Un grupo de socios toca la tecla que desquicia más a Laporta: "Queremos que se levanten alfombras"

"No podemos permitir que la dirección actual continúe hipotecando el futuro del club. Es momento de que los socios y socias decidan si confían en esta gestión para los próximos años", en estos términos se expresaron seis grupos de opinión del FC Barcelona (Dignitat Blaugrana, Compromissaris FCB, El Senyor Ramon, Seguiment FCB, Un Crit Valent y Transparència Blaugrana), a través de un extenso comunicado, para impulsar una moción de confianza a la junta directiva de Joan Laporta.

Piden una "consulta telemática vinculante" para que los socios y socias con derecho a voto "puedan decidir si el Sr. Laporta y su equipo deben continuar dirigiendo el club". Así se lo han trasladado al Barça y han anunciado que, si, en un plazo de diez días no reciben respuesta, activarán otros mecanismos. "Después de tres años y medio de mandato consideramos la gestión de la Junta Directiva ha sido errática y peligrosa. Y ha puesto en riesgo la viabilidad económica y la reputación del FC Barcelona", reza el comunicado, que desgrana las siete razones que han propiciado la acción contra los actuales dirigentes.

La primera de ellas se sintetiza en una "gestión errática", la cual hace referencia a la mala utilización de las palancas financieras por parte de la Junta. "Básicamente, significa que con las palancas a ti te avanzan un dinero que no tendrás después. Entendemos que debe ser un tema extraordinario y puntual, pero se está convirtiendo en una costumbre que está hipotecando el futuro del club", detalla a Relevo Ricard Faura, representante de Dignitat Blaugrana, uno de los seis grupos impulsores de la propuesta.

El segundo punto que justifica la moción de censura es la "gestión lamentable con algunos mitos del club", resumida en las amargas despedidas de "Leo Messi, Ronald Koeman, Xavi Hernández o Saras Jasikevičius", que se han ejecutado de "manera desastrosa, dañando la imagen del club". Este "es un tema recurrente", según Faura, que cuenta que "cada año de mandato ha salido mal del club, como mínimo, una leyenda".

El caso Negreira es otro de los siete motivos de la acción. "El Barça debería haber reaccionado antes. Y reclamamos transparencia; por parte del club todavía no sabemos de cierto qué es lo que pasó. Queremos que se levanten alfombras y que se terminen con todos estos meses de sospechas hacia la entidad", comenta el representante de Dignitat Blaugrana.

No hay que olvidar que este es uno de los asuntos que más desquicia a Laporta, pues en la rueda de prensa para defenderse de las acusaciones de corrupción del caso Negreira se le vio más exaltado de lo habitual y cargó como nunca lo había hecho antes contra el Real Madrid, el "equipo del régimen", que se había personado como acusación particular en el caso.

Pero volviendo al comunicado, "la falta de transparencia", "el caso ISL" (el reconocimiento de que un proveedor del club ha prestado dinero a los actuales directivos/as), así como la "pérdida y fuga de talento" en la parte ejecutiva del club y el olvido del "Nuevo Palau" en los acuerdos firmados con Goldman Sachs son el resto de motivos que esgrimen los seis grupos de opinión azulgranas para impulsar la moción de censura a la junta directiva que preside Joan Laporta, que, de momento, no ha respondido. "Normalmente, tardan un par o tres de días en contestarnos o citarnos", dice Faura.

"En el Barça siempre es mal momento para sacar un comunicado de este tipo", dicen. Es por ello que los seis grupos de opinión decidieron impulsar la moción de censura cuando mejor está el conjunto catalán, líder de LaLiga. "Decidimos hacerlo ahora, cuando las cosas van bien. No podrán decir que somos oportunistas. En todo caso, la mayoría de nuestros motivos vienen del inicio del mandato actual", asegura Faura.

"El problema que tenemos es que como la pelota entra, lo demás queda tapado. Pero siguen existiendo esos problemas y se van acumulando. Y por eso pedimos atacarlos, no queremos llegar a un punto que no tenga solución, como nos pasó con la moción de censura con Bartomeu", relata el portavoz de Dignitat Blaugrana.

La fórmula elegida para atajar y esos problemas y reclamar que los socios decidan el futuro del club y de su Junta Directiva es una moción de confianza. "Muchos de nosotros participamos en la moción de censura anterior y sabemos lo que cuesta. No es cómodo para el club ni para los socios ni para los dirigentes. Esta es una solución mucho más elegante y sencilla, menos traumática, porque es el propio club que convoca a los socios y propietarios para decidir", lo cierra Ricard Faura, que, como el resto de los firmantes, sigue a la espera de una respuesta por parte del FC Barcelona.