El Barça sigue 'pescando' en Madrid: Byron, ahora en el Leganés tras salir de Valdebebas, también fichado

Es marzo, así que la máxima competitividad entre las canteras más potentes de España está a flor de piel en su objetivo de fichar a las estrellas del futuro. Y en la peculiar batalla entre el Barcelona y el Real Madrid hay más novedades. Byron Mendoza (2009) será nuevo jugador del Fútbol Club Barcelona a partir del próximo verano. El futbolista del Leganés, aún en edad cadete, supone un movimiento más del club catalán en la capital española. Unido al fichaje de Marcos Parriego, desde el Rayo Vallecano, llega el del esta joya que ha deslumbrado en la entidad pepinera.

Los dos jugadores comparten una particularidad: ambos han pasado por la cantera del Real Madrid. En el Barça la consigna es clara para contrarrestar el delicado momento económico del club: tratar de detectar el talento lo antes posible, sobre todo en territorio nacional, y por ello llevan todo este curso siguiendo exhaustivamente a los cracks del futuro también en la Comunidad de Madrid. Jon Andoni Goikoetxea, exfutbolista internacional del Barça y la Selección, es el encargado de viajar a la capital de España para corroborar los informes sobre este tipo de descubrimientos y aprobar definitivamente las operaciones.

El caso de Byron estira esta premisa, y se refuerza con la ya confirmada incorporación de Marcos Parriego. Byron dejó su huella en Valdebebas hace años, donde se hizo viral por sus celebraciones con el baile del Papu Gómez, siendo aún muy pequeño. Los medios deportivos más rutilantes llegaron a hacerle extensos reportajes cuando tan sólo tenía ¡7 años! El club blanco decidió prescindir de él, ya que su evolución dejaba dudas, y ahora saldrá rumbo Barcelona. Nada más abandonar Valdebebas pasó un año por el Rayo y ahora pertenece al cadete B del Leganés, donde está brillando.

Byron es un extremo zurdo de mucha calidad, con facilidad para el gol y para asociarse con sus compañeros. Muy técnico. Lleva destacando meses en la cantera del Leganés, y el Barça lo ha tenido claro a la hora de ficharle. Se adelanta otra vez al Real Madrid, en su propio territorio, y de nuevo con un jugador de pasado blanco.

Su fichaje no ha sido fácil. El Real Madrid intentó esta misma temporada recuperarle desde prácticamente octubre, al mismo tiempo que el Barça. Para ello, se puso en contacto con el abuelo de la promesa, con quien vive solo en Fuenlabrada ya que su abuela falleció hace unos años y sus padres separaron sus caminos hace tiempo. El club blanco le trasladó al familiar de Byron su deseo de que regresara. En un principio, según varias fuentes consultadas, el tema de la Residencia les distanció en la primera reunión presencial que tuvieron. El chico quería vivir en ella, pero esto no suele ser lo habitual para los canteranos de Madrid y por el hecho de que no sobra mucho espacio.

El abuelo, cuentan en Valdebebas, se quedó algo frío con aquella conversación, debido a que necesitaba que el niño se independizara con todas las garantías, así que continuó hablando con otros clubes al mismo tiempo. Y ahí el Barça fue ágil, que se sentó con él y le persuadió. Una vez que el Real Madrid se convenció de que estaba dispuesto a ofrecerle todas las comodidades que demandaba el chaval y lo verbalizó, dada su excepcional situación familiar, Byron ya se había comprometido con el Barça.

Dado que Byron aún está en edad cadete y no cumple los 15 años hasta el próximo 17 de septiembre, el Barça no podía asegurarle más allá de tres años de contrato por ley. Los clubes no tienen permitido ir más allá hasta que los 16, cuando ya pueden hacer contratos laborales como profesionales. En el club blaugrana son muy optimistas con la progresión de esta joya y están muy concienciados en que ahora mismo la prioridad radica en que el niño se adapte lo mejor posible a su nueva vida en la Ciudad Condal.

El proyecto culé, usando los ejemplos de Lamine Yamal, Cubarsí o Balde, ya con espacio en el primer equipo, seduce a los talentos más jóvenes de España. Además de importantes ofertas económicas para convencer al entorno de los futbolistas. Con Marcos Parriego y Byron Mendoza, el Barça sigue pescando en Madrid.