Pintó el beso de Rubiales y ahora causa sensación en Polonia con un dibujo de Ewa Pajor: "Mientras hacía el mural pasaban niños y niñas ilusionados"
Diego Ojeda, autor de la obra de la delantera del Barça, habla con Relevo sobre su último trabajo y el resto de obras dedicadas al fútbol femenino.
Diego Ojeda, conocido bajo el pseudónimo 'nadiemedicearte', consiguió plasmar en Gniezno (Polonia) el sentimiento de admiración que él mismo tiene hacia Ewa Pajor. No es la primera vez que su arte verbaliza su entusiasmo por el fútbol femenino. Una de sus obras más famosas es en la que aparece Luis Rubiales dando un beso en la boca a Mike Tyson tras lo ocurrido en el Mundial de 2023: "El arte se utiliza para denunciar", manifestaba.
En esta ocasión, atiende a Relevo por su última pintura: un mural de Ewa Pajor pintado en la pared del polideportivo del Instituto de Cultura Europea de la Universidad Adam Mickiewicz. La devoción que siente por la futbolista polaca se nota en su voz. "Cuando pienso en hacer un mural ahí es por el significado y el poder. Mientras hacía el mural pasaban niños y niñas con las caras llenas de ilusión y veían cómo el dibujo de Ewa cada vez tenía más forma. Este es el objetivo, que cuando pasen a jugar tengan ese mural que les inspire y genere sentimientos de igualdad", cuenta el artista a Relevo.
En este caso, el arte retroalimentó al arte. La idea surgió a partir de una charla con Filip Kubiaczyk, un escritor e historiador que escribió un libro sobre la emancipación de la mujer a través del fútbol basado en un mural que el mismo Diego hizo en honor a las jugadoras de la Selección tras proclamarte campeonas del mundo y que decora una de las zonas más emblemáticas de Barcelona y que después desvelaremos. "Él me dio la idea. En Polonia la noticia de que Ewa había fichado por el Barça generó diferentes tipos de opiniones. Queríamos hacer un mural que homenajeara a Ewa y hacer que fuera una inspiración para todas las chicas polacas", explica Diego. Empezó a hablar con Filip de la posibilidad de viajar a Polonia para hacer el mural y allí se fue.
El muro, compuesto por la figura de Ewa Pajor en grande y una niña detrás, busca inspirar. Como todo el arte que hace Diego: "Mi estilo de arte tiene que ver con tocar sensibilidades y romper estereotipos a través de rostros y figuras del deporte que casi siempre tienen un valor mucho más elevado que las personas en general. El deporte inspira a los niños y niñas. Mi foco siempre está en poder moldear las opiniones de las nuevas generaciones. Vivimos en una sociedad que está muy contaminada por los prejuicios y los estereotipos que se han construido a lo largo del tiempo. Siento que mi papel como artista es poder construir opinión a través del arte y romper estereotipos tocando temas como el machismo, el racismo, temas como el Caso Rubiales que se mezclan muchas cosas, también el abuso de poder en este caso".
La niña que aparece en el mural, con el globo terráqueo bajo el brazo, da la espalda a Pajor, quien sostiene un balón en su mano izquierda y luce la equipación del Barça. "El significado, principalmente, es inspirar. Demostrar que todo es posible cuando tienes un sueño y que el mundo puede estar en tus manos si eres así, valiente, como Ewa. La niña podría ser ella o cualquier chica del mundo", desvela Diego, quien confiesa ser seguidor del fútbol femenino. Él es de Brasil y ha crecido en una cultura donde el fútbol femenino "es muy potente".
Su última obra, la de la delantera del Barça, lleva también un pedacito del artista, ya que también es seguidor de la jugadora polaca. La obra le llevó, aproximadamente, un mes: "Hablo también del trabajo creativo, de pruebas, intentos, perfeccionamiento, reflexión sobre el mensaje... En general es un proceso de un mes, más o menos, desde el inicio hasta la realización".
Hace una semana inauguró el nuevo mural de Ewa Pajor junto a Filip Kubiaczyk, con quien empezó a trabajar mano a mano para esta obra. Diego, confiesa, tiene entendido que la delantera del Barça sí ha visto el mural, a pesar de que no ha podido conocerla, aún, en persona: "Quiero poder regalarle y hacerle llegar la obra para que también la tenga ella en su casa. Aún no tengo la confirmación exacta, pero espero, con todo el corazón, que se dé esa oportunidad y pueda conocerla personalmente. Sería un completísimo honor poder conocerla y compartir un momento y una conversación con ella. Este mural está hecho exactamente porque veo en ella una referente, para las chicas polacas y para el mundo. Me encantaría, ya veremos".
'La capilla de las campeonas', en honor a la Selección
Además, también es seguidor a raíz de otros trabajos que había hecho anteriormente: "En Las Ramblas pinté a Alexia, pero no duró mucho porque hay mucha gente que vandaliza. Duran poco, son murales que no tienen una vida extensa pero la intención siempre es poder generar un impacto y una reflexión. Fue cuando ganó los dos balones de oro. Era para celebrar eso". Otro de sus dibujos, anteriormente mencionado en este texto, decora una de las calles del Born, aunque hay que estar atentos para poder verlo: "Se llama 'La capilla de las campeonas'. Está pintado en un techo como si fuese la Capilla Sixtina. Miras hacia arriba y ves como si hubiésemos roto el techo y ahí están las jugadoras flotando también con un balón de fútbol".
Ahora sus trabajos y sus dibujos son parte de Barcelona, ciudad en la que él vive: "Me encanta que siga existiendo porque es parte del paisaje de la ciudad y nadie lo ha vandalizado, que parece increíble. Tiene un lugar especial y es único, porque murales en un techo en la calle no existe ninguno". Cree que las jugadoras no saben de la existencia de este mural, por lo menos las de la Selección.
El arte como denuncia y su obra de Luis Rubiales dando un beso a Tyson
Cuando Diego dibujó a Luis Rubiales dando un beso en la boca a Mike Tyson tras lo ocurrido en el Mundial de 2023, tenía claras sus intenciones: "En este caso, un acto que fue abusivo enfrente de todo el público. Sirve como objeto para crear conciencia y ejemplo. Cuando pasa algo como eso, si no se hiciera algo al respecto, en el deporte se seguiría perpetuando cada vez más ese tipo de cosas. Cuando pasan ese tipo de cosas hay que poder decir algo al respecto para que la gente entienda que este tipo de prácticas son inadmisibles y, al mismo tiempo, tienen que ser castigadas de alguna forma por la ley, para que de alguna forma las personas que trabajan en el deporte tengan claro que ese tipo de prácticas tienen un castigo".
Diego vio con sus propios ojos, como todo el mundo en aquel momento, cómo el expresidente de la Federación daba un beso no consentido en la boca a Jenni Hermoso mientras las jugadoras subían a colgarse la medalla de Campeonas del Mundo y a levantar la copa: "Cuando hablamos de un abuso, de traspasar las líneas que conforman el deporte y el profesionalismo, porque estamos hablando de profesionales. Me parece una increíble herramienta para construir a través del ejemplo y de situaciones que pasan enfrente a nuestros ojos. Entonces es mucho más fácil coger esa situación y plasmarla desde una visión creativa en algo que pueda generar opinión y romper esos estereotipos".