Las notas a pie de página del triunfo del Real Madrid ante el Atlético: "En el centro del campo, vuelan"
"Esto es otra cosa", citaban a Relevo fuentes cercanas al equipo blanco al inicio del curso.
![Linda Caicedo y Caroline Weir se chocan la mano ante la mirada de Signe Bruun en el partido ante el Atleti. /Real Madrid](http://s1.sportstatics.com/relevo/www/multimedia/202501/06/media/cortadas/weirlinda-RzKqla03If7KZ8v1bxaoCeN-1200x648@Relevo.jpg)
"Esto es otra cosa", citaban a Relevo fuentes cercanas —y conocedoras del equipo que estaban armando en Madrid— al conjunto blanco en verano. "Vuelan. En el centro del campo, no las pillas", revelaba una futbolista rival que, con el curso ya empezado, se había enfrentado a ellas en las primeras jornadas y se 'desahogaba' antes de una entrevista con este medio.
Con el primer tramo de la liga y de la Champions superado, parece que estaban en lo cierto. Salvo algún altibajo como la derrota y la imagen dada ante el Barcelona (0-4). Las jugadoras del Madrid le dieron muchas vueltas a aquel partido por eso mismo, porque ellas también se sienten así, como se dice en el primer párrafo. "Estábamos muy frustradas todas, éramos conscientes de que hicimos un partido muy malo", reveló Sandie Toletti tras el encuentro. Otras, en petit comité, y sin excusarse del mal juego, aludían a una cuestión mental, de bloqueo.
Dejando a un lado ese partido, el caso es que el Madrid es otro. "El mismo cuento de siempre y luego, nada", pensarán algunos. Puede que acabe así, —nadie adivina el futuro, aunque, a veces, juguemos a ello— pero el camino es diferente. Y la victoria, por la imagen mostrada, ante el Atlético de Madrid alimenta ese pensamiento.
Madurez y mala leche
Contra el Chelsea, y a pesar del resultado (1-2), ya se habían visto brotes verdes. El conjunto blanco protagonizó, probablemente, sus mejores minutos de siempre en Europa. Ante el Atleti, sí que remató la faena. El conjunto dirigido por Alberto Toril dominó el encuentro de principio a fin y brilló en todas las facetas del juego. En defensa, Shei, María Méndez, Lakrar y Olga Carmona, impenetrables. Y en el centro del campo y en la línea atacante, más de lo mismo. Linda Caicedo activó el modo estrella y no hubo quien la parase.
Con el 2-1 —vaya golazo de Silvia Lloris— el partido se agitó. Sin embargo, el Madrid mantuvo la calma y supo aguantar el resultado. Quizá, otros años, las cosas hubieran acabado de otra forma. Y más allá del resultado, es la mejor noticia para la parroquia blanca. La madurez que la plantilla va adquiriendo con el paso de los minutos. Y que parece que ya tienen mala leche —en el buen sentido de la expresión—, una de los reproches más recurrentes del aficionado blanco a lo largo de estos años.
"Con el 1-2, ellas han querido empatar, pero en todo momento hemos tenido el partido controlado [...] Estamos muy contentos, es una gran victoria y refrenda un poco el trabajo y hacia donde vamos", afirmaba Alberto Toril en la televisión del club tras la victoria en Alcalá de Henares.
Más tarde, las jugadoras se mostraron eufóricas en sus redes sociales. El Madrid no ganaba al Atleti desde diciembre de 2022 y había muchas ganas de celebrar. "El derbi es blanco" decía María Méndez, "Empezando bien el año con una gran victoria" contaba Misa Rodríguez o el simple "Vamooooos" de Olga Carmona son prueba de ello.
Ahora, el reto más próximo del Madrid es la Supercopa de España. Olga Carmona y compañía se verán las caras con la Real Sociedad en las semifinales del torneo. Si superan la eliminatoria, se enfrentarán al ganador del duelo entre el Atlético de Madrid y el Barcelona. El tiempo dirá si este texto envejece mal o sigue manteniéndose en lo cierto.