Bordalás cortocircuita la máquina de Flick y el Barça no levanta cabeza en LaLiga
El tanto madrugador de Koundé lo neutralizó Arambarri y los azulgrana se estrellaron ante el muro de los azulones.
Jugar en Getafe sigue siendo tan incómodo como masticar cristales o ir a hacer un trámite a Hacienda, incluso para un Barça que había sido un martillo pilón en los dos últimos partidos: 2-5 ante el Real Madrid en la final de la Supercopa y 5-1 para eliminar al Betis de la Copa del Rey. Pero el Coliseum es una plaza distinta, un iglú de frío donde se hielan las ideas por mucho que los de Flick salieran abrigados y dispuestos a resolver el partido por la vía rápida. Como de costumbre.
No pudieron los azulgrana aprovechar el tropiezo del Atlético de Madrid en Leganés (1-0). Fue una tarde para la reinvindicación de las ciudades madrileñas, porque el Getafe arañó un punto ante un equipo que había marcado el ritmo en Europa en este 2025, pero que en LaLiga atraviesa por un túnel negro y extraño. Los de Flick acumulan una victoria en los últimos ocho encuentros, y han pasado de ser líderes destacados a poder colocarse a siete puntos del Real Madrid si los blancos vencen este domingo.
El Barça que se pasea con suficiencia por Europa, que golea al Bayern o gana en Dortmund, que ya levantó un título y pisa firme en la Copa del Rey a la espera del sorteo del lunes, no acaba de enderezar el rumbo en LaLiga, y en Getafe tampoco se reencontró con la victoria después de perder ante Las Palmas, Leganés, Real Sociedad y Atlético de Madrid, de empatar ante Celta y Betis, y de ganar, como excepción, frente al Mallorca.
'Pichichi' Koundé y efecto gaseosa de un Barça desdibujado
A los nueve minutos, ya se había puesto por delante. Bastó una genialidad de Pedri y el instinto de un nuevo delantero que nace desde la posición de lateral derecho, Jules Koundé, que sumó el tercer tanto de la temporada, el segundo seguido. Atrincherado el Barcelona en el campo rival, con un Getafe que salió con Djené de ancla en mediocampo y con una vigilancia constante a Pedri, encontró luz gracias al canario. Pedri recibió un pase en el costado izquierdo y sacó la escuadra y el cartabón para trazar una línea con su pie derecho que solo existía en su cabeza.
Una diagonal que fue superando rivales, una asistencia de baloncesto directa al pie derecho de Koundé, que se topó con las manos de Soria, que fueron de mantequilla, ya que no pudieron atrapar el balón y finalmente el francés acabó celebrando el tanto. El Barça había hecho lo más difícil. A los 20 minutos de partido, incluso, manejaba un 83 por ciento de posesión. El partido estaba en su mano, pero no todo era lo que parecía.
A Bordalás no le inmuta un 'balazo' y el Getafe obtuvo un premio
Bordalás es de aquellos entrenadores que no se inmutan ni por un balazo. Mantienen el tipo siempre, sigue el plan a rajatabla, y así su Getafe no se alteró por el 0-1. Orden y progreso, como la bandera del país del jugador que tuvo en su cabeza el 0-2. Un centro de Koundé tras un ataque que inició Lamine Yamal con su exterior del pie lo remató Raphinha, solo en el segundo palo, al lateral de la red. Demasiado ímpetu, poco tino. El Barça dejó escapar una oportunidad y lo pagó.
Llegó el empate del Getafe obra de Arambarri. El fútbol de desenlaces inesperados de jugadas que parecen inocuos, como era la que enlazaron Aleñá y Milla, pero el centro de este le llegó a Coba, que empaló cruzado para que Iñaki Peña despejara como mandan los cánones, hacía un lateral, pero justamente por ahí entraba un Arambarri habilitado que no desaprovechó el regalo. Un 1-1 con el que se llegó al descanso pese a que Lewandowski tuvo de nuevo la ventaja en su cabeza.
La fuerza de Lamine Yamal puede con los agarrones de Djené
Electrizante fue el comienzo del segundo acto. Arambarri tuvo una primera acción en la que no logró conectar un buen disparo, y en ese esfuerzo se lesionó por lo que tuvo que salir del campo. El Barça replicó con un remate inocente de un Lamine Yamal que tiró del carro, en una de esas exhibiciones de fuerza, calidad técnica, potencia, visión de juego que ya acostumbran a ser normales: una arrancada en la que Djené lo agarró, más de una vez, pero no fue capaz de frenarle, lo resume todo.
Con Frenkie de Jong y Dani Olmo en lugar de Casadó y Gavi, el Barça ganó experiencia y pólvora por dentro, y prosiguió con el asedio. El partido se jugaba en 30 metros, los que había de la línea de meta de Soria a la zona intermedia del campo azulón, porque los de Bordalás no eran capaces de quitarse de encima la garrapata azulgrana, que en ningún momento bajó el pistón.
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La ocasión de De Jong y el enfado con el árbitro
Pero no fue capaz por mucho que Lamine lo intentara, que Lewandowski acabara sustituido pese a que el Barça necesitaba goles -una contradicción habitual ya esta campaña- o que De Jong fue el que estuvo más cerca de ese 1-2 en una gran intervención de David Soria. El partido se iba muriendo entre cambios extraños -Bordalás sacó a Yellu después de ver una amarilla y tras solo 18 minutos en el campo-, tarjetas amarillas y momentos de tensión. Y acabó con los jugadores azulgrana rodeando al árbitro, enfadados, y de nuevo sin ganar en LaLiga. Un contrasentido tras el rodillo que demostraron en 2025, en la Supercopa, en la Copa y, por el momento, en la Champions.
FECHA TÉCNICA
- Getafe : David Soria; Juan Iglesias, Djené, Domingos Duarte, Alderete, Diego Rico; Aleñá (Carles Pérez, 66'), Arambarri (Yellu, 49'; Álvaro, 66'), Luis Milla, Coba y Uche.
- Barça : Iñaki Peña; Koundé, Cubarsí, Araujo, Balde; Casadó (De Jong, 46'), Pedri, Gavi (Olmo, 62'); Lamine Yamal, Lewandowski (Ferran Torres, 61') y Raphinha.
- Goles : 0-1 Kounde (9'), 1-1 Arambarri (34').
- Árbitro : Pablo González Fuertez (Comité Asturiano). Amarillas a Yellu (53'), Djené (86')
- Estadio : Coliseum Alfonso Pérez, 15.134 espectadores.