FÚTBOL FEMENINO

Radiografía de la crisis del Real Madrid: los pitos a Toril no 'suenan' en el club y un "déjales hablar"

El técnico cuenta con la confianza de la entidad madridista, que se aferra a la crisis sanitaria como principal motivo de la mala dinámica.

Athenea del Castillo, jugadora del Real Madrid, muestra su apoyo a Toril. /GETTY
Athenea del Castillo, jugadora del Real Madrid, muestra su apoyo a Toril. GETTY
Mayca Jiménez

Mayca Jiménez

"La gente no sabe el proceso… Déjales hablar. Seguimos trabajando. Concentrada en mejorar y obtener los resultados que deseamos". Sirvan estas palabras de Kathellen Sousa para entender, o intentar comprender, la situación actual del Real Madrid. La defensa central ha sido una de las señaladas por la debilidad defensiva del equipo blanco, que volvió a cosechar una dolorosa derrota en la pasada jornada ante el Sevilla (1-3). Y ya van tres en Liga y una más en la fase de grupos de la Champions, donde sólo ha sumado un punto de seis posibles. La peor racha de la era Toril.

¿Se puede entonces hablar de crisis? Entendiendo esta palabra de manera literal (según la RAE, una 'situación mala o difícil') no quedan dudas. En el Real Madrid se puede y se debe hablar de crisis. Aunque desde sus entrañas se intente apaciguar un momento de tensión en el que lo que menos se respira es tranquilidad. El terremoto deportivo ha dejado varias réplicas. Primero fue el Levante. Luego, la manita en el Clásico, el Hacken y la mencionada derrota ante Sevilla. Cuatro crueles azotes en medio de las dudas deportivas y de una alerta sanitaria que no ha dejado de crecer.

En el ojo del huracán un plan que hace aguas y una ausencia de decisiones. Y, en medio de ambas lagunas, otra mayor: nadie señala a un culpable claro. Aunque en el fútbol la tendencia recaiga siempre en señalar al entrenador, hay paciencia con Alberto Toril, que llegó al equipo femenino a finales del mes de noviembre de 2021. Es un hombre del club y la plena confianza que hay depositada en él se mantendrá hasta que surja un 'hasta aquí' desde las altas esferas. Por el momento, se le ha dado un voto de confianza, haciendo oídos sordos al malestar de la afición.

En el Di Stéfano, el ambiente volvió a ser irrespirable en el último partido de Liga, con pitos y otro capítulo más de alto voltaje entre el vestuario y la grada. De hecho, uno de los miembros del staff, el técnico auxiliar y encargado de la preparación física, Daniel Sánchez Sánchez, fue expulsado por "encararse con un sector del público", según detalló la árbitra en el acta del encuentro. No es la primera vez que este asistente ve una roja en esta temporada y su tropiezo en la misma piedra confirma que hay algo más que murmullo en torno a este equipo.

No sólo es Toril: un mal plan y las lesiones

Con el caso de Toril al margen, lo cierto es que es difícil definir el origen de una crisis que abarca varias parcelas. No sólo toca al técnico cordobés, sino que deja sobre la mesa una cuestionable planificación deportiva y una crisis sanitaria que ha dejado al equipo sin ocho de sus futbolistas más destacadas. Esto último no tiene solución a corto plazo, con varias bajas hasta el próximo año como Linda Caicedo o las lesiones de larga duración de estrellas como Caroline Weir. Y a ello se aferran como primer argumento a la mala dinámica.

Sus ausencias han hecho mella en una plantilla que se quedó corta en verano y que mira a enero con urgencias. Todo ello en medio de un ambiente distante entre la dirección deportiva y el vestuario, con una relación fría y estrictamente profesional entre Toril y Ana Rossell. Por su parte, el staff ha echado en falta un mayor fondo de armario de cara a periodos de necesidad como el que afrontan. Y las corrientes críticas desde la afición apuntan más allá, con un juego difuminado sin pilares como Weir y una defensa que se tambalea en cada partido entre errores e imprecisiones.

Teresa Abelleira, en redes sociales.  INSTAGRAM
Teresa Abelleira, en redes sociales. INSTAGRAM

Mientras, un sector de las futbolistas del Real Madrid respaldan a Alberto Toril, al que incluso Athenea del Castillo mostró su apoyo públicamente. El técnico cordobés hizo lo mismo con ella en los momentos más duros durante el conflicto en la Selección y ella se lo ha devuelto en forma de lealtad. Su abrazo fue otro aliento para Toril, que acaba contrato este curso.

Desde el club confían en que pueda salvar esta situación. El equipo tiene un hilo de vida en la fase de grupos de la Champions, con dos partidos decisivos ante el Paris FC (14 y 20 de diciembre) y sigue pisando suelo europeo en la Liga F, con otro compromiso más antes de cerrar 2023. La crisis es real y sólo un arreón antes de Navidades podría frenar la hemorragia. Al menos, para comerse el turrón sin disgustos.