la máxima categoría la pasada temporada. Unos objetivos nada sencillos y que le permitieron dar un paso más en su carrera en los banquillos, firmando por el conjunto nervionense este mismo verano.

Su vuelta a la isla la vivió de forma intensa: "Muchas emociones. Lo he dicho antes, cuando entras en el vestuario no sabía para cual irme. Siempre agradecido a esta isla, a este estadio y a esta gente. Muy contento de haber pertenecido y cumplido los objetivos cada temporada. Ahora pertenezco al Sevilla y también nos irá bien".