Un exjugador del Barça desvela 25 años después cómo era aquel equipo de Van Gaal: "Él hablaba, pero luego le hacíamos caso a Guardiola"

Louis van Gaal dejó huella en Can Barça. Por muchas cosas, pero especialmente por su sus excentricidades con los medios de comunicación y los futbolistas. Estuvo cuatro temporadas en dos etapas distintas. Ganó dos Ligas, una Supercopa de Europa y una Copa. Mítica es la frase a un periodista holandés, Edwin Winkels, "tú eres muy malo, muy malo, interpretación siempre negativa y nunca positiva". "Es increíble que esta frase siga usándose en España… ¡Lo dije una vez!", se sorprendió el neerlandés hace pocos meses.

En aquella plantilla plagada de estrellas, especialmente en su primera etapa, sobresalían jugadores como Figo, Giovanni, Rivaldo, Guardiola, Kluivert, y un joven Xavi Hernández, que empezaba a entrar poco a poco en el equipo. En el verano del 97 aterrizó un joven futbolista serbio, Dragan Ciric, nacido en Belgrado hace 50 años. Precisamente ahí tiene un restaurante que se llama 'Milagro'. Estuvo dos temporadas en Barcelona y cuatro en Valladolid. También en Partizán.

El paso de Guardiola por el césped dejó una huella imborrable. Como la que está dejando ahora en los banquillos, donde ya suma 39 trofeos, siendo el más laureado de todos los tiempos. El Guardiola futbolista ya daba pistas de lo que podía llegar a ser en un futuro, por como se movía, dirigía, mandaba, lideraba y resolvía. Aunque probablemente era muy atrevido pensar en una carrera en el banquillo como la que está disfrutando. Es un privilegiado de las banquetas.

"Tengo un buen recuerdo de Guardiola. Como jugador era impresionante, pero tenía entonces ya tenía el talento de ser entrenador. Él lo era todo", cuanta Ciric en una entrevista en el programa 'Què t'hi jugues' de la Cadena SER. "Cuando terminaba la charla antes del partido y salía Van Gaal del vestuario, Guardiola se ponía hablar y decía como teníamos que jugar. Lo arreglaba todo. Le hacíamos caso a Guardiola. Ya se veía que tenía talento como entrenador", reconoce.

Ciric pasó sin pena ni gloria por Barcelona. Tuvo mucha competencia en su posición. Por delante tenía a Luís Figo. "Fue una época muy buena, de las mejores de mi vida. Firmé por el Barça y con un buen contrato", recuerda con satisfacción. "Ahora estoy totalmente desconectado, no veo los partidos. Dejó de interesarme el fútbol. Estoy muy bien. Solo me quedé con una camiseta del Barça firmada por mis compañeros, pero no tengo ni vídeos míos jugando", sorprende.

A pesar de ello, una foto de sus hijos con la MSN (Messi, Suárez y Neymar) preside el fondo de pantalla de su teléfono. "A mis hijos sí que les gusta el fútbol", concluye. Esta noche (21:00 horas) en el Pequeño Maracaná se verán las caras Estrella Roja y FC Barcelona. Un partido que paralizará Belgrado. Excepto para Dragan Ciric, que tendrá el restaurante abierto hasta la medianoche.