Los cinco saltos de Iñaki Peña reafirman el invicto: "No pensamos en récords"

No era un partido sencillo para Iñaki Peña. Todos los focos estaban puestos en el alicantino tras la lesión de gravedad de Ter Stegen y la llegada de Szczęsny. Y eso se palpaba en el ambiente. Incluso se rumoreó la posibilidad de que el nuevo portero viera en directo el choque ante el Getafe. Finalmente, no fue así. Salió concentrado Peña. Tras el corrillo inicial con el resto de futbolistas se dirigió a la portería, la que estaba en el fondo de la Grada d'Animació. Hubo ovación cerrada de todo el estadio y gritos de 'Iñaki Peña'. Lo agradeció el guardameta con un gesto de aprobación.

"Confiamos en Iñaki Peña", dijo Flick en la previa del duelo. El alemán lo volvió a repetir en la entrevista de previa en los micrófonos de LaLiga TV. "Ya lo dije ayer", reiteró. En el post sí que explicó que un punto de experiencia en la meta sería positiva para la plantilla. A Iñaki no le ha sentado bien todo el ruido externo sobre su situación. Entiende que el Barça busque un portero para suplir a Ter Stegen, pero considera desmesuradas las críticas hacia su figura.

El portero apareció en el minuto siete para atajar sobre la línea un cabezazo de Álex Sola. Se volvió a llevar los aplausos del respetable en una primera mitad muy tranquila. No tuvo que aparecer más. Siguió el juego desde la distancia, ordenó a sus compañeros en algunas ocasiones y estuvo atento a un par de balones que llegaron con espacio a la espalda de su defensa. Se marchó a la caseta, de nuevo, tras ser ovacionado, besar el travesaño y uno de los palos de la portería y recoger su botella de agua. Los rituales le reconfortaban.

Cinco saltos de Iñaki Peña de palo a palo. El ritual del alicantino antes de iniciarse la segunda parte. Atento a los balones divididos. Pensativo en muchos momentos del encuentro. Le dio tiempo. El Getafe no se acercó durante muchos minutos. E incluso aprovechó para ver repetida alguna acción por el videomarcador, como el disparo de Lamine que mandó a saque de esquina su colega David Soria. No fue la única. Pisó el punto de penalti. Estuvo seguro en las pocas intervenciones que tuvo que hacer. Aplaudió una acción defensiva de Balde para interceptar un balón y mandarlo a saque de esquina. En el minuto 23 del segundo acto se coreó el nombre de Ter Stegen, como al inicio del encuentro. Bebió agua, recogió la botella y se marchó igual que empezó el partido, saludando a los aficionados.

Gerard Martín fue el primero que se le acercó, y luego alguno de los canteranos que no jugó. Balde le abrazó y se marchó comentando la última acción del partido con Iñigo Martínez. A la espera del fichaje de Szczęsny, Iñaki Peña superó con nota su primer examen. Ya son siete victorias en siete jornadas y, en caso de ganar en Pamplona, igualaría el récord del Barça del Tata Martino. "Cuando empezamos la Liga pensamos en ir partido a partido y esto es lo que seguimos haciendo. No pensamos en récords", aseguró Flick.