Un internacional suizo se retira del fútbol por su religión y su club no da crédito: "Todo debería tener sus límites"

Silvan Wallner tenía todo para triunfar en el fútbol. Nacido en 2002, ya había defendido la camiseta de Suiza Sub-21 y era un jugador importante en el Blau Weiss Linz, un equipo de la parte alta de la Bundesliga austríaca. Sin embargo, ha decidido colgar las botas para sorpresa generalizada. Sus motivos no son otros que sus firmes creencias religiosas, una decisión que incluso su entrenador ha puesto en cuarentena.

El futbolista ha decidido poner fin a su carrera de forma inmediata, al considerar que no puede conciliar su fe con su trabajo como profesional. Este mismo domingo, pese a comenzar la temporada con el club de forma normal, han comunicado oficialmente su adiós. Silvan Wallner lo explica con detenimiento, tras agradecer a los responsables de la entidad su comprensión y a su equipo el cariño mostrado en este tiempo.

"Soy un cristiano devoto y leo la Biblia. Quiero seguir a Jesucristo y el día de descanso bíblico se ha vuelto importante para mí. Para mí, como profesional, esto significa que a partir de ahora no quiero jugar al fútbol profesionalmente los sábados", desvela el ya exfutbolista.

¿Por qué el sábado? Varios medios de comunicación habían informado de que Wallner era miembro de la Iglesia Libre Adventista del Séptimo Día, aunque él lo ha negado en declaraciones públicas: "Aún no soy miembro de ninguna iglesia". Cabe recordar que la mayor parte de corrientes de fe entienden el domingo como el Día del Señor. Pocas, entre las que se incluye la presuntamente suya, consideran que es el sábado.

De momento, el exjugador se resigna a comunicar públicamente esto, mientras en su equipo no dan crédito a esta repentina decisión que no esperaban. Milos Malenovic, director deportivo, opinó sobre este peculiar asunto: "Me sorprendió mucho que quisiera poner fin a su carrera. No me esperaba eso en absoluto de un jugador tan joven. Siempre me pareció muy estable".

Desde luego, Malenovic no parece estar conforme no solo con la decisión, sino con los motivos que ha esgrimido Wallner: "Todo debería tener sus límites, el fútbol también se juega los fines de semana. Si ya no lo quiere y cree que es el camino correcto, entonces hay que aceptarlo". A regañadientes, no le ha quedado otra al Blau-Weiss Linz que asumir la baja inmediata de su jugador, aunque no lo comprendan.

Noticias de este estilo dejan perplejo a aquel al que le llegan, si bien se han dado varias veces a lo largo de la historia. El portero Carlos Roa decidió colgar las botas con solo 29 años, en 1999, cuando estaba en el momento más álgido de su carrera deportiva y con una oferta del Manchester United sobre la mesa. Una decisión que tampoco dejó indiferente a nadie y más cuando escucharon sus motivos.

Carlos Roa decidió dedicar su tiempo a colaborar con la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Meses después, el guardameta regresó al fútbol, pero jamás pudo recuperar la forma física. El Mallorca le obligó a cumplir los dos años de contrato que le restaban, pero el titular fue Leo Franco.

Hace tan solo unas semanas, AJ Griffin también dejó el deporte por causas religiosas. En su caso, no se centraba en un día en concreto: "Dejé el baloncesto para seguir a Jesús. Dejar el baloncesto me ha permitido dedicarme al ministerio (a la Iglesia) a tiempo completo y servir verdaderamente al Señor con todo mi corazón". Seleccionado en el número 16 del Draft en 2022, jugó una gran temporada de rookie con los Atlanta Hawks, incluso anotando un par de canastas ganadoras.