Alberto Toril y una renovación llena de incógnitas con el Real Madrid

¿Y ahora qué? Tal y como adelantó Relevo este lunes, el Real Madrid mantiene su confianza total en Alberto Toril. De ahí que haya atado su continuidad en el club blanco. Este movimiento llega en medio de una crisis de resultados, aunque esta se ha visto rebajada tras empezar el año con victoria, y deja varios asteriscos. Pues el técnico cordobés habría firmado un contrato que le vincula a la entidad madridista más allá del banquillo blanco. Esto añade leña al fuego de las especulaciones sobre su posible llegada a otra sección del club si abandona su función como entrenador en el banquillo femenino.

Con esta posibilidad al margen, quedan otras preguntas sin responder tras la renovación del andaluz. El Real Madrid movió ficha tras ser eliminado en la fase de grupos de la Champions. Un mazazo que coincidió con un periodo de inestabilidad del equipo, que sólo ha ganado cinco partidos de los últimos doce que ha disputado. Sobre la mesa, las razones varían según quien las formule.

Para Toril y su cuerpo técnico la mala dinámica viene condicionada por la plaga de lesiones y una planificación deportiva que se quedó corta en verano. En los últimos meses se han registrado casi una decena de lesionadas, con algunas bajas de gran sensibilidad como la de Caroline Weir, MVP el curso anterior, u otras titulares como Linda Caicedo, Signe Brunn o Sandie Toletti. Estos contratiempos dieron respaldo a Toril en medio de la mala situación e hicieron que el club mantuviera su voto de confianza en el entrenador andaluz.

Las bajas y la falta de refuerzos para terminar de apuntar la plantilla blanca en verano han hecho que desde el cuerpo técnico se pidan refuerzos con urgencia en este mercado invernal. Un objetivo que se ha visto empañado después de que el Madrid se haya llevado otro duro golpe tras las calabazas de Bjorn, que ha terminado fichando por el Chelsea tras tenerlo atado con el conjunto madrileño.

Más allá de estos problemas, lo cierto es que el equipo no ha terminado de convencer con su juego durante la primera mitad de la temporada. La fragilidad defensiva ha lastrado al equipo en varios partidos y la baja de Caroline Weir ha hecho demasiada mella en la movilidad de su juego, al que le ha faltado chispa. Pese a todo esto, desde el club respaldan los argumentos del cuerpo técnico. Lo que coincide con un sector del vestuario que ha respaldado al técnico cordobés durante los momentos más delicados.

"Todo lo que pasa alrededor nuestra depende de nosotras y por eso somos la parte más responsable de todo lo que está pasando; en el fútbol siempre se señala al entrenador, no debemos buscar excusas, somos nosotras las que damos la cara en el campo, la cara más responsable de lo que está pasando somos nosotras", dijo Olga Carmona, una de las capitanas en una entrevista con La 1 durante esta Navidad. Como la lateral sevillana, otras futbolistas también han mostrado su apoyo a Toril, como el abrazo que le dio públicamente tras anotar un gol Athenea del Castillo. 

No obstante, hay una división de opiniones dentro del vestuario sobre la continuidad del técnico, cuya renovación fue anunciada a sus jugadoras antes de afrontar la cuesta de enero y un derbi en el que se vio a las jugadoras más unidas que nunca. "A veces tienes que ganar de estas manera para que sea un punto de inflexión. A partir de ahora vamos a ir recuperando jugadoras, vamos a crecer y vamos a estar mucho más estable y tener más confianza en nosotras; Esta victoria se la merecen las jugadoras porque han tenido la decisión para darle la vuelta y conseguir la victoria y estoy muy contento por ellas", aseguró Toril tras el derbi.

Mientras, desde la afición corren aires de malestar. Aunque equipo e hinchada firmaron una unión clave en la remontada ante el Madrid CFF en el primer partido del año, recientemente se han vivido varios capítulos de pitos y protestas en las gradas de Valdebebas. Con los octavos de final de la Copa de la Reina, en la que el Madrid luce como vigente subcampeón, ante el Betis este fin de semana, y la Supercopa, en la que habrá un Clásico en la semifinal, prevista para la próxima semana, el conjunto de Alberto Toril quiere revertir la mala situación con la que acabó el año.

En Champions no hay solución, disputando dos partidos por el honor tras su eliminación, pero quedan varios objetivos sobre la mesa. Consciente de ello y mientras siguen llegando ofrecimientos de entrenadores a las oficinas de la Ciudad Deportiva, el Real Madrid ha querido darle un respiro a Toril y sigue sin señalar a un culpable o culpables de lo que ha sucedido.

Todo ello en medio de una actividad frenética en sus despachos, donde hay hasta trece expedientes abiertos de renovación. Claudia Zornoza, Teresa Abelleira, Misa Rodríguez, Rocío Gálvez, Ivana Andrés, Athenea del Castillo, Kenti Robles, Sofie Svava, Freja Siri, Kathellen Sousa, Sandie Toletti, Hayley Raso y Naomie Feller finalizan su contrato el próximo mes de junio de 2024. Sus nombres abren un gran interrogante en la planificación deportiva del conjunto madridista.

Después de desaprovechar la oportunidad de conseguir más ingresos en la Champions, queda la duda sobre si el Real Madrid conseguirá la clasificación para competir en Europa la próxima temporada. Esto es clave para los presupuestos de la entidad blanca, por los ingresos que proceden de participar e ir avanzando de ronda en el máximo torneo continental.

Por el momento, el cuadro madrileño es tercero, empatado a puntos con sus rivales más cercanos: Levante, segundo, y Atlético de Madrid, cuarto. No conseguir atar su puesto europeo antes del final de temporada supondría una debacle histórica (nunca ha quedado fuera de la Champions desde su nacimiento como Real Madrid). De manera simultánea, las blancas sueñan con, como mínimo, repetir como finalistas en Copa y dar la sorpresa en la Supercopa. Un reto con una cercana resolución y en el que hay una gran motivación: acabar con las dudas si ganan por primera vez al Barça.

¿Y si ocurre lo contrario? En este caso, la renovación Toril tampoco se percibiría como un gran error para el Real Madrid, que se ha curado la espalda con un contrato en el que se guardan otros planes para el técnico más allá de su labor en el equipo femenino. De este modo, hay opción de que el cordobés no siga en el banquillo y continúe cumpliendo su periodo en otra sección y función. Aunque, sin duda, tanto esto como el resto de situaciones en las que se maneja el Real Madrid están llenas de incógnitas.