Ancelotti exprime a Fede Valverde hasta convertirle en un caso único en Europa
El uruguayo marcó en Cartagena, lleva tres goles en los últimos cinco partidos… y sigue sin descansar: es el único jugador de las grandes ligas que ha disputado 28 partidos como titular.
Fede Valverde (26 años) es humano, aunque no lo parezca. En medio de la plaga de lesiones que asola al fútbol mundial, las quejas por el calendario y la sobrecarga que generan los parones de selecciones, el uruguayo no descansa ni contra la Deportiva Minera y abrió el marcador en Cartagena en el minuto cuatro. El Halcón, que lleva tres temporadas sin apenas descanso ni lesiones, suma tres goles en los últimos cinco partidos y evidencia que ha alcanzado el estatus de estrella en este Real Madrid. Nunca había enlazado una racha anotadora así. Este curso se eleva ya hasta las siete dianas, en promedio de superar su mejor registro (12 en la 22-23).
El '8' superó al portero con un remate acrobático con la derecha. En cualquier caso, lo que más llamó la atención de su partido fue que saliese como titular. Ancelotti se dejó en casa a Courtois y Rüdiger, dejó en el banquillo a Vinicius, Mbappé, Rodrygo o Tchouameni… y de los cracks sólo escogió a Valverde para jugar de inicio. Curiosamente, el charrúa es el único miembro de la plantilla que ha jugado todos los encuentros de lo que va de campaña y alcanza números de participación que asustan. En toda Europa, tan sólo él ha disputado 28 duelos como titular. Pape Sarr, del Tottenham, tuvo minutos en 29, pero en algunos apareció desde el banquillo.
En esta 24-25, Valverde suma 2.281 minutos sólo con su club. Con Uruguay tampoco se ha perdido ningún parón y carga con otros 450'. Sus números y su continuidad impresionan desde que en la 22-23, afianzado ya en el equipo, Carletto le otorgase un papel principal. Esa temporada disputó la friolera de 3.950', sólo por detrás de Vinicius (4.253), Courtois (4.140) y Militao (3.948) y por encima de piezas de la importancia de Kroos (3.386), Rodrygo (3.581) o Benzema (3.240). Y, por supuesto, entremedias acudió a dos parones con Uruguay y jugó el Mundial de Catar. No paró. La campaña pasada estiró todavía más las cifras: 4.250' con el Real Madrid y otras cuatro ventanas con el combinado charrúa.
No hubo futbolistas con más participación a las órdenes de Ancelotti (Rüdiger, con 3.987', le siguió a cierta distancia) y vapuleó los registros de Vinicius (se lesionó varias veces), Bellingham (también cayó), Rodrygo o Camavinga. En la comparación con otros equipos de LaLiga, nadie fue capaz de seguirle el ritmo ni en el Barça (Gündogan lideró el ranking con 4.150') ni en el Atlético (4.090' de Witsel) ni en la Real (Zubimendi disfrutó de 3.704'), los otros tres conjuntos españoles que estuvieron en la Champions. Y, por supuesto, el uruguayo se marchó al terminar a la Copa América, lo jugó prácticamente todo con Bielsa y llegó hasta los duelos finales al acabar la Celeste tercera. En total, se marchó hasta los 5.540 minutos, el equivalente a más de 60 partidos completos.
Este curso va por el mismo camino. Hasta ahora, sólo Rüdiger había participado en todos los partidos. Hoy, Valverde se queda ya solo. Y no descansará en la Supercopa. Aunque en su entorno exista cierta preocupación por este asunto y temen que se rompa, el Halcón no quiere parar y Ancelotti corresponde a sus deseos. Al filo del descanso, con un tiro que desvió el meta, rozó el doblete. Luego el míster le cambió por Ceballos al intermedio. Un motor que no se gripa... de momento.