El doble seguro de Baraja en el Valencia: mantiene el apoyo interno y una cláusula alta
El arranque del Valencia es muy malo, pero el entrenador mantiene la confianza de la directiva y buena parte del vestuario.
El inicio del Valencia Club de Fútbol esta campaña ha sido horrible. Un bagaje que ni el propio calendario (que es cierto que era complicado) puede tapar hasta el punto de que el propio Rubén Baraja al acabar el partido ante la Real Sociedad dejó frases como "¡Ya está bien!", "Tenemos que espabilar" o "No hay excusas, ni juventud ni calendario". En las últimas horas son muchas las miradas que se han puesto en el entrenador vallisoletano, no para señalarle como culpable de la situación que vive el club (ese es Peter Lim), pero sí para cuestionarse si él es la solución.
Y lo cierto es que Baraja cuenta con un doble seguro a día de hoy en el club que hace que su posición, de momento, no esté a debate internamente. Por una parte, la entidad de Mestalla cierra filas en torno a él y hasta la fecha en ningún caso se ha planteado, barajado, o pensado su salida. El balance del técnico en el club desde su llegada (salvarlo primero y casi meterlo en Europa segundo), el hecho factual de que Baraja públicamente nunca ha montado ningún incendio, sumado a que el grueso de la plantilla sigue apoyando a su entrenador, llevan a que no trasciendan desde dentro dudas en su figura... Al menos de momento.
El partido ante el Leganés es muy importante, puesto que el Valencia puede salir del descenso, es ante un rival directo y una derrota sería durísima. Y sin embargo, no se ha puesto una etiqueta a ese partido como de 'final' de que pudiera suponer el despido del Pipo si no lo gana. Evidentemente, con una derrota humillante como la de Anoeta, quién sabe qué pasaría, pero la realidad es que nadie le ha puesto un 'vida o muerte' a Baraja en ese partido.
Por otra parte, cuando Rubén Baraja y el Valencia firmaron el contrato de renovación no se incluyó ninguna cláusula de escape para ninguno. Igual que si Baraja se hubiera querido ir por no estar de acuerdo con la plantilla que le hicieron, habría tenido que pagar una gran indemnización (algo inferior a los 5M de euros que existía en su primer año), si el Valencia le quisiera despedir tendría que abonar un buen dineral a su técnico, muy parecido a los 5M de euros que tenía en su primer contrato, aunque algo inferior. Lo que hace más delicada la situación dado el nivel económico en el que se encuentra el club.
La información expuesta es la última hora del futuro del entrenador, si bien todo sea dicho en 2020 desde la entidad che emanaba un mensaje similar sobre Albert Celades y de repente, una llamada de Peter Lim hizo que fuera despedido, por mucho que todavía tuviera adeptos en la entidad. Evidentemente en esa época Lim era mucho más intervencionista que ahora y parece complejo que ocurra, además en esta ocasión el grueso de la plantilla sí está con su entrenador, pero es necesario refrescar un precedente como el mencionado por lo que pudiera ocurrir. De la misma forma que el club respaldaba a Gattuso pero fue él quien se marchó, algo que a Baraja no se le pasa por la cabeza tampoco.